Gestión externa de residuos y responsabilidad social compartida

Un punto importante en el desarrollo de este tipo de compromiso ha sido la concientización, cada vez más profunda, sobre la responsabilidad individual y colectiva de dar un buen uso a todo lo que nos rodea, cuidar el medio ambiente, reciclar las basuras, ahorrar energía, reducir la contaminación de gases que producen calentamiento atmosférico y todas aquellas emisiones que en el desarrollo de la vida, industrial, personal y profesional están presentes.

En el hogar podemos, ya con un conocimiento amplio sobre los residuos, clasificar los desechos, reciclarlos y aquellos peligrosos rotularlos y darles una disposición más adecuada sin verterlos a los sifones de aguas negras o cualquier otro tipo desagüe donde se generara más contaminación y menos posibilidad de recuperación, sobre todo al agua; lo mismo que en nuestros lugares de trabajo, tanto oficinas, como plantas procesadoras o productoras o ensambladoras, con presencia de sustancias químicas peligrosas o sin ellas, la disposición final de las sustancias peligrosas y todo tipo de residuo compromete a las organizaciones a dar un manejo asertivo a ellos y cumplir con las disposiciones, reglamentos, normas y leyes de conservación y protección del ambiente, donde no es solo la responsabilidad de las directivas, sino de todos y cada uno de los que hacen parte de la organización.

Cuan por motivos de cantidad y peligrosidad de las sustancias peligrosas y los diferentes tipos de desechos se requiere de un manejo profesional más adecuado, existen empresas que se dedican a la recolección, transporte, tratamiento y disposición final de residuos, basuras, sustancias peligrosas, etc., obviamente autorizados por la ley y cumpliendo las normas medio ambientales como el caso de la empresa TECNIAMSA, donde el señor Julián Duque Jaramillo, en presentación mediante YouTube,  indica el objeto social de la empresa encaminado  a minimizar el impacto ambiental y describe el proceso que se realiza una vez es recogido el material o residuos peligrosos para su disposición final a través de un proceso térmico y físico tal como sucede en la Planta de Mosquera en Cundinamarca donde una vez llega el material es pesado, posteriormente se hace una inspección y clasificación de desechos, un almacenamiento, nuevamente una clasificación sobre residuos peligrosos, tratamiento mediante celdas de seguridad a algunos de ellos, incineración en hornos (tratamiento térmico) a temperaturas de 800 grados centígrados, almacenaje a otros desechos en especial los biológicos (patógenos) en cuartos fríos y almacenaje en uno de los predios de cien mil metros cúbicos de capacidad que poseen en Mosquera, los cuales cubren con capas napa freáticas, bentonita  y material alcanzando una altura de diez metros, posterior a este nivel se realiza un último recubrimiento con césped para lograr un óptimo paisajismo. Todo esto cumplido y desarrollado por personal capacitado, entrenado e instruido, quienes en todo momento usan son elementos y equipos de protección personal de carácter obligatorio, según las normas vigentes al respecto.

La celda de Seguridad está diseñada para aquellos productos de gran contaminación y que sus procesos de degradación están por encima de los cinco años (equipos celulares, baterías, equipos de radiación etc.) y que al enterrarlos en estos depósitos de casi ocho metros de profundidad quedaran en el lugar hasta tanto la tecnología se desarrolle y provea un sistema o mecanismo de disposición final más adecuado, seguro y menos peligroso para el medio ambiente.

Otra de las alternativas mostradas en los videos acerca del tratamiento y disposición final de desechos,  son las expuestas por el “profesor O”, donde muestra siempre las posibilidades de protección al medio ambiente, a través de maneras simples y eficientes, alternativas dependientes para todo tipo de circunstancias como son los casos de evitar cocinar con leña cambiándolo por la utilización de la luz solar a través de un armazón y plato metálico cóncavo; la utilización de los desechos biológicos de los animales evitando la contaminación a través de la producción de gas para alumbrado y cocina; el uso de bombillos fluorescentes, ahorradores de energía y la descalificación de los bombillos incandescentes; el reciclaje de las basuras, desde el hogar hasta la industria, disminuyendo la producción buscando alternativas distintas; ahorro de la energía eléctrica, manteniendo los equipos eléctricos desconectados, uso de la luz restringida durante el día y el cambio de electrodomésticos de alto consumo por otros modernos y ahorradores; el mantenimiento técnico mecánico de los automóviles para controlar la emisión de gases contaminantes, posibilidades de cambio de tipo de combustible de gasolina o diésel por gas; la utilización a futuro de vehículos eléctricos y no de combustibles fósiles; uso de medios compartidos de transporte, alternancia de vehículo, por uso de transporte público, bicicletas, desplazamientos a pie, etc.; acondicionamiento en plantas, fabricas, procesadoras etc., de equipos, filtros y alternativas para la reducción de emisiones y transformación de las mismas en beneficio del medio ambiente; recolección y puntos de entrega de bombillas, baterías, celulares, medicamentos vencidos y todo aquello que sea residuo peligrosos a través de grandes almacenes, puntos de entrega y lugares públicos de disposición, junto con alternativas de recepción del fabricante a través de promociones de reducción en precios o bonos para recompras; el uso adecuado del agua, el reciclaje y reutilización de la misma para jardines, pisos etc., control al desperdicio y alternativas de cuidado en beneficio económico y ambiental. Todo lo anterior y muchas otras ideas más, como alternativa de protección del medio ambiente y la reducción de contaminación por emisión de gases.

Tanto en el hogar, el trabajo, la industria o cualquier tipo de actividad individual, colectiva u organizacional podemos poner en práctica los sistemas de gestión de residuos, tanto simples como peligrosos y contribuir al ahorro de energía, la reducción de emisión de gases y el riesgo a la exposición de basuras y todo tipo de contaminación. Saber reciclar, distribuir los desechos, recoger lo reutilizable, clasificar, almacenar, disponer y entregar a otros o empresas que continúen el proceso final es la alternativa contributiva hacia el problema de la contaminación.

La decisión es personal por cuanto el conocimiento en gran parte se posee.

WEBGRAFIA

Video observado el 27112015 en YouTube desde el link: https://www.youtube.com/watch?v=t-V8qzBoBU0

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Cruz Rocha Héctor Miguel. (2016, agosto 1). Gestión externa de residuos y responsabilidad social compartida. Recuperado de https://www.gestiopolis.com/gestion-externa-residuos-responsabilidad-social-compartida/
Cruz Rocha Héctor Miguel. "Gestión externa de residuos y responsabilidad social compartida". gestiopolis. 1 agosto 2016. Web. <https://www.gestiopolis.com/gestion-externa-residuos-responsabilidad-social-compartida/>.
Cruz Rocha Héctor Miguel. "Gestión externa de residuos y responsabilidad social compartida". gestiopolis. agosto 1, 2016. Consultado el . https://www.gestiopolis.com/gestion-externa-residuos-responsabilidad-social-compartida/.
Cruz Rocha Héctor Miguel. Gestión externa de residuos y responsabilidad social compartida [en línea]. <https://www.gestiopolis.com/gestion-externa-residuos-responsabilidad-social-compartida/> [Citado el ].
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