Se define como un periodo de creciente actividad económica global sustentada en altas tasas de consumo e inversión, con fuertes presiones deflacionarias impulsadas por la tecnología y las técnicas gerenciales.
Se cambia el punto de presión en la ecuación precio por cantidad, aumentando exponencialmente las cantidades de productos/servicios posibles de desplegar en el ambiente virtual; a precios mas razonables, casi siempre mas bajos, en un ambiente de competencia que fuerza a las empresas a cortar costos, mejorar la productividad y moderar las utilidades esperadas por los inversionistas; ofreciendo a los clientes productos cada vez de mejor calidad.
Los aumentos en la productividad tienen impacto en el ingreso de la gente, el cual aumenta, y como los productos bajan de precio y mejoran su calidad, el nivel de vida en conjunto mejora.
Las nuevas reglas de juego no requieren del aumento en el gasto con niveles moderados o altos de inflación, como vías para incentivar la economía y bajar el desempleo. El desempleo se baja con el énfasis en el lado “cantidad” de la mencionada ecuación (precio por cantidad) en un ambiente de alta competencia, alta productividad y bajos costos que impulsan estrategias de bajo precio y beneficios moderados.
A su vez, el Estado impulsando una estrategia de reducción progresiva de impuestos se beneficia del cambio de énfasis en la ecuación y estimula mas trabajo, mas ingresos y mas recaudación por concepto de impuestos.
Para ser exitosos cada empresa o institución, pública o privada, requiere redimensionar su modelo de negocios e incorporar los conceptos que están cambiando el perfil de las relaciones.
Las estructuras de negocio deben poder ensamblarse y transformarse muy rápido; el componente físico debe ser atomizado, distribuido y alineado con una network production que permita responder a las demandas del mundo virtual de alta innovación y alta rotación/obsolescencia de productos; alta velocidad en los ciclos de desarrollo, y énfasis en los activos intangibles, los cuales pueden dividirse en cuatro categorías(*):
Esfuerzos en investigación y desarrollo.
Marca(s) propiedad de la empresa.
Estructuras tales como la manera “única” de conducir el negocio (organización, políticas, uso de la tecnología) que hace la diferencia y permite ser el mejor.
Franquicias o inversiones con costos hundidos sustanciales que actúan como barreras a la entrada de otros al negocio.
(*)Baruch Lev. Leonard Stern School of Business
Puede parecer que con solo montar un negocio electrónico ya una empresa o institución está en la nueva economía; posiblemente esté en la economía de Internet, pero definitivamente no está en la nueva economía.
Los cambios mas profundos que deben hacerse están en las cabezas de los ejecutivos públicos y privados quienes deben reemplazar sueldo seguro por riesgo, protección por competencia, así como también inercia por competitividad, entre otras variables de ajuste.
En este nuevo entorno, la palabra clave mercado es reemplazada por agregación de valor y competitividad.
Uno de los conceptos mas fuertes que arrastra la nueva economía es el de la integración. De todo, de gente, de culturas, de países, de información, de roles y de negocios. En contraposición a los conceptos tradicionales de división entre la gente, entre las culturas, los países, la información los roles y los negocios. Coopetition?
Es un cambio de paradigma: ¿puede mi competidor ser mi socio a veces? ¿Podemos integrar las economías de dos países vecinos, alinear políticas y tener la misma moneda?
Las pequeñas y medianas empresas deben tomar ventajas de esta oportunidad de entrar en un mundo distinto, con bajas barreras a la entrada y con grandes posibilidades de multiplicar su valor.
En nuestro caso venezolano, deberíamos impulsar un programa de educación empresaria para reconfirmar si cada quien está en un negocio viable, y cuales son las oportunidades de innovación, para incorporarnos a la economía global.
Solo allí hay verdaderas oportunidades estratégicas. Y el papel del Estado no debe ser el del subsidio o la manipulación del tipo de cambio, sino de impulsar la plataforma e infraestructura tecnológica y de servicios para que esto se dispare.
Creo que nuestras grandes oportunidades de expansión y crecimiento como vehículos de generación de empleos y riqueza están en el campo de los servicios y de la agregación de valor.
Cada vez que fabriquemos algo localmente en condiciones mas caras que el resto del mundo, debemos o bien mejorar dramáticamente, o bien abandonar la actividad: hay que cerrar las empresas eternas sobrevivientes y volcar los esfuerzos en aquellas que tengan oportunidades estratégicas (no importa el tamaño).
Un concepto de la economía tradicional que mantiene la nueva economía es el de ser centrada en el hombre, con la diferencia que ahora la relación causa efecto es mas directa, mas rápida y el bienestar que se puede conseguir es mayor.
No es necesario compartir la pobreza; hay que crear riqueza entre todos y disfrutarla.