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6.1.2 Apoyo a los trabajadores del negocio
Un programa de RSE puede apuntar al reclutamiento y retención de talentos, especialmente
considerando el alto grado de competitividad del mercado.13 Así mismo un programa de
RSE ayuda a mejorar y promover una buena imagen de la compañía en el personal interno,
especialmente en casos donde los empleados resultan directamente involucrados a través de
actividades generadas por el programa (Jorge Roberto, 2012).
En la búsqueda de otros factores que permitieran explicar tan disímiles diseños de las
actividades sociales de la RSE y si en éstas se consideraban a priori sus posibles resultados,
surgió un elemento que demostró tener una enorme influencia: el relacionado con el perfil
profesional de los integrantes de las áreas destinadas a dirigir o coordinar su realización.
Teniendo en cuenta, por un lado, que la mayoría de las empresas del estudio concretan casi
exclusivamente su ejercicio de la RSE a través de sus relaciones con la comunidad y por
otro, que normalmente extreman su racionalidad en la cobertura de puestos, se esperaba
encontrar a cargo de estas tareas en las cuales se requiere una preparación específica muy
vinculada con el campo social, a profesionales que detentaran un perfil más vinculado con
conocimientos relacionados con la gestión social. Sin embargo esto no se verificó. Aún en
las empresas que presentan mayor integración de la RSE no es predominante la presencia
de profesionales del campo social, si bien se advierte una preocupación por participar en
seminarios o cursos de formación en la temática:
"El equipo coordinador del plan de RSE tiene 7 integrantes con diferentes perfiles
profesionales y pertenecientes a distintos procesos de la empresa, además de un asesor en
comunicaciones. También tenemos los aportes de un sociólogo y de una licenciada en
economía. Respecto a la formación de sus integrantes es muy variada ya que hay
ingenieros, contadores públicos, licenciados en administración, etc. Todos han efectuado
cursos o participado de congresos o conferencias sobre la temática" [Entrevista realizada el
26-03-11] (7)
En las empresas en que la dirección y coordinación de la RSE es liderada por un
especialista del campo social, las acciones se conciben partiendo de los resultados que se
esperan a su finalización, existiendo preocupación con respecto a que las actividades
emprendidas no se interrumpan una vez que la empresa desactive la ayuda prestada.
Ciertamente, en la mayoría de las empresas las personas al frente de la función de RSE así
como el resto de los integrantes poseen formaciones profesionales relacionadas con
especializaciones en comunicación. Esto no debiera sorprender ya que en estas empresas el
sector de RSE se encuentra estructuralmente donde la función predominante, al menos
hasta no hace mucho tiempo, era la comunicación institucional.
Sin cuestionar ni dudar de la idoneidad y aptitud de esos profesionales para llevar a cabo
funciones que, cabe recordar, se presentan en estas empresas como mayoritariamente
orientadas al establecimiento de relaciones con la comunidad, la investigación mostró que
los casos donde la presencia de profesionales en comunicación es casi excluyente,
corresponden a empresas en las que en el ejercicio de la RSE prevalecen actividades ya
diseñadas y programadas desde las casas centrales. En estas situaciones caracterizadas por
la implementación de programas que ya se presentan definidos y listos para desarrollar, y
en los que la capacidad de diseño y gestión no es un requisito insoslayable, puede pensarse
que las empresas asumieron que un profesional más orientado al campo social no sería
necesario. En estos casos no se encontró que se consideraran a priori los posibles resultados
de las acciones, así como tampoco que luego de la intervención social se evaluaran los
impactos ni la sustentabilidad de los procesos iniciados.