Este es un tema complejo por la dificultad en recopilación de datos, pero le incumbe a todo ser humano de éste planeta. Pensemos en los cambios negativos que se vienen dando, con respecto al calentamiento global, los calores infernales lo estamos sufriendo en carne propia.
Recuerdo que hace muchos años, el campesino, el agricultor y el ganadero, entre otros, tenían como consulta de cabecera el Almanaque Bristol, para averiguar sobre el clima, los cambios de la luna para el corte de madera, las lluvias, etc. En nuestra región ya no vemos como antes ¡años aquellos!, las sabanas y montes reverdecidos, los ojos de agua, caños y quebradas se están agotando paulatinamente. En la parte rural todo está cercado, las riberas de los ríos no mantienen la riqueza de la fauna y flora, precisamente por la deforestación que conlleva a un sedimento. Así pasa en éste país y en todos los países del mundo.
En los últimos tiempos, el cambio climático del mundo ha sido peor de lo que se esperaba, por eso expertos y científicos de todo el mundo, presentaron un documento en Paris, sobre la evidencia científica del calentamiento global y el pronóstico sobre el incremento en las temperaturas del planeta en los próximos años. Esto trae como consecuencia un calentamiento en el nivel del mar, incremento en las lluvias provocando inundaciones catastróficas en muchas ciudades del mundo en desarrollo y eventos climáticos más extremos, como es el rápido retroceso de los glaciares en las regiones tropicales, disminución progresiva de la superficie de los hielos polares, y como efecto, aumento del nivel de las aguas del mar.
El origen de todo esto, es el progresivo aumento de la concentración atmosférica de unos gases que crean un curioso fenómeno denominado “efecto invernadero”. También el fenómeno del niño ocurre en amplias zonas del planeta cada cierto número de años, con marcadas sequías e inundaciones en regiones específicas. Estos cambios climáticos, generan unos efectos nocivos en la salud de las personas y los animales. Como podemos observar, todo esto, no solo afecta a un continente o a algunos países determinados, sino que tiene repercusiones a lo largo de todo el planeta.
El deterioro del medio ambiente, ha hecho que los ciudadanos de todos los países, hayan tomado conciencia de la importancia de su conservación. Hemos exterminado en la segunda mitad del siglo XX, más especies que a lo largo de toda la historia de la humanidad. Cada día que pasa desaparece una porción de las selvas de la tierra, que son auténticos pulmones (la Amazonía alberga la mayor diversidad de ecosistemas, especies y recursos), también la erosión y el desierto van ganando terreno.
Por eso, estamos en una encrucijada donde se presenta un cruce de caminos. Cuando se llega a ella, hay que decidir cual camino tomar, en ese momento histórico nos encontramos.
Podemos pensar por el camino del desastre, creernos dioses, ser insolidarios con el resto de la humanidad, pensar que el planeta va a aguantar todo lo que le echen, no nos esforzarnos por conseguir la paz, etc.
Pero también podemos optar por el camino de la supervivencia, pensando humildemente que somos humanos y mortales, creado por un ser supremo que es Dios, que nos da las cosas, pero que también nos las puede quitar. Es por eso que debemos dejar a nuestros descendientes un mundo mejor, pensando en el bien de la humanidad, cuidando nuestro bello planeta, pensar que todo falla si falla el hombre.
Esta es la opción que debemos seguir, que debemos tomar. La especie humana es una especie social, con gran capacidad de comunicación consigo misma, por eso debe optar por la supervivencia.
Las Naciones Unidas reconocen que la humanidad está en una encrucijada, por eso han realizado una serie de reuniones internacionales, para tratar el problema del deterioro ambiental y el clima, comprometiéndose con el desarrollo sostenible, asumiendo una responsabilidad colectiva para avanzar y fortalecerlo.
Hemos visto causas y efectos que genera el calentamiento global. Ahora, analicemos cuales son las posibles soluciones, teniendo en cuenta los señalamientos de Manuel Vásquez Romero (Consecuencia del cambio climático en la salud de la población mundial):
- Concientización social: sin conciencia social, todo lo demás sirve de muy poco.
- Hay que promover la divulgación y explicación del problema, a través de los diferentes medios de comunicación, de la clase política, de los científicos, de los profesores, de las universidades, de los organismos internacionales, de los intelectuales, etc.
- Hacer un debate necesario sobre la energía nuclear.
- Aplicar medidas sobre reducir la emisión de los gases con efecto invernadero.
- Aplicar medidas para retirar de la atmósfera los gases con efecto invernadero.
- Promover el conocimiento del problema en todos los estamentos sanitarios.
- Mayor coordinación internacional en el manejo y tratamiento de catástrofes climáticas.
- Información y prevención del daño solar.
- Mejoras de los sistemas de producción y conservación de los alimentos, debate sobre los alimentos transgénicos.
Por ultimo, la Revista C del Tiempo del 10 de Febrero/07, manifiesta lo siguiente: “es un momento de tomar la iniciativa y apoyar la protección de nuestro entorno, que a su vez representará un beneficio para el país y para el planeta, cuyo deterioro no da espera. Unamos las gotitas de nuestros esfuerzos para generar verdaderas oleadas de beneficios”.
Es necesario que reflexionemos y pensar seriamente que nos encontramos ante una serie de encrucijada histórica. La responsabilidad de afrontarla nos concierne a todos por igual: científicos, dirigentes políticos, economistas, periodistas, empresarios, gobierno, etc. Cada uno debe jugar un papel importante en este mundo, para buscar medios de solución y minimizar esta encrucijada del calentamiento global.