Costos

Medida y valoración del consumo realizado o previsto por la aplicación racional de los factores para un determinado objetivo, por ejemplo la obtención de un producto, trabajo o servicio.

Bajo esta perspectiva, se considera el costo como una magnitud relevante para el cálculo del resultado interno, de forma análoga, pero diferenciada, a la magnitud «gasto» que sería la magnitud relevante para el cálculo del resultado externo.

El término costos puede utilizarse en tal variedad de ocasiones que se recomienda utilizarlo con un adjetivo o frase que explique su significado. Por ejemplo, el costo de un objeto puede referirse a su costo histórico, costo de oportunidad, costo de reposición, costo estándar, costo estimado, costo directo, costo variable y, así, sucesivamente.

Costos de ventas

Costos de las mercancías o servicios que se venden. Se conoce también como costos de los bienes (o servicios) vendidos.

Costos históricos

Sacrificio económico requerido, o que se requeriría, para adquirir o producir un bien o un servicio.

Constituye, por tanto, el monto de efectivo, o su equivalente, pagado para la obtención de un bien o servicio.

Con posterioridad a su adquisición, puede ajustarse el monto histórico mediante amortizaciones.

El costo histórico ha estado sujeto a amplia controversia debatiéndose el argumento de que esta modalidad de costos no proporciona una base razonable para la adopción de medidas y evaluación de los gastos por la dirección.

Por otra parte se arguye que, como se evidencia con la técnica “análisis costos-beneficio”, los sistemas contables, cuestan.

En efecto, frecuentemente es necesario mantener registros históricos para satisfacer diversas exigencias legales; por tanto, los “costos históricos” no pueden ignorarse. No es pequeño el número de gerentes de los sectores financieros y de costos de una empresa que están convencidos de que el costo histórico permite alcanzar la congruencia de objetivos que persigue el equipo gerencial.

El “costo histórico” o “precio de adquisición” es uno de los denominados “principios contable-financieros de general aceptación”.

Costos previsto

Sacrifico económico que, según la información disponible, se estima que será necesario realizar, en un momento futuro dado, para adquirir o producir un bien o servicio.
Sin Costo pronosticado ni costo proyectado.

Costo unitario

Costo de producir una unidad de producto o de servicio, basado generalmente en promedios y tomando en consideración los costos de todos los factores productivos que intervienen en la producción.

Costos de una unidad seleccionada de una mercancía o un servicio.
Ejemplos: costos por tonelada, por hora-máquina, por hora de mano de obra, o por hora-departamento.

Por consiguiente el costo unitario es un costo promedio para el período en consideración, y a nivel global, por tanto, corresponde a la suma de los costos unitarios de los insumos de producción tales como material directo, mano de obra directa, y costos indirectos de manufactura, en el caso del costo unitario de producción. También se puede obtener este costo a partir de los valores monetarios totales de los insumos de producción dividido en el número total de unidades producidas. Una expresión más general de este concepto puede incluir los costos de producción a objeto de obtener un costo unitario total.

Costeo

Proceso de determinación del costo de las actividades, procesos, productos o servicios.

Costeo analítico

El que incluye los gastos imputables directamente a la producción, exceptuando la parte que no se tomó en cuenta por el hecho de que no pudieran utilizarse completamente las instalaciones destinadas a la producción.

Esta categoría de costeo se utiliza para mensurar la proporción de los gastos recurrentes y continuos a incluirse en el cómputo de los costos, mediante la comparación, con una norma predeterminada, del ritmo real de actividades de la unidad económica.

Se incluyen en el costo los gastos que corresponden a un periodo determinado en la medida en que se utilizó realmente la capacidad disponible; y se considera como pérdida la porción de los gastos asignados a la capacidad no utilizada. Esto representa, de hecho, una pérdida económica atribuible a que la producción del período fue más baja que lo normal y no forma parte del costo de las unidades efectivamente producidas.

Costeo directo

Se conoce también como costeo variable o costeo marginal.

Es el tipo de costeo del producto en el que los gastos indirectos de fabricación fijos se cargan inmediatamente contra los ingresos correspondientes al período en que se incurrió en la necesidad de imputarlos a las unidades específicas producidas. Puede también interpretarse como el costeo que incluye gastos que se atribuyen directamente a la producción y que tiende a aumentar o disminuir en proporción a las variaciones en el ritmo de operaciones, quedando excluidos los costos indirectos fijos.

Desde otra perspectiva más tradicional, el costeo directo se define como la segregación de los costos de fabricación entre aquellos que son fijos y los que varían directamente con el volumen.

Este tipo de costeo implica, pues, que no se van a incluir en el costo de los inventarios ninguno de los gastos indirectos de producción recurrentes y continuos. Los principales componentes son la depreciación y el mantenimiento de las instalaciones de planta.

Para la evaluación de las existencias de inventario y el costo de las ventas se utilizan únicamente los costos primos más los gastos de fábrica.

El resto de los gastos de fábrica se carga a los resultados del período. Es necesario reconocer, sin embargo, que el costo directo corriente consiste substancialmente en una segregación de gastos y tan sólo en segundo lugar un método de evaluación de inventarios.

Costeo funcional

Labor de clasificar los costos asignándoles a las diversas funciones ejecutadas, tales como fabricación, almacenamiento, facturación y distribución.

Costos comerciales

Costos derivados de las actividades relativas al área comercial de la empresa, y que se suelen tener la consideración de costos del período.

Dentro de esta clasificación de costos se pueden distinguir entre costos variables y costos fijos; los costos variables están integrados por conceptos tales como: embalajes, gastos de transportes sobre ventas, comisiones sobre ventas, costos de facturación, etc., los cuales, y a fin de agilizar los trabajos de presupuestación, suelen estimarse aplicando un determinado porcentaje sobre el volumen de ventas.

En cuanto a los costos de estructura o fijo es conveniente efectuar la distinción entre:
a) Costos directos e indirectos respecto a un producto, o línea de productos.
b) Costos inevitables y costos evitables; esta última clasificación permite determinar, en el momento de estimar las cargas, aquellas que aún cuando son independientes del volumen de actividad pueden ser reajustadas en función de las circunstancias previstas para un determinado ejercicio. Por lo general, el cálculo del costo del producto se lleva a cabo excluyendo los costos comerciales.

Costos compartidos

Costos que benefician a más de un tipo de productos, o a más de una subdivisión de la empresa, y que no pueden ser identificados directamente con unidades específicas de producto o con subdivisiones.

Costos comprometidos

Son costos fijos que derivan de poseer una planta o instalación industrial, equipo y una organización básica; tales costos quedan afectados fundamentalmente por decisiones a largo plazo que tienen que ver con el nivel de capacidad que se desee.

Costos comunes

Costos de los factores productivos necesarios para el conjunto de productos, cuando dos o más tipos de productos surgen a partir de un único proceso productivo.

Costos conjuntos

Costos derivados de un proceso de producción en el que se obtienen de forma simultánea e inevitablemente dos o más productos, por lo que no es posible identificarlos con un producto particular.

Son costos en los que incurre la empresa en su procesamiento antes del «punto de separación».

Costos controlables

Costos relativos a aquellos factores sobre los cuales un responsable puede ejercer un control durante un período de tiempo.

La separación de los costos en: controlables y no controlables, es necesaria para la implantación de un sistema de control la gestión efectivo, porque permite orientar las acciones de los distintos responsables hacia los objetivos de eficiencia y eficacia, con miras al logro de una mejora constante de las actuaciones de la empresa.

La asignación de los costos a los centros de responsabilidad se basa más en el conocimiento y en la información que en el control. Interesa conocer quién es la persona que puede explicar o predecir el comportamiento de una determinada variable de la cuenta de resultados (precio, consumo, etc) con independencia del grado de control que sobre dicha variable pueda ejercer.

Costos de administración

Costos correspondientes al área que en las empresas acomete un conjunto de funciones relacionadas con la administra¬ción, gestión, organización y control de las mismas.

En general, estos costos son tratados como costos del período y no como costos de producto, lo que de alguna forma está justificado puesto que integra actividades destinadas a apoyar todas las funciones de la empresa y, por tanto, independiente del volumen de producción, o línea de producto; así, resultaría realmente arbitrario intentar asignarlos a la producción de un ejercicio por carecer de criterios objetivos para dicha asignación, cosa que no ocurre con la actividad de producción. Su consideración como costos del período evita la necesidad de distribuirlos entre los productos.

Costos de almacenamiento

Costos derivados de la existencia de almacenes, en la empresa, destinados tanto a los materiales directos como a los materiales indirectos que se aplican al proceso productivo. Se trata, pues, de costos derivados de tareas tales como: conservación; calefacción; refrigeración; seguros; amortización; etc, y que generalmente son fijos e independientes de la cantidad de materiales almacenados; no obstante, paralelamente, se puede incurrir en costos cuya cuantía dependa de la naturaleza y cantidad de artículos almacenados, sobre todo cuando requieren de una atención especial.

Costos de capacidad

Término alterno al de “costos fijos”, en el que se destaca que, en una unidad económica, se necesitan este tipo de costo para dotarlos de facilidades operativas y una organización en disposición de producir o vender a un volumen de actividades previsto. Se trata, pues, del costo fijo derivado de los recursos consumidos en un período con el fin de mantener la capacidad de producción o venta que posea una unidad económica.

La capacidad tiene tres dimensiones:

a) Capacidad física, referente a las propiedades (edificios, equipos, etc.)
b) Capacidad organizacional, o institucional, que es la aportada por la Dirección y los distintos niveles de recursos humanos.
c) Capacidad financiera, proveniente del capital circulante o fondo de maniobra y otros recursos financieros.

En los tres casos la capacidad cambia sólo lentamente. En efecto, conlleva tiempo pensar en nuevas instalaciones, efectuar los trámites de financiación, completar la construcción de las instalaciones, contratar los recursos humanos necesarios y poner en funcionamiento estos recursos.

Por otro lado, las reducciones de capacidad suponen también algún tiempo.
Todo esto significa que durante cualquier período de tiempo reducido, la unidad económica tendrá que operar con una existencia de recursos productivos relativamente constante, incluyendo entre ellos los de carácter organizacional y los financieros.

Costos de capacidad ociosa

Variación atribuible a la falta de uso de los medio de producción, de acuerdo con los índices proyectados, que se considera una partida específica del Estado de resultados.

Costos de conversión

Costos necesarios para transformar materia prima en productos elaborados.

Costos de distribución

Todos los costos incurridos desde el momento en que se fabrica el producto y pasa al almacén, hasta que se vende y se cobra un precio de venta.

Costos de estructura

Corresponde a los costos de los recursos asignados para solventar la infraestructura a partir de la cual se desarrolla la actividad operativa, incluyendo los costos de las estructuras administrativas y de comercialización, dado que los costos de la estructura de producción se imputan a la función operativa propiamente dicha y conforman los denominados «costos fijos indirectos de producción», que se aplican a la producción mediante la técnica del costeo por absorción.

Costos de explotación y mantenimiento

Costos reiterados que generan la explotación de los activos físicos y el mantenimiento de su valor.

Suelen plantearse dificultades para distinguir si los costos de mantenimiento son gastos corrientes o gastos de capital, pero el análisis de la corriente de liquidez actualizada, hace innecesaria la distinción.

Costos de fabricación

Costos vinculados a aquellas actividades que directamente inciden en el proceso de fabricación, dentro de las que cabe incluir las siguientes: manejo de materiales; registro de tiempos; control de calidad; supervisión; mantenimiento; limpieza; etc. Se trata, pues, de una categoría de costos vinculados exclusivamente a la fase de ejecución, o de obtención del output, y que, generalmente, son consecuencia de la planificación previa que se haya realizado del proceso de obtención del producto.

Costos de inactividad o superactividad

Se refieren a un nivel de producción determinado y deben ser imputados al resultado del ejercicio o período en que se verifican estos hechos, sin modificar en consecuencia los costos comunes de fabricación representados por la cuota, y por ende al costos de producto elaborado.

Costos de investigación y desarrollo

Costos de distinto tipo derivados de las actividades de investigación (carácter primario) y desarrollo (carácter ulterior) llevadas a cabo en una empresa.

Generalmente, las empresas no suelen incluir los costos de investigación y desarrollo en los costos de producción, dado el carácter singular que tiene esta actividad respecto del resto de la empresa.

Es conocida la incertidumbre a que están sometidos los recursos financieros que destinan las empresas a actividades de investigación, dado que los resultados suelen ser inciertos, intangibles y, en ocasiones, de muy difícil cuantificación; además, suele darse la circunstancia que existe un significativo retraso entre los costos incurridos y los resultados de la investigación.

Costos de la mano de obra

Componente sustancial del valor añadido económico de la empresa, que se corresponde con la aplicación del esfuerzo humano en el proceso de la actividad empresarial. Sólo se deben considerar como tales costos aquellos gastos de personal en los que incurre la empresa y que necesariamente ha de recuperar en el ciclo de explotación o ciclo contable.

En principio, ese concepto no incluye aquellos gastos de carácter activable, sino la contraprestación que recibe el trabajador de forma directa por el trabajo realizado, así como las cargas asociadas al mismo, tanto de carácter obligatorio como voluntario.

Costos de mano de obra indirecta

Las contraprestaciones y cargas sociales correspondientes al personal que no participa directamente en la fabricación del producto y se dedica al manejo de materiales, mantenimiento, control de calidad, inspección, etc.

Costos de materiales

Es el valor de las materias primas y otros materiales menos importantes, que se usan en el proceso de producción.

De esta forma, los materiales pueden clasificarse como directos (materia prima) o indirectos (restantes materias utilizados).

Constituyen el ejemplo típico de un costo variable, y que se encuentra en el producto elaborado, en el mismo estado o con modificaciones de tipo físico (cambios en el tamaño y/o en el envase, ej: fraccionamiento) o con modificaciones de tipo químico (cambios en la estructura del elemento, ej.: transformación de azúcar en caramelo).

Costos de oportunidad

El costo o sacrificio medible de rechazar una alternativa, seleccionando otra, en la elección de cursos alternativos de acción o estrategias.

Desde otro punto de vista puede considerarse como la pérdida de ingresos alternativos, producto de las decisiones adoptadas. Así, el costo de oportunidad puede representar el beneficio que se pasa por alto o se desecha como consecuencia de la elección efectuada.

Costos de producción

Materia prima, mano de obra, carga fabril, costos administrativos y costos financieros, cuya información la proporciona la Contabilidad de Costos.

Expresión cuantitativa monetaria de factores de producción, previamente adquiridos o contratados, que son consumidos en un proceso y que, por razones técnico-económicas, deben ser necesariamente insumidos en el producto elaborado.

Se conforman estructuralmente por tres elementos: materias primas, mano de obra directa y carga fabril. \\ Incluyen todos los costos identificables (fijos y variables), a saber:

a) Materias primas (según precio de factura y gastos vinculados)
b) Mano de obra (según jornales directos del proceso de producción)
c) Gastos indirectos de fabricación (según costos restantes)
Sacrificios económicos necesarios para la obtención de la producción, devengados en función de la misma.

Costos de reprocesos

Mayores erogaciones producidas por los trabajos defectuosos para que puedan cumplir con las especificaciones generales. La teoría de la contabilidad de costos aconseja incluirlas entre los costos comunes de fabricación o carga fabril.

Costos degresivos

Erogaciones y gastos que fluctúan en menor proporción que las variaciones de la producción.

Costos del capital de conversión

Costos por la aportación de los activos afectados al proceso de producción, que se obtiene sobre la base del costo de oportunidad del mercado.

Costos diferenciales

Costos incurridos ante diferentes alternativas posibles que se comparan para la toma de decisiones, debiéndose analizar la totalidad de los costos, tanto fijos como variables, como productivos o no productivos. También se pueden considerar como aquellos costos en que se incurrirá si una alternativa es llevada a la práctica y que hacen diferencia entre una estrategia y otra.

Son costos que pueden incrementarse, disminuirse o modificarse, producto de la estrategia seleccionada.

Costos directos

Son aquellos costos que pueden ser identificados clara e inequívocamente, y vincularse directamente, por tanto, al objeto de costos, por ejemplo, el producto, servicio, línea o actividad, y que se controlan económicamente en forma individualizada en el proceso de imputación a los objetivos de costos.

Costos estándares

Son costos predeterminados, utilizados en el ámbito de la producción con el propósito de mejorar la eficiencia y el control en la gestión del proceso productivo.
Tienen un carácter de dominio sobre los costos reales, por lo que se traducen en los costos que deberían existir o incurrirse en la empresa; por lo tanto, cualquier variación que se verifique en un sentido positivo (bajo el estándar), o en un sentido negativo (sobre el estándar), se considera como eficiencia o ineficiencia en el proceso productivo, respectivamente.

Costos expirados

Servicios y bienes cuya propiedad se transfiere o se consume en el proceso de obtención de ingresos.

Costos fijos

Costos cuya magnitud no se encuentra influida por las variaciones en el nivel de actividad de una unidad empresarial, y no varían, por tanto, ante cambios en los niveles de actividad que se originen dentro de un rango relevante, constituyendo ésta su característica definitoria. En cualquier caso, si bien las variaciones comprendidas en un determinado intervalo de actividad estos costos suelen permanecer invariables, un incremento o disminución de dicho intervalo de actividad puede llevar aparejada una modificación en la estructura y cuantía de estos costos fijos.

Costos fijos de estructura

Son los costos hundidos relacionados con la capacidad instalada de la organización. No son susceptibles de eliminar ni reducir en el corto plazo y existen aún en condiciones de planta parada y sin operaciones (en algunos países se denominan asimismo costos fijos inevitables).

Costos fijos de operación

Son aquellos costos fijos que surgen cuando comienzan las operaciones de la organización, no siendo susceptibles de ser eliminados en el corto plazo, y que no existirán en condiciones de planta parada y sin operaciones.

Costos fijos de preparación de la producción

Costos que, en tanto la empresa permanezca inactiva no se incurre en ellos, si bien la fabricación de la primera unidad determina su aparición y posterior mantenimiento.

Costos fijos evitables

Ciertos costos fijos que pueden ser ajustados de un ejercicio a otro sin necesidad de efectuar desinversiones. En algunos casos, este ajuste puede llevarse a efecto dentro del propio ejercicio, a condición de que no se hayan devengado al principio del ejercicio económico correspondiente.

Costos fijos inevitables

Costos en que se incurre por la mera tenencia de medios estructurales que se utilizan en una determinada actividad y que suelen ser ineludibles, a corto plazo. La supresión total o parcial de este tipo de costos implicaría un proceso de desinversiones, o de liquidación de la estructura preestablecida.

Costos financieros

Costos inherentes a los recursos financieros empleados por la empresa para el desarrollo de su actividad; en general, puede tener dos acepciones: En una primera, el costo financiero puede ser definido como el costo medio que soporta la empresa como consecuencia de la política financiera de endeudamiento mantenida durante un ejercicio económico; este costo no suele incluirse entre los costos de producción, salvo en el caso de procesos de producción dilatados (bodegas, astilleros, empresas de construcción, etc.), donde el costo derivado de los capitales ajenos invertidos en el proceso, es tan importante como cualquier otro factor productivo.

En una segunda acepción, el costo financiero puede conceptuarse como un costos de oportunidad o carga imputable a la inversión mantenida en fábrica y en otros activos necesarios para llevar a cabo la transformación de los inputs. Genéricamente, el costo financiero se evalúa en función de los rendimientos que hubieran podido obtenerse si se diera un uso alternativo a los capitales invertidos a lo largo del período de producción.

Algunas empresas consideran al costos financiero como costos indirecto de producción y, por tanto, un elemento más del costos de output, sobre todo cuando se pretende evaluar la conveniencia de ciertas alternativas (por ejemplo, comprar una nueva maquinaria o mantener la antigua).

Un análisis riguroso de este enfoque resulta complejo dados los factores alternativos que pueden integrarse bajo los conceptos de costos de los capitales e inversión.

Costos hundidos

Son costos históricos, derivados de decisiones pasadas, cuyos montos ya no representan beneficios adecuados para operaciones futuras, salvo que se tome una decisión para repotenciarlos.

Una de las características de estos costos, es que son irrevocables, y otras, que son irrelevantes para la toma de decisiones a corto plazo en la empresa.

Costos indirectos

Son aquellos costos que no se identifican directamente con productos, servicios, líneas o actividades, o que no resulta económicamente ventajosa su medición para asignarlos de forma individualizada. Normalmente se trata de grupos de costos que requieren ser medidos y aplicados a la producción a través de claves de reparto, en buena medida subjetivas.

Costos indirectos de materiales

Aquellos costos que, identificándose con todos los materiales adquiridos de una vez y no con un material, cumplen las condiciones siguientes:

1ª) Tienen lugar antes de la entrada de los materiales adquiridos en el almacén.

2ª) Son soportados por el adquirente. Entre estos costos indirectos de materiales adquiridos cabe mencionar: transportes, fletes, seguros, impuestos no recuperables directamente de la Hacienda Pública, etc.

Costos indirectos de transformación

Costos indirectos de producción no incluidos como materiales o mano de obra indirectos; por tanto, esta clasificación de costos incluirá una diversidad de costos que son difícilmente agrupables bajo otra categoría. Entre los conceptos recogidos bajo esta rúbrica pueden citarse los siguientes:

1) Mantenimiento de: a) Edificios. b) Maquinaria y herramientas. c) Muebles y enseres. d) Elementos de transporte.
2) Costos generales (de naturaleza fija): a) Amortización de edificios. b) Impuesto de la propiedad. c) Seguros. d) Arrendamientos.
3) Suministros: energía eléctrica, calefacción y luz.
4) Costos derivados de la existencia de departamentos de servicios especiales: a) Almacén. b) Sanitario. c) Comedores. d) Seguridad, etc.
5) Costos indirectos varios: a) Royalties. b) Impuestos especiales. c) Materiales defectuosos. d) Mercancías dañadas, etc.

Costos irreversibles

Costos semifijos que, una vez que aumentan (por tramos) no descienden, aún después de volverse a la situación anterior.

Costos mixtos

Costos que tienen componentes fijos y variables.

Costos no controlables

Costos sobre los que el responsable de un centro no puede ejercer ninguna influencia, al no estar autorizado para ello. En este caso, se trata de costos repercutidos a un departamento como consecuencia de la reasignación que se haga de ciertos conceptos de costos a los distintos departamentos de la empresa; por ejemplo, la asignación del costos de alquiler del edificio a los departamentos se puede realizar con criterios más o menos objetivos, pero de ningún modo su gestión depende del responsable del departamento.

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Ynfante T. Ramón E.. (2008, diciembre 4). Costos. Recuperado de https://www.gestiopolis.com/costos/
Ynfante T. Ramón E.. "Costos". gestiopolis. 4 diciembre 2008. Web. <https://www.gestiopolis.com/costos/>.
Ynfante T. Ramón E.. "Costos". gestiopolis. diciembre 4, 2008. Consultado el . https://www.gestiopolis.com/costos/.
Ynfante T. Ramón E.. Costos [en línea]. <https://www.gestiopolis.com/costos/> [Citado el ].
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