Competitividad empresarial a través de tecnologías de gestión

Indudablemente el mayor compromiso de las organizaciones empresariales es como lograr la competitividad, derivado de los procesos dinámicos y de cambio que han surgido con base en el movimiento de interdependencia e interrelación entre países como es la globalización, de la cual surgen los lineamientos de competitividad, que tienen que desarrollar las empresas para tener mayores oportunidades de negocio.

Este compromiso, se deriva de la gran necesidad que tienen las micro, pequeñas y medianas empresas en nuestro entorno, de adaptarse e integrarse a la variedad de cambios y de necesidades dentro de la diversidad cultural, que surgen de las maneras o formas de llevar a cabo acciones que sustenten la competitividad de las empresas en la era de la información y tecnología, utilizando sistemas, métodos, herramientas, procesos de trabajo conocidos como tecnologías de gestión, que desarrolladas de manera efectiva y con base a las necesidades de cada empresa y su fundamentación estratégica, generaran la competitividad empresarial.

Podemos definir tecnologías de gestión como la capacidad de tomar decisiones de manera responsable, para coordinar los recursos disponibles y lograr resultados, orientados a las necesidades de clientes, esto implica considerar las interacciones principalmente entre el entorno, la estrategia, estructura, procesos, personal y productos y servicios que deseen obtener, logrando así tener fuertes ventajas competitivas que distingan a una empresa de la competencia, implica desarrollar y transformar escenarios, dentro del contexto de la globalización.

Globalización implica hablar de competitividad, cambios y transformación, en las organizaciones. Hoy, el cambio es la única constante que prevalece en el entorno de las mismas. ¿Como entonces, tendrán que hacerle las empresas para adaptarse e integrarse a los cambios que surgen derivado del dinamismo, la heterogeneidad, la incertidumbre y la excesiva complejidad en la cual se desarrollan?

El desarrollo será el punto de inicio que comprometa a las organizaciones a transformar la competitividad del entorno o ambiente con los cuales tiene interrelación directa. Es cierto que en estos tiempos de modernidad y cambio, las empresas para lograr resultados y ser competitivas interactúan en ambientes complejos y dinámicos, inmersos en la era de la información y la tecnología, tendencias que influyen en los diferentes procesos económicos y empresariales, que impulsan a que las empresas desarrollen estrategias de innovación y desarrollo tecnológico, que les permita lograr la competitividad en el marco de la globalización.

Se dice fácil, sin embargo para la base de la economía de nuestro país, que esta conformada por las micro, pequeñas y medianas empresas, no ha resultado nada fácil entrar en estos procesos, en los cuales se requiere principalmente, profundizar en las bases estratégicas que fundamentan su ser y quehacer continuo, a través de sus competencias esenciales de negocio (productos-servicios), creando estructuras flexibles y variables, procesos dinámicos internos congruentes, para lograr mayor capacidad de respuesta, y así afrontar retos y realidades empresariales, que emergen de la complejidad del ambiente en el que se interrelacionan individuos, grupos y organizaciones.

Por eso, es muy importante tomar en cuenta el cambio; ya que es esencial para el movimiento y dinamismo empresarial. Una forma de crear y mantener el cambio es mediante la planeación estratégica, en la cual es de suma relevancia las elecciones implicadas en el desarrollo de una estrategia, ya que de aquí se desprende el proceso de toma de decisiones de una organización, para así llegar a las fuerzas que contribuyen al plan estratégico.

La estrategia organizacional empieza con el deseo de una organización de superar el desempeño del mercado. Una estrategia es un compromiso de emprender una serie de acciones en vez de otras y este compromiso describe necesariamente una asignación de recursos y de procesos que darán continuidad para evaluar el desempeño de la organización.

Derivado de la anterior podemos deducir que la competitividad obliga y compromete a las organizaciones a transformarse, considerando los factores o elementos internos y externos en la configuración de las empresas.

La palabra empresa proviene del vocablo “emprender” es decir, iniciar algo; empezar un conjunto de actividades encaminadas a un fin específico y predeterminado.

Las empresas en nuestro entorno, para ser competitivas, necesitan urgentemente reconfigurarse considerando la información y tecnología, para innovar procesos de cambio y mejora. En este contexto las micro, pequeñas y medianas empresas se han visto considerablemente afectadas por la extensión de la competitividad a escala mundial. En estos escenarios, mantener la cuota de mercado equivale a incrementar permanentemente la eficacia, para que de esa manera se pueda dar respuesta a los requerimientos de los clientes y a la fuerte acción de la competencia.

Las micro, pequeñas y medianas empresas, constituyen en cualquier país, el grupo predominante, en algunos casos superan el 99% de unidades económicas, contribuyen significativamente a la creación de empleo, a la generación de riqueza y además satisfacen necesidades en ciertos mercados que son poco atractivos para las grandes empresas. Son además el punto de partida en el que se forman grandes empresarios y el vehículo para el autodesarrollo de millones de personas.

Sin embargo son pocas las micro, pequeñas y medianas empresas que logran superar los retos de supervivencia, quienes emprenden la creación de las empresas, lo conciben desconociendo los riesgos de estabilidad y permanencia en la sociedad de las organizaciones. Según Mauricio Lefcovich “La experiencia demuestra que el 50% de dichas empresas quiebran durante el primer año de actividad, y no menos del 90% antes de cinco años. Según, revelan los análisis estadísticos, el 95% de estos fracasos son atribuibles a la falta de competencia y de experiencia en la dirección de empresas dedicadas a la actividad concreta de que se trate”.

De acuerdo a los datos anteriores, definitivamente el crecimiento de las mismas, está sujeto o depende invariablemente de la competitividad que cada una genere, a través de adecuados modelos de dirección y gestión. Aplicados en el mercado internacional, nacional o local, en donde las empresas compiten entre si, involucradas en los diversos sistemas productivos, esquemas institucionales y organizaciones sociales, en los que la empresa es un elemento importante, integrado en una red de interrelaciones y vinculaciones con el sistema educativo, la infraestructura tecnológica, las relaciones gerencial-laborales, los órganos institucional público y privado, el sistema financiero, etc.

El desarrollo de adecuados mecanismos de gestión, permite a las empresas efectuar acciones, que las posicionen con ventajas competitivas dentro de la industria o bien la sociedad de las organizaciones. Dichas acciones significa efectuar procesos de gestión, mismos que combinados con el talento humano, la infraestructura y relaciones, son conocidos como tecnologías de gestión, que aplicadas de manera inteligente, gestionaran el conocimiento utilizado, en el trabajo dentro de una organización, a través de metodologías, que permiten realizar actividades de planeación, ejecución, evaluación y mejoramiento, de forma secuencial, generando modelos para elaborar las acciones, en las organizaciones, buscando ser mas profesionales.

Para ello, primero las empresas necesitaran diagnosticar cuales son sus necesidades, segundo analizar la funcionalidad de las tecnologías y la posibilidad de combinar varias de ellas. Posteriormente seleccionar las que considere conveniente, para finalmente empezar a construir su propia tecnología de gestión, y ser competitivas.

Las tecnologías de gestión no son nuevas hoy en día, podríamos decir que desde la revolución industrial, se han desarrollado diversas y diferentes tecnologías de gestión, mismas que han beneficiado a que las empresas sean más productivas. Sin embargo, en la actualidad las empresas no solo requieren ser productivas, sino lograr la competitividad de las mismas, derivado de la capacidad, para conservar sistemáticamente ventajas comparativas que le permitan conseguir, sustentar y optimizar una determinada posición en el entorno socioeconómico, hasta alcanzar ventajas competitivas sobre sus competidores. Es así que, las tecnologías de gestión tendrán que aplicarse o desarrollarse con el objetivo de alcanzar esa capacidad, dentro de los estándares requeridos, en cada contexto de interés dentro de la globalización.

Hay una gran diversidad de tecnologías de gestión, en el siguiente gráfico se muestran las veinticinco (25) más utilizadas actualmente en el ámbito mundial según la investigación realizada por Bain & Company.

25 tecnologías de gestión más utilizadas

Fuente de Información: “Management tools and trends 2007”, documento elaborado por: Darrell Rigby y Barbara Bilodeau de Bain & Company.

La rápida y correcta aplicación de estas herramientas en la empresa forma un papel muy importante en el nivel de crecimiento y desarrollo de esta misma. Es por eso que se encuentra de suma importancia el conocimiento, uso y aplicación de estas herramientas, para lograr, crecimiento y desarrollo empresarial significativo, y así mantener a las micro, pequeñas y medianas empresas dentro de las exigencias de los diferentes mercados en el marco de la globalización.

La importancia de investigar y cuestionar el tema de tecnologías de gestión, para la competitividad de las empresas, radica en determinar ¿cual o cuales tecnologías de gestión se pueden desarrollar con los recursos que tiene la empresa? y ¿cuales se pueden gestionar generando alianzas que favorezcan la competitividad?

Es decir, ¿realmente el desarrollo de tecnologías de gestión favorece la competitividad? ¿Los beneficios de la aplicación de cualquier tecnología de gestión, son los mismos para la micro, pequeña y mediana empresa? ¿Cuales tecnologías de gestión son las que producen la efectividad, considerando las necesidades de la empresa?, ¿Como se puede generar la tecnología de gestión que favorezca la competitividad dentro del marco de la globalización?. Son algunas de las preguntas que surgen y que provocan, la búsqueda de las tecnologías de gestión, que de manera integral desarrollen cambios en el interior de las empresas, dando como resultado su posicionamiento, transformando el entorno que lo rodea.

Entonces podemos concluir que tal vez no existe un modelo estandarizado que de cómo resultado las Tecnologías de Gestión ideales y aplicables a cualquier empresa, sin importar tamaña, giro, naturaleza. etc. es cierto que para desarrollarlas es necesario considerar la naturaleza e insuficiencias de cada una de las empresas u organizaciones, así como de sus clientes y mercado, para innovar generando el conocimiento a través del talento humano, la estructura, relaciones y procesos, que generan mayor competitividad, optimizando recursos y satisfaciendo necesidades, orientadas a los requerimientos de los clientes y especificaciones de cada uno de los mercados en los cuales la empresa desea competir, por medio de ventajas competitivas, fundamentadas en sus capacidades esenciales que la distinguen en el marco de la competitividad global, en la era de la información y tecnología.

Obteniendo como resultados que las empresas progresen en sus conocimientos sobre las distintos maneras de llevar a cabo las actividades de interrelación y vinculación dentro de la gestión interna y externa de las organizaciones y el desarrollo de los procesos humanos y administrativos, reconociendo no solo la naturaleza y problemáticas diversas, que se presentan en las organizaciones públicas y privadas, lucrativas y no lucrativas, sino también una mejor comprensión de la dinámica del funcionamiento de las mismas y del entorno globalizado.

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Macías Gómez Luz Elena. "Competitividad empresarial a través de tecnologías de gestión". gestiopolis. diciembre 17, 2008. Consultado el . https://www.gestiopolis.com/competitividad-empresarial-tecnologias-gestion/.
Macías Gómez Luz Elena. Competitividad empresarial a través de tecnologías de gestión [en línea]. <https://www.gestiopolis.com/competitividad-empresarial-tecnologias-gestion/> [Citado el ].
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