Lo pudiéramos identificar como la ‘Utilidad o la Ganancia’ que deja la venta de un
producto. En términos genéricos, es correcto, pero analizado de manera puntual, es
incorrecto. La incorrección obedece al hecho de que normalmente toda transacción
comercial, genera gastos, y que para poder mencionar el MC como Ganancia o utilidad,
debemos deducir o descontar esos gastos generados.
Punto de equilibrio
El punto de equilibrio es una herramienta financiera que permite determinar el momento
en el cual las ventas cubrirán exactamente los costos y los gastos operacionales básicos.
Estos últimos, los conocemos como Costos Fijos (Gastos necesarios e ineludibles que
tiene la empresa y que son indispensables para su funcionamiento u operatividad).
El punto de equilibrio se expresa en valores, porcentaje y/o unidades, dependiendo la
formula que se esté utilizando.
El punto de equilibrio nos servirá como referencia para determinar la magnitud de las
utilidades o las perdidas, cuando el volumen de ventas esté por encima del mencionado
punto, para el primer caso y las perdidas cuando el volumen se de por debajo.
Para la determinación del punto de equilibrio debemos en primer lugar conocer los Costos
Fijos y Variables de la empresa.
Costos Fijos: Los habíamos mencionado como necesarios e ineludibles: Renta del local,
sueldos administrativos, servicios públicos, amortizaciones, etc. Se mantienen más o
menos constantes y generalmente no cambian en proporción directa con las ventas o
unidades producidas.
Costos Variables son aquellos que cambian en proporción directa con los volúmenes de
producción y ventas, por ejemplo: materias primas, mano de obra a destajo, comisiones,
etc.
El punto de equilibrio se basa en la relación entre gastos fijos y variables con las ventas.
La fórmula básica para su cálculo es: