La televisión en Internet (TVIP) se ha convertido en los últimos años en una herramienta comunicativa que arrasa con otros modelos tradicionales, cuyas principales ventajas son la inmediatez, la economía y la diversidad.
Esta carrera hacia el nuevo modelo televisivo avanza a pasos agigantados. Tanto es así que no solamente ofrece al usuario información, formación y entretenimiento, sino que es un nuevo soporte publicitario que desbanca a los modelos convencionales.
El “rally publicitario” de la TVIP
La convergencia de televisión e Internet trae nuevas modalidades de publicidad, en unos casos por adaptación de las que tenía cada elemento por sí solo y en otros por la combinación de ambos. Entre otras, cabe resaltar:
- Spots publicitarios. Anuncios tradicionales para televisión o para Internet.
- Banners. Diseño de publicidad en los sitios web.
- Pop Up Banners. Son los Banners vinculados a determinados contenidos que aparecen en una ventana cuando se entra en ellos.
Intersitials. Es la inserción de anuncios entre programas. - Logos. Presentación de logotipos de clientes con un enlace directo a sus webs.
- Product Placement. Es la colocación de marcas de productos en las animaciones.
Más contenidos, más inmediatez
La importancia de los contenidos televisivos en la Red se deja ver desde que hace años, se estrenase el polémico reality show “Gran Hermano”. Desde sus inicios, este programa permitía ver mediante el portal Terra lo que pasaba en la casa, algo muy novedoso si tenemos en cuenta que hacía tan sólo unos años los hogares contaban con Internet, y desde ese preciso instante ya se podía ver lo que ocurría en “una casa” a tiempo real, y por lo tanto, actualizada.
Por otra parte, esta tecnología tan novedosa ha permitido que numerosas empresas se hagan publicidad, aprovechando estos espacios que son mucho más económicos que los habituales y que además, tienen el rasgo definitorio de que llegan a los usuarios que les interesa, puesto que previamente hacen un estudio de mercado que les indique el público habitual en cuestión.
Por otra parte, y siguiendo a Joël de Rosnay, director de las Ciencias y la Industria, la televisión en Internet nos permite la movilidad de buscar la información cuando queramos. Joël de Rosnay viene a determinar que esta nueva forma televisiva se presenta como una alternativa comunicativa en la que cualquier persona puede acceder a los contenidos que desee, en función e sus necesidades.
Pero, junto a la integración de tecnologías, asistimos a una integración de contenidos. Un ejemplo es una emisión de PBS, la cadena pública. Tiene una emisión de televisión y un programa de Internet: ambos funcionan en paralelo y, según el productor de esta emisión, el espectáculo de televisión es el resumen de lo que puede encontrarse en el sitio.
Una de las mayores excelencias de la TVIP será, sin lugar a duda, el seguimiento de eventos deportivos a través de la Red, algo que señala la empresa IT Manager: “Otra gran ventaja que tendrán los usuarios de esta tecnología es que podrán fácilmente “dirigir” los eventos deportivos o cualquier otro contenido que le permita cambiar el tipo de cámara o hasta la profundidad de esta”.
CONCLUSIONES
Al igual que en la televisión de pago, asistimos a un medio que se construye en función de los gustos de la audiencia. De este modo, existen TVIP que emiten vídeos domésticos (www.youtube.es) o aquellas que se basan en informativos, como es el caso de las generalistas, que recientemente han puesto en marcha un servicio para ver las noticias a través de Internet. El más claro ejemplo de esto último es Antena 3.
En cuanto a la audiencia, ningún teórico que ha aborado el estudio de la televisión en la Red aporta datos concretos sobre la misma. Sin embargo, la consultora Account revela los perfiles de usuarios de la TVIP, que en su mayoría, apunta, jóvenes de entre 25 y 34 años. Además, se trata, según la compañía, de más hombres que mujeres. Un dato interesante es que al menos un 76% de la ciudadanía española pagaría por un servicio de televisión en la Red, lo que lleva a pensar que existe una audiencia descontenta o insatisfecha con el modelo televisivo tradicional.
Los expertos coinciden en afirmar que la TVIP se convertirá en un medio de gran influencia para un telespectador que tendrá una programación “a la carta”. Además, ninguno descarta la posibilidad de que se trate de un medio, en algunos casos, estrictamente corporativo, pero en otros de interés divulgativo y absolutamente informativo.