El ciclo económico mendocino, a nivel tendencia, no escapa al nacional, no somos una isla, sin dudas. Sin embargo, a dicha tendencia nacional a veces la superamos, y a veces estamos por debajo.
El comienzo de la década (gobernaba Iglesias) fue pobre, en especial arrastrado por la “debacle De La Rúa”; Mendoza de esta forma cayó en recesión durante el período 1999-2002 (-2,5%, -2,7%, -7,5%, -6,6% respectivamente de caída de nuestro PBG); fueron 4 años realmente complicados, en especial para nuestras finanzas públicas, recordemos que hasta circuló una cuasimoneda (PETROM).
Adicionalmente durante 2002 tuvimos una tasa de inflación alta, principalmente a causa de la devaluación, lo que terminó de pintar un panorama francamente deplorable, con un desempleo que llegó cerca del 20% en 2002 (poco usual en Mendoza) y más de un 40% de personas por debajo de la línea de pobreza.
En síntesis, un panorama desolador, pero (a mi modesto entender) con poco para culpar al gobierno provincial, ya que básicamente era una cuestión de arrastre de los «dislates nacionales».
Pero posteriormente iba a aflorar la 1ra parte de la era K (2003-07), y en Mendoza la era Cobos, donde el ciclo económico revirtió su tendencia en forma abrupta (el PBG creció 16,3%, 15,9%, 10,1%, 10,8% y 8,3% respectivamente en Mendoza entre 2003 y 2007 inclusive), de esta forma superando a las ya famosas «tasas chinas» nacionales. Con este notable desempeño macro, en Mendoza se reactivó el consumo de no durables, durables de todo tipo, en especial automotores y también el sector viviendas, principalmente en el segmento ABC1 (el más top).
Hay que aclarar que Mendoza creció más que la Nación entre 2003-07, no tanto por políticas económicas descollantes (si bien fueron bastante aceptables) sino básicamente ayudado por las muy altas cotizaciones del petróleo, dentro de un contexto internacional enrarecido por la invasión de Bush hijo a Irak. Por lo tanto, y a contramano de 1999-2002, durante 2003-07, e inclusive 2008, en Mendoza se reactivó toda la actividad económica y bajaron, de forma muy marcada, tanto la pobreza como el desempleo (este último a casi 4%). En síntesis, podríamos decir que el período 2000-09 engloba una sola década, pero con dos subetapas muy diferentes.
A continuación, y para finalizar, me permito resaltar, a mi juicio, determinadas luces y sombras de la década:
- Me gustó la gestión Vaquié-Gallego en Hacienda en la época de Iglesias; se “bancaron un chubasco fenomenal” y sostuvieron el pago de sueldos cuando algunos agoreros pronosticaron el fracaso del PETROM, que sin dudas fue un éxito;
- Mendoza no puede salir de su dependencia de las exportaciones de vino, mosto, petróleo (si bien en declinación), ajo y otros pocos agroindustriales; el proceso de diversificación va a tardar años parece…, a pesar de las buenas intenciones de por ejemplo Montero y ahora Mercau;
- En materia vitivinícola cada vez estamos mejor, ya que lo que aún falla (el exceso de oferta de uva común) está en proceso de disminución, en especial gracias a programas financiados internacionalmente, es decir, el problema se está atacando, ya que hay una política de Estado que todas las gestiones parecen respetar, está el PEVI, la COVIAR, etc.;
- La hotelería de alta gama, de la mano de un tipo de cambio real K competitivo, llegó (digamos entre 2003-09) a cambiarle la cara a la Mendoza turística (en especial durante la época de Fidel y Mariana Juri); también hay que destacar el enoturismo, entre otras interesantes tendencias en este rubro;
- El tema granizo todavía no tiene una solución satisfactoria, sigo viendo sólo parches… casi siempre se termina en subsidios del Estado post-daños;
- Mendoza cada vez representa menos en el PBI nacional, décadas anteriores estábamos por encima del 4%, hoy cada vez más cerca del 3%;
- Nuestro mercado de capitales no termina nunca de despegar, pareciera que en la Bolsa local se contentan sólo con recaudar impuestos…
Esperemos la próxima década sea mejor que la que pasó, al menos con un ciclo económico más parejo y con soluciones para los temas micro aún pendientes, algunos de ellos aquí mencionados.