Como sustentabilidad definimos la cualidad de sustentable. Como tal, en áreas como la economía y la ecología, sustentable es algo que se puede sostener a lo largo del tiempo sin agotar sus recursos o perjudicar el medio ambiente. La sustentabilidad económica comprende la implementación de una serie de prácticas económicamente rentables y éticamente justas, regida por criterios de responsabilidad social y medioambiental. En este sentido, promueve un uso mínimo y racional de los recursos económicos como medios, materia y energía logrando la maximización de los beneficios. Su objetivo es lograr, mediante un modelo consciente de desarrollo económico, un cierto nivel de bienestar social que brinde a toda la población la posibilidad de acceder a un buen nivel de vida y tener las mismas oportunidades. (Fabian Coelho, 2019; “Sustentabilidad”)
Una vez entendido esto, conozcamos el entorno del canal tradicional mexicano.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas, ANAM, la cual se encuentra conformada por 160 socios mexicanos, el canal del mayoreo es un sector que debido a la actividad comercial que realiza, no sólo impacta significativamente en los indicadores económicos del país, sino que, además, realiza una labor de distribución que hoy ningún otro sector del comercio puede hacer al abarcar el territorio nacional llevando los productos de primera necesidad que el consumidor busca.
El sector mayorista abarrotero es un sector comercial establecido formalmente y es parte fundamental de la cadena de suministros aportando el 48.9% del negocio, considerando el universo de los dos principales canales de distribución en el país: Canal Tradicional Mayoreo y Canal Autoservicio Moderno. El canal Mayoreo es generador de transacciones comerciales que ascienden a más de 260 mil millones de pesos anualmente y tienen una aportación importante del 5% al crecimiento del PIB comercial anual. El Mayorista abarrotero, al impulsar el sector comercial, está ayudando a la generación de empleos directos por parte de la industria y proveeduría de productos y servicios, además de ofrecer infraestructura y fuerza logística para lograr que estos productos lleguen a puntos de venta donde son demandados. (Fuente: ISCAM)
Pero ¿cuál es la relación entre el concepto de sustentabilidad y las empresas del canal tradicional mexicano? se puede decir que existe un porcentaje muy alto en el que se contribuye a la economía a través de la comercialización de abarrotes, aunque no necesariamente de manera sustentable. En la actualidad algunas empresas de este sector están interesándose y actuando cada vez en mayor medida en generar negocios sustentables.
Con una trayectoria de experiencia en el canal tradicional de más de 30 años, encontramos una empresa mexicana de origen poblano perteneciente a la ANAM. Su variedad de productos ofrecidos a través de las diferentes vías de distribución, entre ellas, mostradores para pequeños comerciantes, rutas de reparto que llegan hasta los lugares más alejados de su zona de influencia, y sus tiendas de autoservicio localizadas todas dentro del estado, han logrado posicionarlo como el mayorista con mayor reconocimiento de marca dentro de Puebla. Uno de sus muchos diferenciadores es la comercialización e impulso de productos con marca propia, entre ellos el café tostado y molido.
La marca propia del café tostado y molido de esta empresa poblana del canal tradicional mexicano tiene su historia desde el 2016, a través del desarrollo de un proyecto de negocio sustentable que tenía la finalidad de fomentar el trabajo digno de los campesinos, así como el pago justo del valor de su producto a los productores de café de la sierra norte de Puebla. Para poder llevar a cabo este proyecto que en un futuro se convertiría en un negocio rentable, la empresa realizó una alianza con la Asociación “Formación de Jóvenes en Acción A.C.”, la cual tiene como propósito el ayudar al mayor número de personas en la sierra norte de Puebla con proyectos de sustentabilidad a través de desarrollos integrales, sistemáticos y acciones claras, buscando así erradicar la pobreza y brindar trabajo y pago justo a la población. Esta Asociación Civil ha buscado incansablemente cumplir con sus objetivos desde el año 2010, y en la búsqueda de esto, encuentra una oportunidad de desarrollo sustentable en la zona de Tecuantla, Puebla.
Tecuantla, al ser una zona de altura, cuenta con las condiciones favorables para la producción y procesamiento del café, sin embargo, la venta de este se realizaba solamente en “café cereza”, es decir, aún sin el proceso previo al grano de café obscuro que normalmente identificamos. Durante años los intermediarios han ofrecido a los productores un pago muy bajo por el quintal (100 libras o 46 kilos) de café cereza, en la actualidad, de acuerdo con la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), el precio ronda los mil setecientos pesos, mientras que el gasto para el cultivo del grano es el doble de esa cantidad, por lo que realmente no existía una ganancia para los productores y por lo tanto el pago del trabajo de los campesinos era tan bajo que no alcanzaba a cubrir sus necesidades básicas de consumo para vivir.
La sinergia para elaborar la marca propia de café entre la empresa poblana y la asociación civil “Formación de Jóvenes en Acción A.C.”, ha fomentado y apoyado el brindar un pago justo por el quintal de café a los productores de Tecuantla, lo que en efecto dominó, otorga trabajo estable, digno y bien remunerado a los campesinos de la zona, ayudando así a la economía de la población y al bienestar de las familias desde hace más de tres años; durante los cuales ha logrado la disminución de la pobreza a través de un trabajo de valor compartido y un producto final: Café de calidad a precio justo.
Cada frasco de café que se vende es 100% poblano, fruto del trabajo de campesinos y productores de la sierra norte de Puebla que en unión con empresas y asociaciones que buscan apoyar el desarrollo sustentable de poblaciones pobres, logran llegar a la mesa de los consumidores para saborear el placer de ayudar.
Dentro de los planes a futuro, no está solamente el seguir comercializando el café, sino capacitar a los campesinos y productores de esta zona para hacer más rentable su negocio, poder contar con oportunidades del gobierno y que poco a poco puedan apoyarse de más tecnología que facilite su trabajo y baje los costos de su producción.
Aún queda mucho trabajo por delante, buscar los compromisos entre la sociedad, la empresa y el gobierno para seguir logrando historias de éxito como la del café, las que poco a poco derivarán en poder otorgar a la gente nuevas oportunidades de trabajo y negocio en sus comunidades, atacando así el problema desde la raíz y otorgando la importancia a las personas de estas poblaciones como individuos que pueden aportar y consumir a la economía del país. Lo que es importante resaltar, es que la contribución hacia la sociedad y economía mexicanas comienza con pequeñas acciones que se pueden convertir en una gran renovación de procesos, nuevos enfoques en la manera de hacer negocios a través de empresas que crean valor compartido, reafirmando lo mencionado por Porter: “Las empresas crean valor compartido, pre concibiendo productos y mercados; redefiniendo la productividad en la cadena de valor y construyendo clústeres de apoyo en torno a las instalaciones de la empresa” (Porter, 2013).
Recordar siempre que para que el desarrollo sustentable funcione, se necesita de una economía cíclica con sociedades o poblaciones pobres con ganas de trabajar y de emprender, que con ayuda de empresas, gobierno y asociaciones civiles, comprendan el papel tan importante que desempeñan en la economía del país y de la sociedad a través de sus productos, bienes y servicios brindados, los cuales tienen que ser consumidos por el resto de la población para que las ganancias puedan ser reinvertidas en ellos mismos.
Historias de éxito como la de esta empresa poblana del canal tradicional, son base fundamental en el desarrollo de proyectos sustentables de otras empresas del sector, sobre todo porque llegan a conocer zonas del país verdaderamente pobres a través de la distribución de sus productos y porque tienen en la mayoría de las ocasiones las relaciones necesarias y los recursos para poder apoyar a esta parte de la población mexicana. Así como ésta, poco a poco se van sumando otras empresas del canal tradicional en el desarrollo de productos con marcas propias apoyando principalmente a las zonas vulnerables del estado de donde son originarias y a través de sus medios de comunicación invitan a la población a consumir este tipo de productos, por lo tanto, ¿te tomas una taza de café?
Bibliografía
- Coelho, Fabián (27/05/2019). «Sustentabilidad». En: com. Disponible en: https://www.significados.com/sustentabilidad/
- ANAM, Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas.
- ISCAM, Información Sistematizada de Canales y Mercados, Disponible en: https://www.iscam.com/
- La Jornada de Oriente (14/10/2019). “PRECIO PAGADO A CAFICULTORES DEL PAÍS, EL MÁS BAJO EN 15 AÑOS”. Disponible en: https://www.lajornadadeoriente.com.mx/puebla/caficultores/
- Jorge Garcia Hernandez. Empleado Grupo Gran Bodega.
- Francisco Varillas. Integrante de la Asociación “Formación Jóvenes en Acción, A.C.”