Tratar a las personas con respeto forma parte de como emprender un negocio
Los colaboradores no son números en un gráfico de negocio. Son personas de carne y hueso, y merecen ser tratadas como tales. La mayoría de la gente son buenas personas. No piden demasiado, tan sólo que les traten con respeto y la debida cortesía. Muchas personas en el mundo están hartas de que les traten como a niños pequeños. Lo he podido comprobar muchas veces a lo largo de mi vida.
Recordad, las personas desean que les traten como a ti te gustaría que te trataran. También tienen ideas y opiniones. Y quieren tener la impresión de que se les trata como adultos inteligentes y maduros, no como a escolares que necesitan vigilancia y cuidados constantes.
En un negocio de éxito no hay lugar para los prejuicios
Tratar a los colaboradores con respeto también significa ofrecerles a todos las mismas oportunidades para triunfar. No todo el mundo tiene el mismo rendimiento laboral, pero el líder debe ofrecer las mismas oportunidades para triunfar a todos los miembros de su equipo.
En nuestro negocio, el éxito de cada trabajador se basa en su rendimiento individual, independientemente del sexo, raza o nivel cultural. Por ejemplo, tenemos a muchas mujeres en puestos de responsabilidad que han construido su carrera profesional y que obtienen grandes ingresos gracias a su excelente productividad y a sus increíbles dotes de liderazgo. Se les juzga como a todos los demás, teniendo en cuenta su nivel de excelencia en lugar de fijarse en parámetros como hombre o mujer, blanco o negro, etc. Este debería ser en cualquier negocio el único parámetro vigente para las promociones y el reconocimiento.
De vez en cuando alguien de la compañía me ha propuesto reuniones especiales sólo para determinados grupos éticos para hombres o sólo para mujeres. Por ejemplo, me han pedido reuniones de vicepresidentes regionales para mujeres o para vicepresidente regionales de “grupos minoritarios”. Siempre se ha rechazado dichas sugerencias porque creo que crean un ambiente de segregación. En nuestro negocio los vicepresidentes regionales son simplemente vicepresidentes regionales, ya sea hombre o mujer, de grupos mayoritarios o de grupos minoritarios. Las cualificaciones necesarias son iguales para todos, independientemente de la raza o el sexo, y no tiene sentido para mí categorizar a la gente dentro de un determinado grupo social o ético. Tenemos que saber que para emprender un negocio hay que tener todo esto en cuenta.
No hay que olvidar que la principal preocupación como líder está en crear una empresa de calidad con los mejores colaboradores posibles, independientemente de sus características de pertenencia social, y eso es lo único importante.
Hay que pensar en las consecuencias de nuestras decisiones empresariales sobre nuestros colaboradores
Cada vez que tomamos una decisión, es obvio que hay que considerar el efecto que tendrás sobre la buena marcha del negocio. A menudo es lo único que se tiene en cuenta. Desde luego que los resultados económicos son importantes, pero no hay que olvidar el factor humano en el proceso de toma de decisiones. Además de pensar en el impacto sobre los beneficios y los ingresos personales, hay que pensar en cómo afectará una determinada decisión a nuestro equipo.
Por ejemplo, nuestro negocio se dedica a las ventas, y los comerciales trabajan a comisión. Las personas que acaban de incorporarse al negocio tal vez todavía obtengan pocos ingresos. Para nosotros tal vez sea más sencillo, desde un punto de vista administrativo, pagarles una vez al mes. Tendríamos menos papeleo y ahorraríamos tiempo.
Pero desde el punto de vista humano no sería una decisión acertada, porque los nuevos comerciales que tienen que adaptarse a un nuevo tipo de negocios y de ingresos necesitan la seguridad que les proporciona un cheque semanal. Es una forma de medir su progreso semana a semana, y les ayuda a comprobar inmediatamente el resultado de sus esfuerzos. Podemos estar seguros de que para el negocio no supone ninguna diferencia pero para el comercial de ventas sí, y eso es lo importante, más que ahorrar unos cuantos dólares. El resumen de cómo emprender un negocio es que para tener éxito en la vida es necesario trabajar con nuestros colaboradores.