El gran desafió es liderarse a uno mismo y todo comienza en su mente y su actitud.
Si usted no maneja su mente, el medio ambiente lo hará por usted. Y tarde o temprano su mente (mal influenciada) hará lo que quiera de su vida. ¿Escucho hablar de tener pájaros en la cabeza?.
Sino tiene una clara visión de sus expectativas, sus gustos personales, y un fuerte compromiso a la visión. Así como un desempeño físico para impulsar la energía en la dirección que quiera. Si usted no maneja su mente, el medio ambiente le hará estragos, y una mente (mal influenciada) es una plaza llena de pájaros fuera de control.
Necesita práctica sin distracción. Fijar la mente, dominarla, llevarla para donde usted quiera , y no para donde ella quiere.
Uno de los aspectos más fascinantes de las personas con alto nivel de dominio personal es su aptitud para realizar tareas extraordinariamente complejas con gracia y facilidad.
Todos hemos dominado un vasto repertorio de tareas «adiestrando» el subconsciente. Una vez aprendidas, resultan tan automáticas, tan «subconscientes», que ni siquiera notamos que las estamos realizando.
Hay que aprender a manejar la mente inconsciente y lo hago con palabras y frases, me condiciono, condiciono a mi cuerpo. (El poder del lenguaje en mí).
Lidero la afectación “utilizo la voz alta” activo mi mente y mi cuerpo con pequeñas frases y un conjunto de ideas como si fuera un encantamiento, para condicionarme.
Manejo mi mente inconsciente, para encarrilarme, para darle la bravura, el amor, la emoción, el humor, el carácter, a toda esta cosa de activarme para progresar.
De no tener un dialogo satisfactorio, con un estándar ejemplar y elevado, (digamos un estándar moral) mi mente comprará las palabras y los discursos de otros, que vuelan en el medio ambiente. Luego me junto con gente que quiera tener los mismo estándares que yo, (si estoy en el medio soy mediocre) el grupo que me rodea fija o influye en los estándares que estoy buscando.
No discriminamos a las personas, pero si su grupo de influencia está por debajo de sus expectativas y estándares deseados, se convertirá en un problema para usted tardo o temprano. Sera presa de las circunstancias. Las circunstancias no mienten y hay malvados que juegan con las artimañas del error. No puede ni debe dejarse engañar por malvados. Ellos harán una ruina de usted.
Le digo a mi mente subconsciente a donde quiero estar. No le permito que delire con fantasías y me centro en la visión de afectar y ayudar a la mayor cantidad de gente posible.
Tres mecanismos
Concentrarse en el resultado deseado es una habilidad. Para la mayoría de nosotros, no resulta fácil al principio, y se requiere tiempo y paciencia para desarrollarla.
Hacer foco, es como mirar en un microscopio, primero en una imagen genérica, luego al enfocar, va apareciendo lo que buscamos ver.
Aprender a calibrar lo que deseamos de aquello que necesitamos es el primer paso. Deseo y necesidad deben estar en paralelo. Para alejarlo, de nuestros temores y del virus residente.
Un ejercicio inicial, útil para aprender a concentrarse con claridad en los resultados deseados consiste en tomar una meta o aspecto de nuestra visión.
Un erudito bíblico hace años, nos enseñó a sacar la foto de los que necesitamos y deseamos. Una vez enfocada la imagen haga “clic” con la creencia. Ejercite la creencia (fe) imagine que lo tiene, pida con certeza a Dios y vendrá a su vida.
Primero imaginemos que esta meta se ha alcanzado. Entonces nos preguntamos: “Si de veras tuviera esto, ¿qué me pasaría?” A menudo la gente descubre que la respuesta a esa pregunta revela deseos más profundos” detrás de la meta. El compromiso con la verdad también es importante para desarrollar comunicación con el subconsciente.
Un gran truco es engañarnos a nosotros mismos sobre la realidad, le impedirá al subconsciente tener información precisa acerca de dónde estamos respecto de nuestra visión.
El principio de la tensión creativa reconoce que el subconsciente opera con mayor eficacia cuando se concentra claramente en nuestra visión y no en nuestra realidad circunstancial
La fórmula de Dar + La Felicidad = sinergia personal y colectiva.
Esto producirá un medio ambiente agradecido. Y la gente agradecida es maravillosa.
Lic. Raúl Bialoglovich – Coach