Si solo soñar con grandes cosas fuera suficiente, seríamos felices. Pero la triste realidad es que la gente no transita esta vida para sacar a relucir su máximo potencial. Se dedican a trabajar para sobrevivir. Ganan lo suficiente para vivir una vida confortable, aunque al final, deben encontrar el sentido y finalidad de sus propias historias.
¿Qué es lo que les pasa? Las personas que tienen un empleo con ingresos estables y un estilo de vida, ¿no pueden encontrar un sentido y valor a su existencia? ¿Deben ser felices porque tiene suficiente dinero para cubrir sus necesidades? Ellos pueden comprar o realizar lo que quieran.
Adquirir la actitud de darte cuenta de que los logros de una vida llena de plenitud y felicidad no está relacionada con tener muchísimo dinero, vivir lleno de lujos o viajar a lugares carísimos…esto es solo una parte de ella.
La otra parte es lo que muchas personas se olvidan, se trata de realizar un propósito de vida y dedicar parte del día a concretarlo. Esto hace renacer esa pasión que estaba relegada y hace que la vida valga la pena vivirla. Si liberas tu corazón de la rutina del trabajo, y le das un futuro más brillante a tu ser, cada día será un nuevo comenzar. Por ejemplo, cuando te despiertas, dices: “este es un gran día para jugar”, y te vas a tu trabajo o empresa a ganar dinero y vivir una gran vida. Pero esta vez es diferente, porque tienes un propósito para hacerlo y eres feliz.
¿Cómo puedes saber cuál es tu propósito? Cada ser humano es único. La personalidad, los deseos y las metas son diferentes para cada uno. Nadie puede decirte cuál es tu máximo potencial. La palabra “Tu” implica que debes decidir lo que significa para ti esta posibilidad de engrandecer tu alma.
Todos tenemos ese potencial innato, está ahí esperando para ser descubierto y nutrido con tus mejores deseos. Ten en cuenta que la palabra que utilice fue “descubrir” y esto se refiere a que es algo nuevo y desconocido. Pero cuando sucede esto, tu potencial estaba ahí.
Para liberar tu potencial, tienes que tener alguna idea de que se trata. Necesitas tener un panorama completo de vida en tu mente. Esta visión te da un destino, pero no te muestra cómo llegar ahí. Eso está bien. Esto lo vamos a llamar la hoja de ruta. Tener esta visión, ya es un gran paso para que realices tu propósito en la vida. ¿Cómo puedes obtener esta visión? Te puedo sugerir algunos métodos que te resultarán muy útiles.
1. Tiempo para tus sueños personales. Tómate un tiempo libre para reflexionar. Escucha música relajante y que te permita liberar tu mente. Elige la postura que más te guste. Mientras te relajas, comienza a recordar tu pasado. Comienza con tu infancia, ¿Cuáles eran tus sueños? ¿Qué querías ser? ¿Recuerdas algo?
Ahora, progresa a través de tu vida y cómo se ha desarrollado hasta la actualidad. ¿Te diste cuenta de cómo han cambiado tus sueños? Mientras reflexionas, siente en tu corazón cuál de todos tus sueños te inspira más y te llena de asombro. Sería algo como por ejemplo: “esto es maravilloso o es impresionante este sueño”. Eso se llama tener potencial.
2. Mantén un registro. La memoria suele distorsionar los recuerdos con el paso del tiempo. Pero puedes ver tu vida de forma objetiva si mantienes este registro. Este es esencial para tomar conciencia de la gran imagen que tienes de tu vida, y lo puedes desarrollar todos los días. Inicia un diario personal. Escribe tus pensamientos antes de irte a dormir. Toma nota de lo que te sucedió ese día, lo que esperas para mañana y lo que deseas soñar esa noche. Crea el hábito de recoger tus pensamientos más íntimos en un papel, puedes ver tu progreso, si los cambios fueron importantes o te has quedado bloqueado dentro de tu mente.
Saca fotos junto a tus amigos, familia o en los lugares donde has visitado y te sentiste libre, feliz de cambiar tu rutina. Las imágenes te traerán lindos recuerdos y un registro preciso de tu vida. Hasta puedes realizar un álbum con esas imágenes.
3. Haz un análisis numerológico. Esto puede ser una fuente de conocimiento cuando tratas de saber cuál es tu propósito en la vida. Tú fecha de nacimiento, datos de tu nombre y de todo lo que recuerdas que es importante para ti.
4. Realiza un test de personalidad. Quizás esto te pueda ayudar a encontrar cuáles son tus verdaderos gustos y determinar el camino que deseas emprender en tu vida.
Si pones en práctica estos métodos, recuerda tener un libro de tu vida que siempre este actualizado. Esto te permitirá ver tus avances, las flaquezas y los logros que has alcanzado. Recopila en él toda la información que te sea posible para relacionarla con tu verdadero propósito. Escribe una lista de tus diez mejores logros.
Piensa en lo que más te gusta hacer para que lo pongas en práctica. Una vez al mes revisa tu lista para saber que parte del camino este recorriendo. Saber cuál es tu verdadero propósito no quiere decir que todo termino ahí, al contrario, tu camino recién está empezando, pero ya de otra forma, con más claridad y feliz de saber con certeza tus reales ambiciones. No importa si tu camino al principio es pequeño… ya tienes la experiencia y éste es el mejor maestro que uno puede tener en la vida. Tu experiencia te dirá cuál es tu propósito. ¿Sientes la pasión dentro de ti? Piensa en un trabajo que te gustaría realizar o en comenzar un proyecto por tu cuenta. Al poner en marcha tus ideas, te estás dando la oportunidad de experimentar una nueva vida.
Piensa que te gustaría para los últimos días de tu vida, mirarás hacia atrás y verás todo lo que has hecho. Tus logros y los momentos más felices que viviste. Te gustaría decir: “he tenido una gran vida. Estoy agradecido de todo lo que la vida me ha dado”. Y para experimentar esto, tienes que empezar ahora. Recuerda que todos envejecemos y necesitamos descubrir el verdadero propósito para vivir una vida plena y llena de felicidad.