América Latina es una región ideal para la venta de productos de consumo masivo. Un ejemplo de esta clase de productos es el de los refrescos. Los planes de negocio que usan los fabricantes de esta mercancía necesitan un posicionamiento a través de los medios de comunicación más importantes de cada país. Esto implica gastos enormes y estructuras de distribución del producto, para asegurarse de que llegue a cada rincón de Sudamérica.
Es cierto que estos son negocios rentables, y que han funcionado muy bien. Pero esa no es la ruta que cualquier empresario podría seguir, obviamente por la inversión que este negocio requeriría.
La solución está en el Internet y sus enormes posibilidades. Sin embargo es preciso comprender varios detalles muy importantes antes de actuar:
El costo del producto. Si tu producto es para consumo masivo, su costo debe ser bajo, como el caso de los refrescos. Si se trata de una artesanía, obra de arte o algo parecido, el costo no es crucial, pero debe ser realista. Si estamos hablando de frutas o productos similares, debes considerar factores como los costos de refrigeración. Pero si se trata de productos que se pueden distribuir fácilmente por Internet, como fotos artísticas, vídeos, diseños gráficos o programas de computadora (software), el precio dependerá de los costos de producción, y del valor que le asignes como artista. Recuerda, el costo siempre debe ser razonable y realista.
Transporte y empaque. Al precio del producto debes añadirle los gastos de transportación. Si se trata de algo físico, deberás pesarlo y enviar ese dato a la compañía de transportación, que por cierto debe poder llevar tu producto a cualquier parte del mundo. Respecto al empaque, es posible que la misma compañía se encargue de este asunto, pero si no lo hace, debes asegurarte de que el producto llegue en condiciones óptimas, tal y como salió de tus manos.
Publicidad, ventas y servicio al cliente. Sin un sitio de Internet que maneje estos asuntos, la situación se complica demasiado. Lo recomendable es comprar uno. Comprar un dominio (algo así como “esteesminegocio.com”) y el hosting (el espacio de almacenamiento de tu sitio de Internet) es fácil y conveniente. Con $50 o menos, tendrás uno por un año. El servicio al cliente se hace generalmente vía chat, correo electrónico, o telefónicamente (Skype es una buena alternativa). También puedes crear foros de discusión sobre asuntos relacionados con tu producto como, por ejemplo, abrir el tema de “cosas que me gustaría añadir al producto actual”. Así recogerás valiosas ideas de tus propios clientes. También puedes publicar ofertas y disponibilidad de nuevos productos.
Luego debes concentrarte en la estrategia de ventas. Las redes sociales son un mercado potencial gigantesco, pero necesitas un conocimiento preciso de lo que estás haciendo, para no tener el efecto contrario al que buscas. ¿Y cuál es el efecto? Lograr que tu producto sea conocido y buscado. Hay varias empresas que ofrecen cursos bien completos de mercadeo para redes sociales y mercadeo para Internet. Invierte en, por lo menos, uno de ellos. Estos cursos expandirán tu horizonte mental y tu creatividad, a la vez que desarrollarás muchísimas ideas que puedes aplicar a tu propio negocio.
Hay muchas maneras de ganar dinero en la Red. Todas requieren tiempo, estrategias adecuadas y dedicación. Pero ten la absoluta seguridad de que funcionan y son rentables, más todavía en Latinoamérica, que se caracteriza por su espíritu de lucha, persistencia y creatividad.
