Es cierto que existen muchos factores que determinarán el éxito o el fracaso de un nuevo negocio. Algunos de ellos son muy arbitrarios. Sin embargo, estamos convencidos que en los tiempos que vivimos, no es prudente dejar al azar el triunfo que deseamos para nuestro negocio, sobre todo sabiendo lo difícil que es ahorrar y/o capitalizarse para poder emprender un sueño.
Por eso, estamos convencidos que desarrollar un modelo de presupuesto de capital (por muy sencillo que sea), así como su profundo análisis, nos permite la validación de propuestas de negocios rentables, que tienden al éxito. Desmembrar un proyecto en cada una de sus partes constitutivas y analizarlas con detenimiento, nos permite también descubrir en el proceso nuevos conceptos/inversiones que no habíamos considerado en primera instancia. Así, ayudamos a nuestro negocio aún antes de comenzarlo, diseñando un modelo que maximice las utilidades y nos permita determinar cada propuesta de inversión.
En pocas palabras, el propósito de desarrollar este modelo de presupuesto de capital es tomar decisiones racionales basadas en cifras y no dejarnos llevar por el corazón. Cuando tomamos decisiones, de pronto todo se torna un poco más claro, el ambiente se tranquiliza y hasta podemos ir removiendo algunos pesos de encima (elegimos estrategias, tácticas, e incluso soñamos con todas aquellas actividades que queremos emprender en este nuevo negocio).
De cualquier forma, es importante destacar que cuando una persona busca invertir en algún tipo de negocio (sobre todo si se trata de una micro, pequeña o mediana empresa nueva), es fundamental que solicite o necesite (en caso de ser el único inversor) los resultados de este análisis de presupuesto de capital.
Las Pymes en nuestro país requieren de estas herramientas que permitan vislumbrar y predecir el crecimiento y la expansión de las mismas. El inversor requiere información relevante que le permita conocer un panorama global de cómo invertir su dinero. Una pequeña empresa siempre requiere hacer una inversión que implica riesgo, por lo que las herramientas que tomen en cuenta diferentes factores a considerar para la toma de decisiones siempre serán deseables y valoradas. Por ejemplo, el valor del dinero en el tiempo, los riesgos, las alternativas de inversión, oportunidades futuras, etc.
La planeación del presupuesto de capital nos permite la búsqueda de proyectos con muchas mayores ganancias. Un instrumento como este es esencial para la evaluación de proyectos porque permite descubrir y decidir cuál de todas las propuestas existentes sería la más rentable.
Los dueños e inversores de las Pymes requieren visualizar un panorama lo más completo que sea posible, antes de poner en juego su dinero. Vislumbrar sus flujos de efectivo, por ejemplo, les permitirá tomar mejores decisiones, y podría evitar tragos amargos en el futuro, sobre todo el no contemplar cómo se comportarían las utilidades a final de cada año.
Además de la predicción de utilidades marginales y netas, otros índices importantes (que, desde nuestro punto de vista, deberían ser considerados en la herramienta de presupuesto de capital) y que permitirán evaluar la viabilidad y conveniencia de un negocio, serían: considerar el pago de intereses (en caso de acompañar el negocio de un préstamo bancario), pago de impuestos, así como la depreciación y valor de salvamento de nuestros activos que en determinado momento nos ayudarían al ser tomados en cuenta en los flujos de efectivo de operación y en los flujos de operación de la inversión total.
También, por supuesto, están los básicos para evaluar la viabilidad del proyecto: el cálculo de los flujos descontados, cuya suma da un panorama acerca del valor presente neto de nuestros flujos de efectivo esperados para el negocio, y nos puede apoyar en la toma de decisiones para saber si saldremos de la deuda o no. Por otro lado, el cálculo del periodo de recuperación nos indicará el tiempo en el cuál esperamos el recobro de la inversión inicial, haciéndonos ver si es posible y conviene esperar el retorno de esa inversión pasado determinado tiempo del lanzamiento del nuevo negocio.
Además, la tasa interna de rentabilidad nos señalará en términos simples de porcentaje, si el nuevo proyecto aspira a obtener una mayor rentabilidad de la determinada por nosotros mismos en la tasa de descuento fijada (porcentaje de rentabilidad mínimo aceptado por este proyecto). Esto es muy importante y debe ser tomado muy en cuenta, puesto que un negocio puede resultar rentable, pero no en la medida que se espera. Es por este motivo que se debe fijar una tasa de descuento para cualquier proyecto, ya que se renuncia a otras oportunidades de inversión a lo largo y ancho del planeta, el objetivo es ganar. Asimismo, el cálculo del índice de rentabilidad brindará una perspectiva sobre el dinero obtenido por cada unidad monetaria invertida. Todos estos elementos plasmados en nuestra herramienta de planeación son muy importantes, ya que disminuyen riesgos y establecen control sobre nuestro proyecto.
Según Moyer (2013) el presupuesto de capital es el proceso de planeación para la compra de los activos cuyos flujos de efectivo se espera continúen más allá de un año. Entonces, con este tipo de herramienta podemos evaluar cualquier tipo de proyecto, que puede ir desde una adquisición o venta de empresas, hasta la compra de tecnología o maquinaria (esto es muy importante ya que podemos observar cómo se comportan los flujos de efectivo a través del tiempo), además de determinar el valor presente de cada ejercicio. La correcta planeación de la inversión da oportunidad al inversor de encontrar una mayor utilidad.
Una vez más, hacemos énfasis en que no existe un plan mágico o metodología perfecta para asegurar el éxito de un negocio, y creemos que a veces factores arbitrarios tienen mucha incidencia en el mismo. Sin embargo, la planificación adecuada del presupuesto permite además de evaluar, supervisar el comportamiento de las ganancias a través del estado de resultados, y ésta a su vez nos permitirá ajustar costos o potencializar ventas, además de trabajar en estrategias de mejora continua para que la PYME permanezca y crezca a través de los años y logre su consolidación.
La economía mundial y la situación actual del país hacen muy difícil (mas no imposible) montar un negocio de éxito en México. Es necesario estudiar y detenerse a contemplar con cierto detenimiento y precaución la inversión que se pretende hacer. Es necesario conocer y aprovechar la mayor cantidad de herramientas financieras disponibles para procurar el triunfo de nuestro negocio.
Durante los últimos 5 años, en el estado de Puebla se registraron más nacimientos que muertes de negocios. Alrededor de 250,000 nacimientos contra 89,863 muertes. Por si fuera poco, en algún momento durante los primeros 5 años de vida la gran mayoría de estos proyectos emprendedores mueren, y después de transcurridos 20 años, sólo sobrevive en la entidad el 15% de aquellos negocios que nacieron el mismo año.
Otra cifra triste, es aquella que obtuvimos en una nota del diario El Financiero (2016), la cual describe cómo en México fracasa el 75% de los proyectos de emprendimiento, resultando que una startup en nuestro país tiene menos probabilidades de sobrevivir que en países como Colombia, Brasil y E.E.U.U. Realmente nos entristece enterarnos que México figura entre los países de América en el que más empresas cierran tras sólo dos años de operación.
Ya no basta con tener una buena idea. Es necesario tener un plan que nos ayude a definir nuestros objetivos, misión, valores, planificar, clientes potenciales, métodos de financiamiento y proyectar los costos que vamos a tener. Estas herramientas permiten evaluar los tipos de apoyo y crédito disponibles, además de cómo harán sinergia con nuestros flujos de efectivo. El planificar a través de herramientas financieras nos permite salir de esa estadística pesimista y evitar errores que pudieran llevar a la quiebra nuestro negocio.
Sentarse a redactar un plan de negocio usando las herramientas financieras disponibles, ayuda a entender la forma en cómo nuestro negocio va a trabajar y se volverá rentable.
Un paso elemental para que un proyecto cobre vida es poderlo vender, es decir, encontrar financiamiento, y para ello, es necesario que los inversionistas crean en nosotros y nuestro negocio. Ellos requieren de información confiable y verosímil que les permita evaluar el potencial de nuestro sueño. Si es posible calcularla, ¿por qué no brindárselas?.
Referencias
Moyer, R & McGuigan, James & J. Kretlow, William. (2018). Administración financiera contemporánea / R. Charles Moyer, James R. McGuigan, William J. Kretlow. SERBIULA (sistema Librum 2.0). Traducción de: Contemporary financial management
López, J. (18 de enero de 2016). El Financiero. Obtenido de Fracasan en México 75% de emprendimientos:http://www.elfinanciero.com.mx/empresas/fracasan-en-mexico-75-de-emprendimientos