Las incubadoras de empresas son organizaciones que poseen recursos propios y que son administradas por expertos que tienen la capacidad de guiar a nuevos empresarios en sus proyectos empresariales con el fin de buscar el éxito empresarial y en algunos casos también hacer parte de la nueva idea de negocio.
Hay varias posibilidades para que una empresa germine. Una es que brote a solas, con las dificultades que ello supone. Otra es que aflore bajo el cuidado y supervisión de una incubadora de empresas.
Seguro que has escuchado hablar sobre las incubadoras de empresas y los beneficios que produce incubar un emprendimiento, pero ¿sabes qué son y qué buscan?, a continuación, te contamos.
Qué son las incubadoras de empresas
Las incubadoras son organizaciones que poseen ciertos recursos, los cuales son administrados por expertos que tienen la capacidad para guiar a otras personas, menos expertas, pero con excelentes ideas.
Lo que hacen, básicamente, es una transferencia de know-how a emprendedores que tienen ideas de negocio innovadoras.
Dentro de los servicios que brindan a sus incubados, están: espacio físico como oficinas o laboratorios, servicios compartidos como secretarias y equipos, acompañamiento y asesorías, establecimiento de contactos para posibles alianzas o financiamiento, entre otros.
La función básica de las incubadoras consiste en generar el entorno propicio y facilitar los recursos necesarios para hacer que un negocio crezca rápidamente.
Las incubadoras NO se especializan en financiar proyectos o en buscar las fuentes de financiación para los mismos. Tampoco se encargan de abrir mercados para las nuevas empresas, lo que sí hacen es diagnosticar las falencias que presentan las nuevas empresas con el fin de buscar soluciones y correctivos a las mismas, para que de esta manera la empresa pase a sus siguientes etapas de desarrollo.
Esta detección de fallas es lo que permite que una gran porción de empresas incubadas (entre el 80 % y el 90 %) salgan del período de incubación y sobrevivan con éxito, al contrario de lo que ocurre con emprendimientos no incubados, cuya tasa de fracaso alcanza el 70 %.
El objetivo básico de las incubadoras de empresas es acelerar la tasa de crecimiento de las empresas que incuban
Qué buscan las incubadoras de empresas en un proyecto
Básicamente, se interesan en lo obvio: ideas o proyectos con potencial. ¿Y cómo se identifica ese potencial? Bueno, en las incubadoras se tienen unos lineamientos elementales que son:
- Mercado: preferiblemente el mercado al que se dirigirá la empresa debe ser nuevo o con muy baja competencia.
- Tecnología: en el desarrollo de la empresa se emplea tecnología que genera valor agregado.
- Equipo: el recurso humano de la nueva empresa debe ser interdisciplinario y cubrir integralmente el escenario empresarial.
- Ventajas: el proyecto debe tener ventajas competitivas clave (factores críticos de éxito).
- Visión: enfoque en mercados abiertos (enfoque global o regional).
- Viabilidad: la tasa de retorno de la inversión debe ser generosa.
- Innovación: si la idea no es innovadora no entrará en incubación, para qué incubar copias.
Cuando un emprendimiento reúne estas características está en su punto para entrar al proceso de incubación. Si no cumple con algunas puede entrar en etapa de preincubación, es decir, un proyecto con potencial que requiere un acondicionamiento inicial. Si adolece de lo indispensable no será tenido en cuenta.
Sin embargo, ¿qué es lo indispensable? Me atrevería a decir que el mercado, la tecnología, la viabilidad financiera y la innovación (claro que la innovación casi siempre va directamente ligada con el mercado y el mercado con la viabilidad económica), los demás factores se pueden conseguir a medida que se desarrolla el emprendimiento.
Compromiso emprendedor
Además de los lineamientos básicos, existen otro tipo de factores que permiten a la incubadora de empresas apreciar si el emprendimiento tiene futuro o no. Uno de ellos es el nivel de compromiso de la persona o personas involucradas en él. Usualmente, las incubadoras exigen al emprendedor que se comprometa con una parte de los recursos. Una demanda adicional, y muy común, es que el emprendedor se debe capacitar en los aspectos en los que no está preparado.
Ahora que conoces los aspectos básicos de las incubadoras de empresas no lo pienses dos veces, dirígete a la más cercana, probablemente el éxito de tu idea o emprendimiento esté a la vuelta de la esquina o a un clic de distancia.