Actualmente vivimos en un mundo altamente competitivo, como consecuencia de la globalización de la economía, el vertiginoso avance tecnológico y los vaivenes del contexto económico y geopolítico internacional, donde los riesgos de una recesión mundial y una expansión de conflictos regionales a escalas mundiales, hacen que las organizaciones tengan que enfrentarse a una dura competencia para sobrevivir.
Bajo ese contexto, en muchos países vienen surgiendo conflictos laborales, a raíz de las duras medidas de ajuste económico que vienen aplicando los países, pero que lamentablemente en muchas ocasiones las organizaciones no aplican las medidas de austeridad, respetando los derechos laborales de los trabajadores.
En toda organización sea esta privada ó pública el recurso humano es el elemento más importante para el logro de los objetivos organizacionales, y para ello es fundamental que dicho recurso humano se encuentre motivado y comprometido con su organización.
Es en tal sentido, necesario que el Estado cumpla con su rol de velar por el respeto al cumplimiento de los derechos y deberes de los recursos humanos en las organizaciones privadas y públicas, siendo una de sus herramientas la fiscalización laboral.
Es por ello que la fiscalización laboral cumple un rol fundamental y debe de potenciarse, a efectos de que actuando con criterios estrictamente técnicos y con una labor objetiva pueda contribuir a mejorar el clima laboral en las organizaciones, velar que se cumplan los derechos de los trabajadores y exigir que los empleadores los respeten.
Potenciar la fiscalización laboral en los países no debe entenderse como un elemento que obstaculice la gestión de los directivos de una organización, sino como un elemento que contribuirá a prevenir conflictos laborales, fomentar el diálogo sincero y abierto entre empleadores y empleados e impulsar mecanismos de gestión participativa en las organizaciones a efectos de que todo el recurso humano de una organización, se sienta identificada y comprometida con ella, contribuyendo de esta manera no solo al fortalecimiento y desarrollo de su organización, sino a la sociedad y por lo tanto a su país.