El delito del tráfico de armas en México

El tráfico de armas, es un delito que esta acabando con nuestra sociedad, sacudiendo brutalmente las costumbres y formas de vida de los mexicanos ya que es muy difícil de combatir, ya que no recibimos mucha información al respecto.

Es por esto que nuestro país es visto como uno de los países con mayor corrupción en el mundo ya que nuestras leyes hacia estas actividades no son tan fuertes para controlarlas, aunque se sabe que el traspaso de armas proviene de los EE.UU.

De acuerdo a la definición legal, el tráfico de armas consiste en la introducción al territorio nacional, en forma clandestina, de armas, municiones, cartuchos, explosivos y materiales de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea o sujetos a control. Esta norma es explícita en el artículo 84 de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, de las investigaciones realizadas en México por el Ministerio Público Federal, apoyado por la Policía Federal y el Ejército Mexicano.

Antecedentes

Este problema surgió oficialmente en México a partir de 1994 y en 1996, con la formación de los Ejércitos Zapatista de Liberación Nacional y Popular Revolucionario, ya que en ese año entró la mayor cantidad registrada de armas al país, haciendo de México el nuevo paraíso de las armas, tanto para propios como para extranjeros.

Durante 2007 y según la PGR, las 2 mil 500 ejecuciones documentadas como parte de la guerra entre las organizaciones criminales, además de las 3 mil 900 que se han registrado en el año de 2008, se han cometido con este tipo de armas. En el caso de los más de 550 asesinatos registrados en Baja California durante este año, igualmente se cometieron con armas introducidas ilegalmente al país.

En la presente administración se han decomisado en las garitas fronterizas y en puntos de revisión carreteros cerca de 20 mil de estas armas, lo que representa una fracción del total que se introducen en territorio nacional.

Desarrollo

México ha sido calificado a nivel mundial como uno de los países más golpeados por la transferencia ilícita de armas y de acuerdo con Organizaciones No Gubernamentales internacionales, uno de sus mayores retos es reconstruir la seguridad ciudadana a la par de la lucha contra grupos del crimen organizado equipados con tecnología de tipo militar para atacar a las tropas y civiles.

En nuestro país, los estados con mayor índice de este delito son Tamaulipas, Jalisco, Baja California, Distrito Federal, Sonora y Guanajuato. Y en sus respectivas ciudades fronterizas: Tijuana y Mexicali en Baja California; Ciudad Juárez y Ojinaga en Chihuahua; San Luis Río Colorado en Sonora; y Nuevo Laredo en Tamaulipas. En el Distrito Federal, las zonas que presentan mayor importancia en cuanto a tráfico de armas son el Centro, Tepito, y colonias como la Doctores, la Buenos Aires y la Peralvillo.

De acuerdo con el informe de la consultoría, las fuerzas de seguridad mexicanas capturaron más de 99,000 armas de fuego entre el 2007 y el 2011, y la agencia estadounidense de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos rastreó 68,000 de ellas a vendedores de armas en EU. El texto detalla que los cárteles de drogas prefieren las pistolas como la Fabrique Nationale 5.7, conocida en México como la mata policías, que son capaces de penetrar los chalecos antibalas.

Ambas armas son vendidas en Arizona y Texas, los narcotraficantes mexicanos usualmente las adquieren a través de compradores intermediarios, ciudadanos estadounidenses, a quienes les pagan una cuota por arma, según lo reportado por ICG. Los cárteles las trasladan a México usando los mismos autos con compartimientos escondidos que emplean para contrabandear drogas.

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De acuerdo con el informe, Washington ha admitido que decenas de miles de armas de fuego han sido vendidas a los cárteles mexicanos.

Consecuencias en la sociedad

El gobierno de los Estados Unidos no está haciendo lo necesario para reducir al máximo este tráfico que sucede en sus puertos fronterizos. Por su parte el gobierno mexicano no tiene ninguna posibilidad de controlar nuestra frontera, actualmente carcomida por la corrupción, la complicidad y también por el miedo.

El caso es que las armas siguen entrando a México y van a parar a manos de todo tipo de criminales, secuestradores, asaltantes de poca monta, asesinos a sueldo y narcotraficantes.

Según estudios de las autoridades federales hay más de 15 millones de armas ilegales que circulan en las 32 entidades. La legislación mexicana sólo permite la portación legal tener hasta dos armas en el hogar para protección. La segunda y última modalidad para adquirir un arma de fuego en nuestro país, se refiere a la caza deportiva; mientras el permisionario acredite su afiliación a un club de caza, la ley le permite adquirir un arma corta (pistola) y nueve largas para su empleo en cacería.

La inseguridad es el principal problema que aqueja a los capitalinos, según la Encuesta de Percepción de la Calidad de Vida en el Distrito Federal 2012. Del total de los habitantes del DF, 28% respondió que les preocupa la inseguridad, siendo Xochimilco y Coyoacán las de mayor consistencia en su respuesta, con 42% cada una. Álvaro Obregón y Tláhuac son las demarcaciones en las que sus pobladores perciben en menor porcentaje este problema, con 5 y 17%, México, como país que sufre los efectos de la violencia y el descontrol de las armas, puede jugar un papel clave en lograr que se firme este Tratado como instrumento de respeto a los derechos humanos. Recientemente el Senado de la República aprobó un punto de acuerdo apoyando el Tratado e instando al gobierno de México a asegurar que contenga normas eficaces para la protección de los derechos humanos.

Estas son una de las armas que mas se trafican en nuestro país:

Tráfico de armas

Soluciones

Es necesario invertir más vigilancia y más dinero en la lucha contra el tráfico de armas. Pero antes de realizar cualquier acción gubernamental propiamente dicha contra el tráfico de armas, se deben implantar programas de concientización profunda entre la población, para mostrarles transparentemente la verdad sobre esta amenaza que día a día se vuelve más poderosa.

Organizar campañas de información, que viajen por toda la república, hacer slogans publicitarios que inviten a la gente a denunciar cualquier delito que tenga que ver con el tráfico de armas, garantizando el anonimato al cien por ciento; Dar pláticas y organizar talleres de concientización en centros de beneficio e interés común, como los planteles del DIF, Casas de Cultura, Museos, Escuelas Secundarias, Preparatorias y Universidades, Hospitales, Delegaciones, etc.; repartir volantes a los ciudadanos en puntos estratégicos, como las capitales de los estados, el Centro Histórico, etc.

Al tener a la población, en su mayoría, totalmente informada sobre este fenómeno, y los medios de comunicación y autoridades competentes dispuestos a ayudar, orientar y atender todas las denuncias realizadas, habría que empezar con las acciones propiamente gubernamentales.

Conclusión

En conclusión, el Tráfico de Armas en México, es un fenómeno que, desde últimos años para acá, ha estado ganando terreno, y haciendo más peligrosa aún la condición de vida de todos los mexicanos. Sin embargo, es muy triste pensar en que aunque sea un problema que poco a poco está asfixiando a la sociedad, la misma sociedad aún no esté tan enterada como debería, es decir, la gente en general, piensa que el tráfico de armas no juega un papel tan peligroso en la sociedad, y no sabe que magnitud tiene el problema.

Creo que el tráfico de armas es un fenómeno que esta acabando con la seguridad y estabilidad social. Lo que más increíble me pareció de la investigación, es la facilidad con que la gente puede portar un arma en la ciudad, la seguridad de la sociedad mexicana, sea poca o mucha, se ve seriamente amenazada por el tráfico de armas. Y con esta investigación, la confianza que se puede llegar a generar entre colonos y vecinos se ve brutalmente sacudida.

Consideramos al tráfico de armas, como uno de los peores ilícitos en contra de la vida humana, puesto que se trabaja con instrumentos que lejos de únicamente acabar con la vida de las personas, también se le sucede causar daño en diferentes maneras, como lo son el psicológico, emocional, moral, integral e individual, además de que es una forma de intimidación y magreos a quien le es señalado con un arma.