Los buenos comunicadores tienen algo especial que muchas veces no se puede definir, y en realidad, es carisma. Las personas los ven atractivos, los siguen de manera incondicional y generan en las personas que los rodean buenos sentimientos, sienten placer cuando los escuchan. Poseen una gran habilidad que es transmitir sus pensamientos sin miedo, y el gran objetivo de realizar una buena comunicación, es convencer y seducir a sus oyentes.
Este tipo de personas se las siente seguras y serenas cuando tienen que realizar algún tipo de presentación, saben crear confianza cuando dicen algo frente una multitud de personas.
¿Pero qué pasa cuando algunos comunicadores son absorbidos por el miedo? ¿Cuál es la manera de superarlo? Todos consideramos que si una persona es capaz de enfrentar una audiencia, no siente miedo, no se paraliza frente a una multitud, claro que para que esto suceda, todo lleva un cierto proceso, no se logra de la noche a la mañana, al contrario, todos en algún momento de sus vidas, han sentido miedo.
El miedo no es algo que podamos escapar, en ciertas situaciones se puede sentir miedo, es normal, es mas es algo necesario porque es un sentimiento que te ayuda a preservarte y a cuidarte de que no corras ningún tipo de peligro. Pero no siempre el miedo se relaciona con el sentido de supervivencia, al contrario, está el miedo que te detiene, que no te permite pensar, relacionar las ideas con las palabras, las manos comienzan a sudar, las piernas y la boca tiemblan, y el público, puede notar este tipo de situación. No es una buena señal, porque si el líder o conferencista está parado frente a su audiencia, es porque las personas la consideran capaz de transmitir con tranquilidad su conocimiento, fueron allí para aprender, escucharlo y seguirlo, porque su manera de pensar los seduce para dedicarle parte de su precioso tiempo.
El primer paso para intentar superar este miedo, es reconocer que todos sufrimos de miedo, en algún momento del día, ya sea, ante una junta de socios, frente a un cliente reacio de comprar o de escuchar lo que uno tiene que decirle, frente a un amigo, jefe, o frente a algún familiar. No hay que sentir vergüenza de sentir miedo. Lo único que ayuda es aprender a diferenciar cual es la causa del miedo.
No nombrar al miedo, es permitirle que él se apodere de ti, de tus pensamientos y de tu cuerpo. Una vez que lo puedas identificar, estarás dando un gran paso, porque ya no tiene poder para manejarte como él quiera, sino que tú eres el capital de tu barco. No importa la edad que tienes, si eres joven o mayor de edad. El miedo no sabe diferenciar las edades, cuando se apodera de las personas no diferencia estas cuestiones.
Un verdadero líder debe conseguir la fuerza interior para serenarse frente al miedo. No se debe transformar en un líder negativo por sentir miedo, algunos cuando están padeciendo este tipo de sentimiento, lo que hacen es tratar de dominar a sus seguidores, sometiéndolos a su voluntad para que hagan lo que él dice, pero esto es un liderazgo negativo, porque ninguna sociedad puede sobrevivir si su líder lo único que hace es basar su poder en el miedo de los demás, y no asumir su propia debilidad, que es no tener la capacidad de superar su propio miedo.
Dentro del miedo podemos apreciar dos tipos de elementos, una es la situación real, que muchas veces no se puede modificar y en otras si, y el otro, es la interpretación que realiza el sujeto de esa situación, si es negativa, se sentirá miedo.
Ahora, ¿Cómo podemos superar el miedo?, algunos pensarán ¿es muy lindo decirlo?, pero el que lo tiene que padecer, no lo ve como un proceso de superación personal, al contrario, lo sufren a tal grado que no les permite ni siquiera pensar con claridad. Pero como dije más adelante, todo puede superarse, pero antes debemos:
-Reconocer que sientes miedo
-Identificar a que le tienes miedo
-Ver si estas razones son reales o son producto de la imaginación
-Después de diferenciar las causas, ¿se puede transformar esa realidad?
-Debes ser capaz de superar el miedo
-Pregúntate, ¿Quieres seguir sufriendo por el miedo? ¿Deseas convertirte en una persona libre de miedos?
Ser líder no significa que no puedas paralizarte por el miedo, eres un ser humano, y como tal, vives, te desarrollas y sufres como cualquier otra persona, la diferencia, es que tienen una gran herramienta en tus manos, que es tener la capacidad y el carisma para transmitir a los demás conocimientos. No sufras porque sientes miedo, al contrario, este es el momento para que lo reconozcas y comiences a trabajar para tu propio crecimiento personal.