Acabo de volver de San Diego. Ha sido una experiencia increíble, para la que realmente no encuentro palabras con las que describirla.
Una de las mejores cosas que me traigo, son las relaciones personales con un reducido grupo de hispanohablantes de todo el mundo; durante estos días, hemos compartido momentos muy intensos, de descubrimiento por un lado, y divertidos por otro. No sé qué tenemos los latinos, pero en cuanto nos juntamos, empiezan las bromas, el sentido del humor se desata, y las risas y las carcajadas se dejan oír a lo lejos. Realmente somos hasta un poco escandalosos en comparación con los demás.
Las buenas relaciones que hemos iniciado, se sustentan en una base común en todos: la pasión por lo que hacemos y la misión personal de compartir una nueva forma de entender la vida, que permite al que la practica ser más próspero, más generoso y más feliz.
Dado que lo disfrutamos muchísimo cuando estamos juntos, y el resultado es muy enriquecedor tanto a nivel personal como profesional, hemos mantenido un compromiso que nos va a ayudar a multiplicar de manera milagrosa nuestros resultados. Nos hemos dado cuenta de que a nuestro alcance hay una herramienta que si la utilizamos correctamente, nos va a permitir escalar los beneficios en nuestra vida de manera exponencial: LA SINERGIA.
La sinergia se basa en la habilidad de juntar a varias mentes, y conseguir que 1+1 no sea igual a 2, sino hasta 2.200 o incluso infinito. Pues todo es más que la suma de las partes. Seguramente lo hayas estudiado en el colegio o en la universidad, y hasta probablemente lo habrás practicado. Lo que quizá es un poco más novedoso, y a lo mejor no conoces, es el enfoque que te voy a comentar a continuación. Para que la sinergia sea más efectiva ha de tener algunas singularidades:
- Previamente la comunicación ha de ser sinérgica, es decir, abriendo los 5 sentidos, la mente y el corazón, permitiendo un espacio libre de juicios, donde aunque no se sepa cuál va a ser el resultado, haya una sensación de confianza, entusiasmo y seguridad.
- Es importante una actitud de humildad, aprecio por los compañeros y respeto hacia los demás.
- Conviene olvidar la tendencia grabada a fuego en nuestra infancia, donde se premiaba la estructura, la certidumbre y la predictibilidad. Además, implica dejar de pensar en la posibilidad de error como fracaso, para llegar a la certeza de que donde hay un error hay un aprendizaje.
- Esta actitud nos libera del miedo que provoca enfrentarnos a lo desconocido, y nos anima a aventurarnos en la creatividad, y por tanto a la posibilidad de hacer descubrimientos propios de genios.
- En este entorno, se favorece la autenticidad de cada individuo, y la empatía creadora, que permite nuevas comprensiones y aprendizajes de las ideas de los demás, abriendo la mente por completo a entender los paradigmas de otros, y por tanto dando lugar al máximo nivel que es la sinergia creadora.
¿Te animas a aplicar estas prácticas? Como te digo, sirven tanto para tu vida personal como profesional, y te traerán un estado de paz, alegría y emoción, cada día y cada momento.
La alta eficiencia va de eso: de que cada segundo sirva para acumular en tu cuenta personal entusiasmo, felicidad, y con ello más resultados, y más euros. ¡Lo he comprobado en esta conferencia de personas altamente eficientes! Nosotros ya lo estamos practicando y en breve te haré partícipe de lo que estamos consiguiendo.
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