Administración y dirección de empresas, conceptos y técnicas

Este módulo introduce al alumno en los conceptos y técnicas de administración y dirección de empresas y a comprender el significado, la naturaleza y el alcance de la función de administrar una empresa o gestionar uno de sus subsistemas. Permite tener una visión general de la empresa, sus funciones, procesos y componentes, y permite comprender el lenguaje empresarial y de los negocios.

Se dirige al entendimiento del funcionamiento de la empresa, de forma global como un sistema, de cada una de sus partes o subsistemas, de cómo puede afectar cada una de las decisiones empresariales al conjunto de la empresa, a su situación económica y financiera, y a entender la empresa como un sistema abierto en continua relación con su entorno.

Plantea y da a conocer la problemática asociada a la actividad empresarial, a la toma de decisiones en los diferentes campos de la administración, así como algunas de las técnicas y herramientas disponibles para facilitar su resolución. De forma general, da a conocer la naturaleza del trabajo directivo, sus roles y aptitudes necesarias.

Capacita para aprender a analizar la situación económica y financiera de una empresa y saber gestionar la información de tipo económico para la toma de decisiones, así como para desarrollar habilidades para la determinación de la visión, misión y los objetivos de la empresa en el marco de la ética empresarial y conocer las bases de la planificación y de la estrategia empresarial para la toma de decisiones sobre los procesos, los productos, los mercados y la implantación territorial.

En suma, el aprendizaje formal y total del módulo induce comprender las organizaciones empresariales y su dirección:

  • Clases y tipos de empresas.
  • Funciones empresariales.
  • Nuevas formas organizacionales en la nueva economía.
  • Integración de los procesos y de los recursos en la empresa.
  • Dirección de la empresa.
  • Pasos en la creación de una empresa.

Los objetivos del módulo son los que se consideran en la tabla siguiente:

Capítulo 1 .- Empresa

1.1 Introducción

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La empresa se puede definir como una unidad económica de producción, característica de la economía de mercado, en la cual, combinando los factores capital (herramientas, máquinas entre otros) y trabajo, se realizan actividades de producción, distribución o realización de servicios, organizados adecuadamente con objeto de obtener, con riesgo, un beneficio o renta.

Actualmente se ha complementado su objeto único de obtener beneficios, por el de alcanzar unos determinados objetivos globales:

  • Económicos: obtener beneficios.
  • Técnicos: producir bienes necesarios a la sociedad y su entorno.
  • Humanos: satisfacer a los trabajadores a través de retribuciones adecuadas, trato correcto, e integrar a los mismos en la empresa.
  • Sociales: atender a las necesidades de la sociedad a través de los impuestos.

De forma general, las principales características que definen a toda empresa son:

  • La empresa es un conjunto de factores de producción entendiendo como tales los elementos necesarios para producir (bienes naturales o semielaborados, factor trabajo, energía, maquinaria y otros bienes de capital), factores mercadotécnicos, pues los productos no se venden por si mismos, y factores financieros, pues para coordinar estos factores es preciso efectuar inversiones y éstas han de ser financiadas de algún modo.
  • Toda empresa tiene fines, u objetivos, que constituyen la propia razón de su existencia. Tradicionalmente, en el sistema de economía de mercado estos fines se han asociado a la maximización del beneficio. En la actualidad, el abanico de objetivos que se maneja es más amplio, aunque, si se ha de señalar un objetivo central, sería el de la maximización del valor de la empresa.
  • Los distintos factores que integran la empresa se encuentran coordinados para alcanzar sus fines. Sin esa coordinación la empresa no existiría; se trataría de un mero grupo de elementos sin conexión entre sí y, por tanto, incapaces de alcanzar objetivo alguno. Esa coordinación hacia un fin la realiza otro factor empresarial que es la dirección de la empresa. El factor directivo planifica la consecución de los objetivos, organiza los factores, se encarga de que las decisiones se ejecuten y controla las posibles desviaciones entre los resultados obtenidos y los deseados. En definitiva, este factor se encarga de unir los esfuerzos para conseguir los objetivos globales del sistema empresarial.
  • La empresa es un sistema. Un sistema es un conjunto de elementos, o subsistemas, interrelacionados entre sí, y con el sistema global, que trata de alcanzar ciertos objetivos. Por consiguiente, de lo reseñado anteriormente se deduce la evidencia de que la empresa es un sistema.

1.2 Empresa en contexto

1.2.1 Concepto y generalidades

La empresa es la célula creadora de riqueza de que dispone la sociedad; una riqueza que permite el desarrollo económico y el consiguiente acceso a la cultura, salud, seguridad y todos los elementos que proporcionan bienestar y calidad de vida.

Las empresas, como si se tratara de algún organismo vivo, nacen, se desarrollan y eventualmente mueren. Desde el punto de vista tradicional, una primera definición de carácter económico sería considerar la empresa como una entidad que organiza con eficiencia los factores económicos, produciendo bienes o servicios para satisfacer las necesidades del mercado y con ánimo de alcanzar ciertos objetivos, entre ellos el lucro.

La palabra empresa tiene su raíz etimológica del latín prehendere que significa ‘emprender una actividad que implica trabajo o que presenta dificultades’, en consecuencia, en una primera aproximación podríamos considerar el empresario como un emprendedor, aceptación vigente en la actualidad aunque parcial e incompleta.

En el idioma francés, empresario es un entrepreneur y en inglés entrepreneurship. Ambas expresiones tienen el mismo significado y nos indican una faceta del empresario, en especial la de creador de la empresa.

El nacimiento de la empresa tal como se considera actualmente se inicia en la Edad media, a pesar de que desde la más remota antigüedad existían actividades empresariales.

En la época feudal nació una nueva clase social, asentada en las ciudades, que desarrollaba actividades empresariales y mercantiles. La unidad básica era la familia tenía una motivación artesanal y técnica. Nació la célula de la empresa primitiva. Modelo que aún perdura en la actualidad constituido por los pequeños empresarios autónomos, empresas de 1-3 trabajadores denominadas microempresas.

En el siglo XVII, las Repúblicas italianas florecían en su máximo esplendor y su potencial económico provenía de sus empresas principalmente mercantiles que comerciaban en todos los estados del mundo. La estructura básica de las empresas italianas era una unidad simple, técnica-económica y en algunos casos sobrepasando la dimensión estricta familiar de la época feudal. Había nacido el denominado capitalismo mercantil.

La revolución industrial protagonizada por Inglaterra durante el siglo XIX presenta una empresa compleja, compuesta de múltiples socios representando un cambio profundo en la concepción anterior. Interviene la organización del trabajo. La producción se realiza en amplias naves industriales en cuyo interior se agrupan las actividades funcionales semejantes y la unidad económica empresarial estaba constituida por la producción. Era el nacimiento del capitalismo industrial.

En esta etapa se iniciaron los estudios de métodos y tiempos y la organización del trabajo. A primeros del siglo XX, se inicia la segunda revolución industrial con la aparición del motor de combustión, la electricidad y la electrónica. La empresa deviene una unidad aún más compleja. Se inician las sociedades anónimas, las estructuras de grupos de empresas y la actuación sobre bases funcionales.

Después de la II Guerra Mundial se inicia una nueva etapa denominada capitalismo financiero internacional donde la empresa está considerada como una organización, su estructura básica está formada por holdings, grupos empresariales y su unidad económica es simplemente una unidad de decisión. Movimiento de capitales, gestión de carteras y recursos financieros dirigidos por organizaciones multinacionales de decisión.

Se puede expresar esta evolución histórica de la empresa en el siguiente cuadro:

MODELO DE EMPRESA SISTEMA ECONÓMICA
ETAPA ESTRUCTURA BÁSICA DEFINICIÓN MODELO DE ORGANIZACIÓN ECONÓMICA
Empresa primitiva. Unidad familiar. Unidad técnica. Feudalismo.
Empresa comercial. Unidad simple, familiar o no. Unidad técnica económica. Capitalismo mercantil.
Empresa industrial. Unidad compleja,societaria, organizada. Unidad económica de producción. Capitalismo financiero internacional.
Empresa como organización. Unidad compleja,multinacional, multisocietaria. Unidad de decisión. Capitalismo financiero internacional.

La empresa ha ejercido un papel muy importante en la economía de mercado, ha sido un agente económico imprescindible en el sistema de economía libre o capitalista. Dos son las causas principales que justifican la existencia de las empresas:

  1. La existencia de costes de mercado.
  2. El riesgo o la incertidumbre.

Respecto a la primera causa se debe mencionar la aportación de R.H. Coase, premio Nobel de Economía de 1.991, que indica que las imperfecciones del mercado y la incertidumbre sobre las transacciones en el mismo, llevan a la necesidad de una nueva fórmula de regulación, distinta del mercado (mano invisible) superadora de los costes que se originan.

En resumen, dice que ‘… el funcionamiento del mercado lleva consigo unos costes, y que formando una organización y permitiendo que una autoridad (empresario) dirija los recursos (‘mano visible’) se ahorran ciertos de estos costes de mercado. El empresario tiene que llevar a cabo su función a un coste aún menor, teniendo en cuenta que puede obtener los factores de producción a un precio inferior al de las transacciones de mercado que él sustituye, porque si no lo consigue siempre es posible recurrir al mercado abierto’

En relación a la segunda causa, además de lo expresado por Coase, merece prestar atención al estudio de F.H. Knight, quien explica que la incertidumbre o la falta de información es lo que realmente justifica el origen de la empresa.

El empresario se arriesga cuando contrata unos factores a unas rentas y, precios determinados, esperando verse retribuido al finalizar el proceso con un beneficio residual. El riesgo es lo que tipifica el papel del empresario.

De las anteriores reflexiones se deducen tres cuestiones fundamentales:

  1. El mercado no es una panacea universal, no siempre es la mejor solución y la más eficiente. Es posible que esta falta de eficiencia provenga de la misma incertidumbre, falta de información y, en consecuencia, riesgo.
  2. El mecanismo de mercado, la mano invisible, presenta irregularidades y es necesaria la empresa (la mano visible) para compensarlas.
  3. La función empresarial se concentrará en los aspectos donde exista más riesgo, gracias a habilidades y técnicas adquiridas por el empresario.

Finalmente, a continuación se detallan las funciones específicas que según el enfoque propuesto, está teniendo la empresa como agente económico principal de la economía.

  1. Organiza, coordina y dirige el proceso de producción, asignando recursos, efectuando transacciones y estableciendo relaciones en su entorno.
  2. Anticipa la renta nacional generando las rentas monetarias.
  3. Asume y reduce los costes de mercado (costes de transacción) y los de información (costes de identificación).
  4. Asume el riesgo inherente de la actividad económica.
  5. Desarrolla el sistema económico, creando riqueza, empleo.

Si se ha definido la empresa como un conjunto de elementos relacionados entre sí que buscan un objetivo común, es preciso analizar en primer lugar, los elementos integrantes de la misma para poder entender mejor la realidad empresarial.

Primeramente            se           distinguirán           dos           tipos           de           factores:

  1. Factores pasivos: Formados por los recursos económicos clásicos, tierra y capital.
  • Capital financiero.
  • Capital técnico.
  1. Factores activos: formados por las personas integrantes del sistema empresarial.
  • Administradores y directivos.
  • Empleados y obreros.

Se podría ampliar con un tercer factor, que sería la estructura organizativa y asimismo, en el apartado de personal, se podría ampliar con los clientes, proveedores y entorno social local.

Recordando lo anteriormente expuesto, se puede afirmar que la empresa constituye una entidad compleja apoyándose en tres bases fundamentales:

  1. La empresa es un sistema técnico compuesto por un conjunto de procesos, tecnologías y métodos, que se desarrollan en una o más plantas y a través de una o varias sociedades.
  2. La empresa es un conjunto de personas con unos objetivos y papeles diferentes orientados a un objetivo común mediante una estructura organizativa adecuada.
  3. La empresa es un sistema abierto al entorno, mantiene una constante relación con clientes, proveedores, competidores y agentes sociales y políticos.

Una de las formas para acercarse a la definición conceptual de empresa es estudiarla por medio de sus dimensiones:

  1. Dimensión funcional: es una actividad organizada y alternativa al mercado con ánimo de lucro. Representa la justificación del papel que la empresa juega en la economía de mercado, destacando la figura del empresario. Considera la empresa como una organización.
  2. Dimensión técnico-económica: actividad productiva de bienes y servicios. Se concentra en la transformación productiva, explicada por unas funciones de producción y coste. Considera la empresa como una unidad de producción.
  3. Dimensión económica-financiera: Actividad económica que crea valor añadido y dinero. Es la visión del capitalismo financiero e internacional. Considera la empresa como una unidad financiera.
  4. Dimensión jurídico-mercantil: actividad generadora de actividades contractuales entre los factores. Considera la empresa como una unidad de decisión.
  5. Dimensión social: actividad compuesta por relaciones humanas y de poder. Es la actividad más importante y que últimamente se le ha prestado más atención. Constituye un complejo diseño de comunicaciones y relaciones existentes dentro de un grupo de seres humanos. Considera la empresa como un sistema social.

Se podría ahora definir la empresa de la siguiente forma:

‘Empresa es la unidad económica que combina los diferentes factores productivos, ordenados según determinada estructura organizativa, localizados en una o más unidades técnicas y dirigidos sobre la base de la propiedad y control, con el fin de alcanzar unos objetivos, entre los que se destacan el beneficio empresarial y la competitividad estratégica’.

1.2.2 Evolución histórica del concepto de empresa

La primera formulación teórica del concepto de empresa se produjo con el estudio de la teoría microeconómica y con la teoría de mercado, a finales del siglo XIX y primeros del siglo XX.

Más que una teoría de la empresa, se trataba de una teoría de la oferta y de la demanda, apoyada en el principio de la mano invisible y del equilibrio económico.

Después surgieron nuevas corrientes revisionistas, unas procedentes de la microeconomía y otras de la teoría de la Administración de empresas. Con ellas se inició un período aproximado de treinta años con un gran número de teorías detalladas a continuación:

  1. Teoría de la empresa de negocios (T. Veblen, 1904)

Concepto de empresa de negocios como fuerza directiva en el sistema económico.

  1. Teoría de la especialización frente al riesgo. (F.H. Knight,1921)

La empresa es la especialización de la función directiva frente la incertidumbre y el riesgo.

  1. Teoría de los costes de mercado. (R.H. Coase. 1937)

La empresa es una organización que reduce los costes de las transacciones del mercado debido a la falta de información y a los fallos técnicos de la teoría de la oferta y de la demanda.

  1. Teoría de la organización. (H. A. Simon, 1956 y 1957)

Concepto de empresa como organización, definida como una relación de autoridad.

  1. Teoría de la contingencia (Paul R. Lawrence y Jay W. Lorsch, 1965) La empresa es un sistema integrado formado por la estructura, la situación y las interrelaciones mutuas que permite realizar los primeros análisis estratégicos y anticiparse al futuro.
  2. Teoría de los derechos de propiedad (A.A, Alchian y H. Demsetz, 1972) Concepto de empresa basado en la producción en equipo.
  3. Teoría de la jerarquía organizativa (0. E. Williamson, 1971-75)

Empresa como alternativa de la economía de mercado y con costes reducidos debido a una organización jerarquizada.

  1. Teoría de los límites de la organización (K. J. Arrow, 1974)

Una forma diferente de organización, coordinación y flujo de información.

  1. Teoría de la agencia (M. C. Jensen y W. H. Meckling, 1976)

El agente mediante contrato realiza algo a favor del principal por delegación de autoridad.

  1. Teoría contractual (S.N.S. Cheung, 1983) Concepto de empresa basado en el contrato de los factores con características diferenciadas de los contratos de transacciones del mercado.
  2. Teoría de la empresa como sistema (Bueno 1974)

La empresa es considerada como un sistema, con sus elementos, su estructura, su plan común, sus funciones y estados.

  1. Teoría de la empresa como organización (E. Bueno y F.J. Valero, 1985) Concepto de empresa como un sistema socio-técnico abierto compuesto de varios aspectos para lograr la eficiencia y la competitividad con el entorno.

Los dos últimos enfoques, el de la empresa sistema y la empresa como organización, podrían resumir los conocimientos teóricos del momento actual. Constituyen una continuidad a la teoría de la contingencia explicada anteriormente que se intentará explicar con un poco más de detalle.

Esta teoría parte de la premisa básica de que la empresa es un sistema abierto y con una naturaleza mixta entre lo social y lo técnico, es decir, compuesta por una serie de relaciones de valor, unas basadas en la tecnología y otras en las relaciones humanas. La estructura organizativa eficaz requerirá que su diseño se ajuste adecuadamente a los factores de contingencia del entorno. El diseño estructural eficaz requerirá asimismo coherencia interna entre los distintos parámetros del diseño.

La teoría que intenta analizar los factores contingentes del entorno y los parámetros de diseño estructural es asumida y sintetizada posteriormente por Henry Mintzberg en su libro ‘The Structuring of Organizations‘.

La empresa es un sistema abierto y, además, social, formado por elementos que son personas, quienes persiguen un conjunto de objetivos y adoptan unas pautas de comportamiento. Además, un sistema social es en sí mismo específico en el sentido de que no se puede definir solo por su código, sino también por su capacidad de modificar él mismo este código y transformarlo voluntariamente.

Todo sistema y en consecuencia también la empresa puede ser descompuesto en subsistemas que poseen las mismas características del sistema del cual proceden.

Una            clasificación           tradicional           podría           ser           la           siguiente:

  1. Subsistema técnico: aspecto técnico científico transformador que añade valor a los factores. Uno de sus aspectos más característicos es la productividad, el rendimiento del proceso medido como relación de factores y productos.
  2. Subsistema de dirección: el mando organizado de todas las actividades económicas de la empresa. Una expresión clave es la eficiencia y la eficacia del sistema, cumplir unos objetivos y con un grado elevado de calidad total.
  3. Subsistema humano: conjunto de personas con sus conductas y motivaciones. Su principio básico es la satisfacción del personal que integra la empresa y su entorno.
  4. Subsistema cultural: valores y normas de conducta que influyen en la empresa. Su resultado es el desarrollo organizativo buscando la eficiencia global del sistema, permitiendo flexibilidad y adaptación a los cambios del entorno.
  5. Subsistema político: aspectos de poder y de fuerza que afectan a las relaciones de la empresa. El aspecto importante es el equilibrio, procurar que las fuerzas que intervienen en la organización, se encuentren equilibradas.

Los tres primeros subsistemas forman un bloque básico más integrado y los dos últimos, también relacionados, son una consecuencia de la estructura de los primeros.

Así pues, se podría definir la empresa como un sistema sociotécnico abierto compuesto de cinco elementos organizativos: subsistema técnico, subsistema humano, subsistema de dirección, subsistema cultural y subsistema político (poder) y que persigue unos objetivos básicos.

La empresa persigue unas metas y objetivos comunes. Estos objetivos básicos constituyen el elemento integrador del sistema y que le permite tender hacia el equilibrio estable.

1.3 Clasificación empresarial

1.3.1 Clases de empresa

Existen ciertos principios, o leyes, que son aplicables a todas las empresas. Junto a ellos, existen peculiaridades para cada clase de empresa e, incluso, según cada empresa, la situación en que se encuentre y la contingencia que se le presente. La variedad de empresas es ingente, como también lo son las clasificaciones que se podrían apuntar. Pero las principales son las siguientes:

  • Según su tamaño.
  • Según quien tenga su propiedad.
  • Según su forma jurídica.
  • Según su actividad.
  • Según el ámbito de su actividad.

En cuanto al tamaño de la empresa, se distingue entre empresas pequeñas, medianas, y grandes, sin que exista acuerdo sobre el criterio para la medición del tamaño (volumen de activos, volumen de ventas, tamaño del capital propio, número de trabajadores, entre otros) ni sobre las dimensiones que han de tener las empresas para pertenecer a una u otra clase. En este sentido, sin embargo, cabe destacar un tipo de empresa que va resultando cada vez más frecuente, la pequeña y mediana empresa (PYME), que según la definición de la Unión Europea, es aquella que no tiene más de 500 trabajadores, ni unos activos fijos netos superiores a 75 millones de Euros, ni más de una tercera parte de su capital en manos de una empresa mayor.

En relación a quien tiene la propiedad de la empresa, se distingue entre empresas privadas (en las que el capital es propiedad de particulares), empresas públicas (cuyo capital es propiedad del Estado o de cualquier organismo público), empresas mixtas (cuyo capital pertenece en parte a entidades públicas y en parte a particulares).

Según su forma jurídica, se diferencia entre la empresa regida por un empresario individual, que es una persona física, y la empresa social, que es una persona jurídica o social. En derecho empresarial, se distingue, aunque dependiendo del país: Sociedad Unipersonal, Sociedad Anónima, Sociedad de Responsabilidad Limitada, Sociedad Comanditaria, Sociedad Colectiva, y Sociedad Cooperativa.

Según su actividad, y tal como se verá, las empresas pueden clasificarse por sectores económicos: primario, secundario o industrial, y terciario o de servicios. Dentro de cada uno de ellos, pueden establecerse distintas clasificaciones, dependiendo del nivel de desagregación que se utilice (agrario, pesquero, minero, siderometalúrgico, transporte, bancario, turístico, entre otros).

Según el ámbito de su actividad, se distingue entre empresas locales, provinciales, regionales, nacionales, y multinacionales.

1.3.2 Legislación (ámbito legislativo)

Toda empresa ha de tener una forma declarada de constitución, tanto por razones de eficiencia operativa en el cumplimiento de sus propósitos, como por razones legales, fiscales y de interés públicos.

En este sentido, las empresas también se pueden clasificar atendiendo a su aspecto jurídico. Aspecto este especialmente relevante ya que es de obligado cumplimiento para constituirse como una forma u otra de empresa; con sus consiguientes condicionantes.

La titularidad de una empresa corresponderá a una persona física si se trata de empresa individual y a una persona jurídica si adopta cualquiera de las siguientes formas sociales: colectivas, comanditarias, anónimas, de responsabilidad limitada, cooperativas y anónimas laborales.

a) Empresa individual

El empresario es la persona física que ejercita en nombre propio, por sí o por medio de representante, una actividad constitutiva de empresa.

El comerciante individual responde de sus deudas ilimitadamente con todos sus bienes presentes y futuros.

b) Empresa social

Las sociedad mercantiles son entidades jurídicas que facilitan el reparto entre diversas personas del capital, el riesgo y la actividad necesaria que sustituyan ventajosamente a los comerciantes individuales.

La sociedad mercantil no es solamente un contrato; tiene carácter institucional. Una vez constituida la compañía mercantil, tendrá personalidad jurídica en todos sus actos y contratos. Las consecuencias que trae la personalidad jurídica para la sociedad son:

  • Le confiere la condición de sujeto de derecho, con plena capacidad jurídica.
  • Le atribuye autonomía patrimonial.
  • Supone separación de responsabilidades entre la sociedad y los socios; cada socio responde con el capital aportado o comprometido.
  • La sociedad tiene nombre propio y exclusivo, un domicilio y una nacionalidad.
  • La sociedad, tanto en el orden interno como en el externo, actúa por medio de sus órganos.

Toda sociedad mercantil, antes de dar principio a sus operaciones, deberá hacer constar su constitución, pactos y condiciones en escritura pública, que se presentará para su inscripción en el Registro Mercantil, correspondiente al lugar del domicilio de la Sociedad. Ambas formalidades, escritura e inscripción son igualmente exigidas para cualquier ulterior modificación del contrato originario.

Clases de sociedades: 

– Sociedad Colectiva

Funciona bajo un nombre colectivo o razón social integrado por el nombre de todos los socios, de algunos de ellos, o de uno solo, debiendo añadir en los dos últimos casos al nombre o nombres que se expresan las palabras ‘y compañía’.

Todos los socios tienen la facultad de concurrir a la dirección y manejo de los negocios comunes sin que la participación del socio en la gestión social se mida por el importe de su aportación patrimonial.

El socio ha de aportar a la sociedad, poniendo en fondo común, bienes, industrias (trabajo, servicio o actividad en general) o alguna de estas cosas.

La sociedad tiene autonomía patrimonial y responde de sus deudas con su patrimonio, aunque los socios también respondan de las deudas sociales, subsidiarias, ilimitada y solidariamente.

– Sociedad Comanditaria simple

La característica más significativa es la existencia de dos clases de socios, los socios capitalistas o comanditarios y los socios colectivos y la distinta responsabilidad de unos y otros, lo que la diferencia de la colectiva, aunque ambas mantienen aspectos análogos.

La razón social se forma con el nombre de todos los socios colectivos, de alguno de ellos o de uno solo, debiendo añadirse, en estos dos últimos casos las palabras ‘y compañía’, y en todas las de ‘sociedad en comandita’.

El socio comanditario contrae la obligación principal de aportar una determinada parte del capital social.

Al socio comanditario se le prohíbe incluir su nombre en la razón social e inmiscuirse en operaciones de administración.

Los socios colectivos responden frente a terceros con todos sus bienes, los comanditarios tienen limitada su responsabilidad a los fondos aportados en el caso de pérdidas generadas por la sociedad.

– Sociedad Comanditaria por acciones

El capital está dividido en acciones, y las aportaciones de los socios comanditarios (responsabilidad limitada) es en acciones.

La razón social es el nombre de alguno de los socios colectivos agregando ‘y compañía’ y ‘sociedad en comandita por acciones’ o ‘s. com. por a.’

– Sociedad Anónima

La razón principal de la existencia de la Sociedad Anónima como forma de empresa es la necesidad de evitar los inconvenientes de la empresa individual y la colectiva; la división del capital en acciones, la movilidad de éstas mediante su incorporación a títulos esencialmente negociables y la limitación individual del riesgo al capital representado por las acciones poseídas, la convierten en la sociedad preferida, sobre todo para grandes y medianas empresas.

El capital social mínimo se establece que no podrá ser inferior a 60.010 euros.

La razón social siempre tendrá carácter mercantil, no puede existir por tanto las sociedades anónimas civiles. Su denominación será libremente elegida, siempre y cuando no adopte una denominación ya existente, seguida siempre de las palabras ‘Sociedad Anónima’ o ‘S.A.’.

Los órganos de la Sociedad Anónima son: la junta general de accionistas (reunión de accionistas debidamente convocados; órgano soberano deliberante y decisor por mayoría que expresa con sus acuerdos la voluntad social), y los administradores (órgano de gobierno y ejecutivo, encargado de la gestión permanente de la sociedad y de representar a la misma frente a terceros. Puede ser un administrador único, dos administradores mancomunados que actúen conjuntamente, varios administradores que actúen solidariamente, o un consejo de administración, que puede delegar parte de sus facultades en alguno de sus miembros -consejeros delegados- u otorgar poderes a terceras personas -apoderados-).

– Sociedad Limitada

Las sociedades de responsabilidad limitada surgen obedeciendo a razones económicas, que aconsejan extender a pequeñas sociedades el beneficio de la responsabilidad limitada de los socios, sin los inconvenientes que una sociedad anónima genera.

El capital social mínimo se establece que no podrá ser inferior a 3.005 euros.

El capital social está integrado por las aportaciones realizadas por cada uno de los socios y dividido en participaciones sociales, y no en acciones.

Las participaciones sociales no tienen el carácter de valores, no pueden estar representadas por medio de títulos o anotaciones en cuenta, y en ningún caso, pueden denominarse acciones.

La condición de socio no implica responsabilidad personal por las deudas sociales.

En la denominación social debe figurar necesariamente S.R.L. o S.L.

Los órganos de la Sociedad Limitada son: la junta general de socios (como órgano que expresa en sus acuerdos la voluntad social), y los administradores (que son el órgano ejecutivo encargado de la gestión permanente de la sociedad, y de representar a ésta en sus relaciones con terceras personas).

Estas características, la distinguen principalmente, de la anónima, por no tener el capital social dividido en acciones. Y frente a las sociedades personalistas, destaca la responsabilidad limitada de los socios. El socio de la sociedad de responsabilidad limitada sólo arriesga el importe de las participaciones sociales que haya suscrito.

– Sociedad Laboral

Este tipo de sociedad permite optar por la forma de Sociedad Anónima Laboral o Sociedad de Responsabilidad Limitada Laboral.

Pueden obtener la calificación de ‘sociedad laboral’ las sociedades anónimas o de responsabilidad limitada en las que la mayoría del capital social sea propiedad de trabajadores que presten en ella servicios retribuidos en forma personal y directa, cuya relación laboral lo sea por tiempo indefinido.

En la denominación debe figurar la indicación ‘Sociedad Anónima Laboral’ o ‘Sociedad de Responsabilidad Limitada Laboral’ o sus abreviaturas SAL o SLL.

El capital social está dividido en acciones nominativas o en participaciones sociales según el caso.

– Sociedad Cooperativa

Las cooperativas son sociedades que, con capital variable y estructura y gestión democrática, asocian al régimen de libre adhesión y baja voluntaria a personas que tienen intereses o necesidades socio-económicas comunes, para cuya satisfacción y al servicio de la comunidad desarrollan actividades empresariales, imputándose los resultados económicos a los socios una vez atendidos los fondos comunitarios, en función de la actividad cooperativa que realizan.

Hay dos tipos de cooperativas:

  • De primer grado, cuyos socios pueden ser tanto personas físicas como jurídicas, públicas o privadas. El número de socios será limitado, pero nunca menor de cinco.
  • De segundo grado y ulterior grado, aquí los socios son otras cooperativas. Estarán integradas, al menos por dos cooperativas.

Los órganos de la sociedad cooperativa son: asamblea general, consejo rector, y los interventores de cuentas.

– Fundación

En sentido general y desde el punto de vista sociológico, organización no lucrativa sufragada por un fondo propio y creada para mantener y prestar ayuda social, educativa, caritativa, artística, científica y otras en el campo del bienestar humano.

En la mayoría de las fundaciones modernas el campo de trabajo es de índole educativa: fundar becas, sufragar investigaciones en el terreno profesional, entre otras actividades.

Otras fundaciones buscan objetivos en uno o varios de los siguientes campos: sanidad, ocio, religión, relaciones internacionales, relaciones raciales, administración pública, economía u otras facetas de la prosperidad social.

– Mutualidad

Sociedades encargadas de repartir los riesgos de tipo social entre sus afiliados. La mutualidad, en sentido estricto, es una asociación formada voluntariamente y sin ánimo de lucro para corregir necesidades sociales.

Hoy día este tipo de sociedades funciona orgánicamente como una compañía que buscara el reparto de un dividendo no material, sino moral, de seguridad y confianza en el futuro.

– Franquicia

Se trata de una fórmula comercial entre dos partes, el franquiciador y el franquiciado, ambos llegan a un acuerdo que queda reflejado en un contrato.

En este documento se plasman los derechos y obligaciones de ambas partes, los bienes y servicios que proporciona el franquiciado, las condiciones financieras, su duración y el período de renovación.

El franquiciador aporta el know-how, es decir, conocimiento de la empresa, la marca, las licencias y patentes y todas sus experiencias documentadas.

El franquiciado aporta la inversión, su trabajo, la gestión directa y la explotación del negocio.

Al franquiciador le reporta la posibilidad de aumentar su red de distribución sin realizar grandes inversiones, control total en la distribución del producto. No hay una relación laboral, sino un contrato entre empresarios independientes.

Al franquiciado le reporta que el negocio ya está rodado en el mercado, imagen de marca, asistencia técnica, formación técnica y empresarial, publicidad, y facilidades de financiación.

En las franquicias, el emprendedor (concesionario) ofrece un producto o servicio bajo contrato legal con el dueño de la franquicia quien, a su vez, proporciona los elementos distintivos de la empresa (el nombre, la imagen, signos, instalaciones, diseño, patentes etc.), un sistema de operaciones y otros servicios. Para obtener una franquicia, el emprendedor paga una cantidad inicial y después un porcentaje sobre las ventas; el emprendedor opera bajo los derechos y restricciones del contrato.

– Sociedad de sociedades

Sociedades de Garantía Recíproca: son sociedades integradas por pequeños y medianos empresarios, asociados para buscar mayores posibilidades de financiación a través de garantías y avales prestados a sus socios por la propia sociedad. El capital y el régimen de responsabilidad de sus socios por las deudas sociales, se rigen por normas análogas a las de la sociedad anónima, y respecto a los derechos del socio, predomina el carácter de mutualistas de la sociedad.

Es sociedad de responsabilidad limitada en el sentido de que los socios responden por las deudas sociales.

Su denominación social será S.G.R.

La sociedad se gobierna por la junta general y el consejo de administración.

Uniones de sociedades: la concentración de capitales y de fuerzas industriales conduce algunas veces a la total fusión de las sociedades mercantiles.

  • La concentración se manifiesta en simples uniones, conservando todas ellas la independencia jurídica, aunque pierden en mayor o menor grado la autonomía económica. La concentración de sociedades se presenta bajo simple forma contractual. Otras veces, el vínculo de unión no tiene esa naturaleza y es puramente financiero, el enlace entre sociedades se produce mediante el capital de unas en el capital de otras.
  • Cartel o sindicato (unión contractual): unen casi siempre, sociedades interesadas en la misma fase o ciclo de producción, con el fin de limitar y regular la concurrencia recíproca en el mercado y conseguir en lo posible el dominio de éste.
  • Holding (unión no contractual): cuando se quiere conseguir una unión más firme se acude al sistema de hacer partícipes a unas sociedades en el capital de otras en la medida necesaria para imponerles una situación unitaria en el desarrollo de su actividad. Así, existe una sociedad dominante sobre las demás.
  • Uniones temporales de empresas: constituyen un sistema de colaboración entre empresarios por cierto tiempo determinado o indeterminado para el desarrollo o ejecución de una obra, servicio o suministro. En ocasiones estas uniones se realizan con carácter de alianza estratégica; por medio de la cual en ocasiones, se consiguen resultados sinérgicos para, por ejemplo, desarrollo de nuevos productos ante situaciones de entornos de innovación muy competitivos. Así se permite compartir recursos y capacidades de forma integrada, preservando la independencia de las organizaciones aliadas, aumentando el valor y las ventajas y reduciendo los costes y riesgos de sendas empresas.

En este sentido, las Corporaciones, cada vez más comunes en los países desarrollados, son combinación de empresas -negocios-; donde se establece flujos de recursos entre dichos negocios, para la adquisición, la diversificación, el crecimiento, y/o la coordinación entre las unidades componentes.

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Sablich Huamani Charles Alexander. (2010, junio 10). Administración y dirección de empresas, conceptos y técnicas. Recuperado de https://www.gestiopolis.com/administracion-y-direccion-de-empresas-conceptos-y-tecnicas/
Sablich Huamani Charles Alexander. "Administración y dirección de empresas, conceptos y técnicas". gestiopolis. 10 junio 2010. Web. <https://www.gestiopolis.com/administracion-y-direccion-de-empresas-conceptos-y-tecnicas/>.
Sablich Huamani Charles Alexander. "Administración y dirección de empresas, conceptos y técnicas". gestiopolis. junio 10, 2010. Consultado el . https://www.gestiopolis.com/administracion-y-direccion-de-empresas-conceptos-y-tecnicas/.
Sablich Huamani Charles Alexander. Administración y dirección de empresas, conceptos y técnicas [en línea]. <https://www.gestiopolis.com/administracion-y-direccion-de-empresas-conceptos-y-tecnicas/> [Citado el ].
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