Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras, Puerto Rico

Resumen

Las políticas de austeridad del gobierno de Puerto Rico han impactado los presupuestos y servicios de los hospitales públicos que prestan servicios a la población indigente. Esta investigación se realiza para evaluar si el Hospital de Psiquiatría de Río Piedras cumple con la Ley 67 del 7 de agosto de 1993 cual ayudará a la administración a visualizar sus fortalezas y debilidades. Puerto Rico tiene un alto nivel de casos mentales, y resulta irónico que el gobierno les reduzca los servicios al Hospital Psiquiátrico.

Abstract

The austerity policies of Goverment of Puerto Rico have influenced budgets and services of public hospitals that serve the indigent population. This evaluation is performed to assess whether the Psychiatric Hospital in Rio Piedras complies with Law 67 of August 7, 1993, attached to the Department of Health, which will help the administration to visualizar their strengths and weaknesses. Puerto Rico has a high level of mental cases, and it is ironic that the government reduces services to the Psychiatric Hospital.

Introducción

La Escuela Graduada de Administración Pública, Roberto Sánchez Vilella del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico, participa en proyectos de investigación de reforma gubernamental. Esta Institución responde y contribuye con la sociedad puertorriqueña en desarrollar programas innovadores y pertinentes, a la investigación, de servicio a la comunidad y de análisis y a la formulación de soluciones para los problemas socioeconómicos y políticos del país y el mejoramiento de la calidad de vida de nuestra sociedad.

Es por lo antes indicado, que la Escuela Graduada sirve como centro de práctica para los estudiantes graduados del curso Modelos de Análisis y Decisión en la Formulación de Política Pública. Estos estudiantes graduados participaron en una investigación evaluativa que examinó varias áreas medulares para el buen funcionamiento del Hospital de Psiquiatría de Río Piedras, Dr. Ramón Fernández Marina, adscrito a la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA).

La Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) fue creada mediante la Ley Núm. 67 del 7 de agosto de 1993, según enmendada, adscrita al Departamento de Salud. Esta Ley Orgánica deposita en la ASSMCA, la responsabilidad primaria de llevar a cabo los programas de prevención, atención, mitigación y solución de los problemas de salud mental y adicción o dependencia a sustancias con el fin de promover y conservar la salud biosicosocial de Puerto Rico.

Este Programa ofrece servicios de tratamiento a pacientes adultos con trastornos mentales, incluyendo abuso de sustancias y alcohol.

La misión de ASSMCA es promover, conservar y restaurar la salud mental óptima para el pueblo de Puerto Rico garantizando prestación de servicios de prevención, tratamiento y rehabilitación tanto en el área de salud mental como en el uso y abuso de sustancias psicoactivas y asegurando que estos sean accesibles, costo efectivos, de calidad, ofrecidos en un ambiente de respeto y confidencialidad para propiciar el bienestar de nuestra ciudadanía.

El Hospital de Psiquiatría de Río Piedras Dr. Ramón Fernández Marina cuenta con los siguientes programas: Salas Especializadas de Drogas («Drug Court»); Tratamiento con Metadona; Desintoxicación con Metadona; Residenciales para Varones Adultos con Dependencia a Sustancias de San Juan y Ponce; Unidad de Emergencia y Desintoxicación de Alcohol; y el Programa TASC (Treatment Alternatives to Street Crime)

Las recientes políticas de austeridad del gobierno de Puerto Rico han impactado severamente los presupuestos y servicios de los hospitales públicos que prestan servicios a la población indigente de la Isla.  En los últimos ocho años se le ha reducido un 35% de su presupuesto, un 48% de las personas atendidas y 38% de sus recursos humanos al Hospital Psiquiátrico de Río Piedras, Dr. Ramón Fernández Marina. Las reducciones más drásticas han sido efectuadas en los últimos cuatro años. Estos son datos del propio gobierno (Oficina de Gerencia y Presupuesto), ver Tablas 1.1 y 1.2.

En un país donde la criminalidad, el consumo de drogas y alcohol, y los casos de salud mental han aumentado dramáticamente en la última década, es irónico que el gobierno casi elimine a la mitad las funciones del Hospital Psiquiátrico de Río Piedras, Dr. Ramón Fernández Marina. Los gobiernos están para salvaguardar los intereses del pueblo y no para reducir opciones a la población pobre del país.

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Objetivo de la Investigación

Este trabajo de investigación se realiza con el propósito de evaluar si el área administrativa del Hospital de Psiquiatría de Río Piedras Dr. Ramón Fernández Marina ha sido efectivo en el logro de los objetivos propuestos por Ley Núm. 67 del 7 de agosto de 1993, según enmendada, adscrita al Departamento de Salud, y presentar de ser necesario, recomendaciones conducentes a modificar su proceso de implantación, manejo y evaluación.

La investigación evaluativa examinó varias áreas medulares para el buen funcionamiento del Hospital a la luz de los recursos fiscales del 2003 al 2012, al comparar las variables de presupuestos, recursos humanos y número de personas atendidas para determinar una posible correlación entre éstas para evaluar la situación y manejo fiscal presupuestario del Hospital.

Justificación de la Investigación

Los objetivos expuestos requieren de un proceso de evaluación de programas que permita conocer cuán efectivo ha sido el mismo. La falta de evaluación de programas limita a conocer si la misma se ha implementado correctamente. Los administradores que toman decisiones necesitan saber con qué grado de acierto está cumpliendo el programa los objetivos para los que ha sido establecido, si se debe ampliar, reducir, mejorar, cambiar o eliminar.  (Blanco Peck, 1990).

Al contar con información objetiva acerca de los resultados de un programa es posible para quienes tienen la responsabilidad, tomar decisiones en materia de asignación de fondos, reestructuración de recursos, redirección de su misión o reforma del mismo. Los datos producidos por la evaluación hablan por sí solo.

Hipótesis de Investigación

A continuación se presentan las hipótesis de investigación que sirven de guía para este estudio.

1. Ho: El presupuesto del hospital no está relacionado con la cantidad de personas atendidas

Hi: El presupuesto del hospital está relacionado con la cantidad de personas atendidas

X /  Y

Variable independiente / Variable dependiente

Presupuesto / Cantidad de personas atendidas

2. Ho: Los recursos humanos del hospital no están relacionados con la cantidad de personas atendidas

Hi: Los recursos humanos del hospital están relacionados con la cantidad de personas atendidas

X / Y

Variable independiente / Variable dependiente

Recursos Humanos / Cantidad de recursos humanos (personas atendidas)

Reglas de decisión para las hipótesis:

Introducción a la Metodología

Para llevar a cabo este trabajo de investigación utilizamos datos de presupuesto, personas atendidas y cantidad de empleados disponibles para brindar los servicios en el hospital. En el mismo se obtuvieron datos del número de empleados disponibles para atender a los pacientes en el hospital y del presupuesto del 2003 al 2012.  Se realizó una comparación y correlación de las variables independientes del presupuesto y los recursos humanos, y la variable dependiente de cantidad de personas atendidas. Todos los datos de esta investigación fueron recolectados gracias a la Oficina de Gerencia y Presupuesto del Estado Libre y Asociado de Puerto Rico.

Revisión de Literatura

Literatura de Puerto Rico

El desarrollo de los servicios de la salud mental de Puerto Rico, ha sido influenciado por el desarrollo cultural, social, económico, y político de la Isla, a partir de los años 1820 al 1828. La caridad y la conciencia moral fue lo que motivó y sostuvo la creación de los servicios de salud mental que comenzaron únicamente en la capital. En el 1844 se construyó el Asilo de Beneficencia que operó con algunas interrupciones hasta el 1927, (Rivera, 2003). La creación de este Asilo fue endosado por el gobierno con los esfuerzos de médicos, la iglesia y otros recursos humanos voluntarios que se hicieron a cargo del albergue. Los llamados locos, que hasta el momento se encontraban en conjunto con los presidiarios se lograron separar. Por primera vez en Puerto Rico, se les ubicó en un edificio especialmente adquirido para ellos, y se les clasificó como población por edad, sexo, y se les atendió según el respaldo económico del gobierno de entonces.

Hoy en día Puerto Rico cuenta con una vasta normativa de regulación y de diversas instancias jurisprudenciales que determinan los deberes inherentes de un hospital bajo la doctrina de responsabilidad directa con los pacientes de salud mental. El deber de un hospital en lo que se refiere a los médicos que componen su facultad, incluye: seleccionar y retener sólo médicos competentes, supervisar a los que practican medicina en la institución en lo que al cuidado al paciente respecta, determinar la competencia del médico y evaluar credenciales antes de renovar o conceder privilegios, lo que incluye el deber continuo de supervisión, el hospital puede ser responsable si sabe que el médico es incompetente, formular, adoptar y hacer cumplir reglas y políticas adecuadas para asegurar la calidad del servicio en el cuido de los pacientes, tales como la reglas (by-laws) bajo las cuales se gobiernan médicos y personal paramédico.

La responsabilidad pública que tienen estos hospitales por las instalaciones físicas, también han sido motivo de regulación, (Comité de Ética Asistencial, 2004), en términos generales, son las siguientes: razonablemente cuidar y mantener de manera segura y adecuada sus instalaciones y facilidades para el uso destinado, mantener al hospital libre de condiciones peligrosas o advertir a pacientes sobre las mismas. También se incluye la responsabilidad del hospital por accidentes ocurridos en el entorno del hospital, como por ejemplo, caídas, objetos que caen, pérdida de propiedad debidamente informada y asegurada. En términos de la seguridad del hospital psiquiátrico, tenemos que expresar que es muy parecida con la de las instituciones carcelarias del país aunque en menor escala. Tiene que existir vigilancia continua, tanto en el hospital como en sus alrededores y tiene que registrarse la presencia de los pacientes por el personal de turno, ese personal tiene la responsabilidad de asegurarse que las necesidades de los pacientes son atendidas y que dicha seguridad no atente contra los derechos constitucionales de la restricción a la libertad y su dignidad como ser humano.

Así también, la hospitalización psiquiátrica tiene la obligación ética y legal de utilizar todos los medios terapéuticos a su alcance, en beneficio del paciente, además de las medidas restrictivas mencionadas, pero con la obligación de pensar en estrategias según los casos, que reduzcan cuantitativa y cualitativamente el uso de dichas medidas.

Por la preocupación de atender los asuntos relacionados a la salud mental y adicción se crea la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) mediante la Ley Núm. 67 del 7 de agosto de 1993, adscrita al Departamento de Salud. En la actualidad la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción se compone 12 unidades organizacionales. La agencia cuenta con un presupuesto combinado de fondos estatales y federales de los cuales son distribuidos en 17 programas. Los fondos manejados por la agencia incluyen: resolución conjunta del presupuesto general, asignaciones especiales (otorgadas por la Legislatura para propósitos específicos), asignaciones que ingresan a la agencia mediante donativos privados y asignaciones otorgadas por el Gobierno Federal, ya sea mediante propuestas sometidas por la Agencia o legisladas directamente en aportaciones en bloque.

Para facilitar el manejo del Hospital Psiquiátrico de Río Piedras Dr. Ramón Fernández Marina, este está organizado en cuatro unidades principales: Servicios Generales, Dirección Médica, Departamento de Enfermería y la División Administrativa. El hospital para cumplir con su  visión, misión y objetivos, algunos de los servicios que brinda son: Sala de Emergencias 24 horas, un Centro de Evaluación y Observación, y el Tratamiento Agudo incluye servicios de dieta, farmacia, terapia recreativa y ocupacional, trabajo social,  consejeros, entre otros. En la siguiente página se presenta el organigrama de la institución.

El hospital ofrece servicios a toda la población de Puerto Rico, admitiendo pacientes con problemas de salud mental, mayores de 18 años, durante la fase aguda y sub-aguda. El Hospital tiene capacidad para 200 camas de hospitalización y una Unidad de Evaluación y Cernimiento, debidamente licenciadas. El Hospital cuenta con unidades de Cuidado Agudo y Sala de Enfermería para la atención de condiciones físicas y mentales, entre otros. Además, ofrece servicios de emergencias psiquiátricas 24 horas al día para lo cual tiene 26 camas adicionales disponibles. Cabe señalar que esta institución es el único hospital público civil en Puerto Rico (OGP, 2011).

A pesar de su importancia, el hospital se encuentra en una situación incompatible con la realidad puertorriqueña.  Esta realidad salió a relucir este año en varios reportajes realizados por el periódico El Nuevo Día. Entre los problemas que salen a luz pública se encuentra: escasez de recursos, problemas con el despacho de medicamentos a pacientes de salud mental, obstáculos por parte de los planes médicos, rechazo en las hospitalizaciones, pésimo servicio, entre otros (Véase Anejo D). Estadísticas presentadas por la Academia de Psiquiatría de Puerto Rico señalan que el 25 % de la población podría estar afectado por trastorno de ansiedad; un 6 % por bipolaridad, mientras que un 48 % de la población tendrá alguna condición psiquiátrica en algún momento de su vida. En una entrevista para el periódico El Nuevo Día, Juan Fumero, portavoz del colectivo Psiquiatras por Puerto Rico, indicó que:

“la incidencia de problemas de salud mental afecta a la mitad de la población puertorriqueña. La prevalencia de enfermedades de salud mental en Puerto Rico es preocupante. Estamos hablando de un 50 % de la población afectada por alguna condición. Es importante que el país entienda que hay una crisis de salud mental y que tenemos que prestar mayor atención y tomar acción” (Polanco, 2011).

A través de los años el hospital ha sufrido recortes presupuestarios por parte de las últimas administraciones.  La puesta en marcha de programas públicos responde a una necesidad derivada del compromiso que han de asumir los poderes públicos de satisfacer las demandas ciudadanas con el nivel de calidad y de eficacia que en estos momentos la sociedad exige (OECD, 2006). La relevancia de un servicio público se mide en términos de si satisface las necesidades de la comunidad, si no lo hace se considerará terminar con ese servicio y reasignarle esos recursos a otro programa. En la medida que los recursos con los que cuente (recurso humano, materiales, facilidades) sean limitados, la labor efectiva del programa queda a su vez limitada. Por lo tanto el éxito o fracaso de un programa va a depender en gran parte del presupuesto que se le asigne.

El Hospital de Psiquiatría de Río Piedras cuenta con un presupuesto combinado provenientes de la Resolución Conjunta del Presupuesto General, asignaciones especiales, ingresos propios y mejoras permanentes. El Anejo C demuestra cómo se ha reducido su presupuesto por los últimos 11 años. De igual manera, el hospital ha perdido capacidad de generar ingresos propios, éstos son los que provienen del cobro por servicios que proveen al público y al gobierno, y en dos de sus partidas no han recibo nada desde el 2007, por lo tanto han tenido que depender únicamente del presupuesto asignado por la Rama Legislativa. En la próxima ilustración se presenta la clientela atendida y el recurso humano en los años 2000 a 2011. Podemos observar claramente como ambas se han reducido dramáticamente. Queda claro que con un menor presupuesto, el hospital, sus programas, y la comunidad a la que sirven se van a ver directamente afectados.

Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras

Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras

La situación por la que atraviesa el hospital es incongruente con la demanda de servicios psiquiátricos en Puerto Rico. Siendo la salud mental del individuo uno de los aspectos críticos e importantes para el desarrollo social, económico e individual de una nación es una situación que no se puede seguir ignorando. Ante la crisis económica que vive el País, la evaluación se presenta como una herramienta útil para brindar información sobre el impacto real del programa a sus destinatarios. A continuación se discutirá sobre la importancia del avalúo institucional.

Importancia del Avalúo Institucional

En la disciplina académica de la Administración Pública conceptos tales como la eficiencia, efectividad y eficacia son integrales en todo tipo de organización gubernamental en un país. Cada concepto alude a la necesidad de invertir el dinero del erario público de la forma más sabia posible debido en gran medida por la realidad de que el gobierno siempre va a operar con recursos limitados o finitos. Comúnmente la Administración Pública es percibida por la ciudadanía a través de los servicios o bienes que reciben. De la misma forma ese producto obtenido se convierte en un criterio para opinar acerca de la ejecución del gobierno en la provisión de un servicio público a la ciudadanía. Tales expectativas hacen pertinente que se ofrezca un producto de calidad al menor coste posible. También es vital que toda la ciudadanía tenga acceso a los servicios o bienes que sean producidos por el gobierno. Toda labor del gobierno debe ir orientada a crear impacto en la sociedad, cubrir una pertinencia y necesidad, de lo contrario pierde relevancia la misma. Es preciso entonces que para conocer el progreso que se está realizando en un departamento, agencia o cualquier otro organismo del gobierno se emplee algún tipo de avalúo hacia esos fines.

El sector público en la provisión de servicios o de bienes tiene que maximizar los recursos disponibles del fisco estatal. De acuerdo a Hartley (2008), “Public service organizations do not choose their markets, but are obliged to provide services to anyone who meets the eligibility criteria” (p. 7).  Acompañada de esta declaración, se tiene que contemplar que hoy en día la tecnología ha tenido un papel importante en exponer los fracasos del servicio público que en ocasiones hubiesen pasado desapercibidos por el gobierno central en el pasado (Hartley, 2008).  Por tanto el avalúo institucional juega un papel clave en negociar no sólo las diversas demandas de la sociedad sobre el gobierno y su administración pública al continuamente evaluar su ejecución, sino que capitaliza la tecnología para identificar las fortalezas y debilidades de una institución en la sociedad.  Según Moore y Benington, el examen respecto a las ventajas y vulnerabilidades de la organización pública frente al ambiente exterior orienta la producción del valor público.

El avalúo institucional trae a colación este análisis al evaluarse la situación de estado en una entidad pública respecto a la sociedad como un todo.  Se puede apreciar en gran medida que el avalúo institucional tiene un impacto a pequeña escala, o sea dentro de una organización, y a gran escala, en qué contribuye la organización a la ciudadanía.  De tal modo que hay una conexión entre el avalúo y la gobernabilidad, reforzando así las instituciones en la sociedad para que sean más responsivas a las demandas de la sociedad.  Una organización pública anacrónica y deficiente no tiene sólo el efecto micro de afectar la entidad misma, sino que inclusive en el macro puede deteriorar la calidad de vida en la sociedad si provee servicios o bienes esenciales a la ciudadanía. A su vez la gobernanza tiene mucha relevancia con este tema ya que el avalúo institucional permite que la institución esté en una mejor posición de actuar con diversos actores incentivando la participación ciudadana frente a diversas circunstancias. Cosa que legitima su razón de ser y más aún promueve la permanencia de dicha institución en la sociedad.

La tecnología ha migrado de las industrias de producción y de alta tecnología hacia la medicina, haciendo posible que la calidad pueda ser definida, medida, reportada públicamente y comparada con otros proveedores de servicios, propiciando una mejora en los resultados de los servicios (IsHak, Burt, & Sederer, 2002).  Como resultado de esto, el campo de la salud mental y la psiquiatría ha sido redefinido con la entrada de la tecnología y la calidad del servicio.  La medición de los servicios provistos pueden ir orientados por ejemplo hacia la mejora de los síntomas, funcionamiento (que incluye trabajo, relaciones sociales, calidad de vida, autosuficiencia y actividades diarias), la percepción del paciente o su familia del servicio provisto (que incluye la experiencia humana, interpersonal de confianza, dignidad, y comunicación que es vital no sólo para recibir cuidado, sino para sentirse cuidado o atendido), entre otros (IsHak, Burt, & Sederer, 2002).  El avalúo, tomando lo anteriormente mencionado, puede ser llevado a cabo desde la perspectiva del paciente o del proveedor de servicios de salud mental (IsHak, Burt, & Sederer, 2002).

La evaluación en el campo de la psiquiatría ha transformado la disciplina en aras de proveer un mejor servicio a la sociedad y seguirá evolucionando a medida que se enriquezca de nuevos conocimientos. Instrumentos tales como estudios de medición de procesos o de resultados (outcomes); encuesta o cuestionario de satisfacción, vigilancia de errores y eventos adversos; utilizados en conjunto con la revisión del plan estratégico y/o los criterios de evaluación de las agencias acreditadoras constituyen ejemplos de medios que pueden permitir determinar las fortalezas y las limitaciones de una organización pública (IsHak, Burt, & Sederer, 2002; UPRA, 2004-2005).

El valor de practicar un avalúo institucional radica en que dicha experiencia se convierte en un proceso de retroalimentación (feedback) que va a promover el crecimiento y el aprendizaje de la organización.  De acuerdo a IsHak, Burt y Sederer (2002), “Measures of quality link what care was rendered to the results (outcomes) of that care, good and bad” (p. 17).  El recurso humano se enriquece con los nuevos conocimientos generados de este proceso de retroalimentación, resultando en un proceso de maduración que expande la longevidad de la entidad pública.

Los proveedores de servicios en el área de la salud mental y la psiquiatría tienen que rendir cuentas al gobierno, como de igual modo a empresas privadas involucradas en este sector, pero sobre todo deben rendir cuentas a los recipientes del cuidado médico (IsHak, Burt, & Sederer, 2002).  Es en esa luz que el avalúo institucional por tanto es una herramienta indispensable en la provisión de servicios públicos de psiquiatría al país.

Servicios de Salud Mental a Nivel Internacional

Una buena salud mental es crucial para que el individuo pueda ser productivo en la sociedad y ante el Estado.  Esto nos lleva a interesarnos por conocer cómo diferentes países del mundo atienden la problemática de la salud mental. Conocer las políticas públicas de otros países, conocer qué recursos económicos, humanos y de infraestructura poseen. Cómo implementan las políticas públicas y si son efectivas. Los ejemplos de otros países ayudarán a que Puerto Rico pueda analizar dónde se encuentra y hacia dónde quiere dirigir los servicios de los ciudadanos que padecen alguna enfermedad mental.

La Organización Mundial de la Salud estima que los trastornos mentales, neurológicos y por uso de sustancias alcohólicas representan el 14% de la carga mundial de morbilidad.  Las tres cuartas partes de esa carga corresponden a países de ingresos bajos y medios (WHO, 2010).  En el informe Atlas de la Salud Mental 2011, que realizó la Organización Mundial de la Salud, participaron 184 países que cubren el 95% de la población mundial.

Atlas 2011 expone, desde la perspectiva global, que el 59% de los países que participaron en el estudio han creado legislación para atender el área de la salud mental.  Pero existe una diferencia dramática entre países de bajos ingresos económicos versus los de alto ingreso económico en crear legislación, 38.5% y 77.1% respectivamente.  También, el 77% de los países tienen políticas dirigidas a la salud mental y el 71% ha elaborado planes para mejorar los servicios.  Las políticas públicas de los países están dirigidas a atender el problema de la salud mental a nivel terciario, lo que quiere decir es que tienen un enfoque de rehabilitación (la persona ya adquirió la enfermedad o padecimiento) debido a que el 67% de los recursos económicos se canaliza a los hospitales psiquiátricos. Por otra parte, los recursos fiscales utilizados para los servicios de salud mental es menos de dos dólares ($US) por persona.  Mientras que, en los países de bajos ingresos es menor de veinticinco centavos ($US) y en países de altos ingresos de $44.84 al año por persona. En cuanto a los recursos humanos que atiendan las necesidades de la población encontramos que por cada doscientas mil personas hay un psiquiatra y por cada cien mil personas 5.8 enfermeras.  Las facilidades que proveen servicios a las personas con padecimientos mentales son de 0.61% para pacientes ambulatorios, 0.05% de tratamiento diario, 0.04% de hospitales mentales y 0.01% de residenciales comunitarios. Esto indica que hay una infraestructura física y estructural insuficiente para atender a los pacientes con trastornos mentales desde el nivel primario hasta el terciario.  Se resalta de la información que a nivel mundial el gasto en medicamentos para desórdenes mentales y de la conducta es de $6.81 por persona al año.

Por mucho tiempo la salud mental ha sido ocultada y discriminada pero hoy día es necesario invertir en los servicios de salud mental. Hay alrededor de 450 millones de personas que sufren desórdenes mentales y de conducta (WHO, 2005). Por ende, hay que invertir en recursos financieros y humanos para desarrollar infraestructura adecuada y servicios de salud mental.

En América Latina y el Caribe se utiliza, aproximadamente, 1% del Presupuesto General de Salud del país para la salud mental y de esa cantidad el 90% es dirigido a los hospitales psiquiátricos.  Esto lleva a que la política pública enfoque todos sus recursos hacia los hospitales y no a las comunidades donde se pueda promover la prevención mediante grupos de apoyo, servicios psicológicos de calidad y accesibles a todos los estratos sociales, entre otras estrategias.  Además, entre el 60% y 65% que padecen de algún problema de salud mental no reciben ningún tipo de cuidado médico (Rodríguez, 2007).  Los desórdenes mentales representan el 22% de la carga total de las enfermedades en América Latina y el Caribe (PAHO/ WHO, 2009).

Tanto Nicaragua como Guatemala presentan un cuadro similar ante la problemática de la salud mental. Estos no tienen políticas ni legislación, pero sí tienen planes para la implementación de acciones dirigidas a la salud mental.  Además, del dinero que es utilizado para la salud en general sólo el 1% es para servicios de salud mental y de ese porciento el 91% se distribuye en el hospital psiquiátrico. Y los recursos humanos, los medicamentos, el sistema de información, la capacitación al personal y protocolos de servicios son insuficientes y pobres (PAHO/ WHO, 2006).

En Chile, que es considerado un país de ingresos medio-alto, en el año 1999 creó un Plan Nacional de Salud Mental y Psiquiatría.  Este se adecuó a las necesidades de la población en el que se señalaron objetivos y estrategias para que los recursos del Estado fueran dirigidos a mejorar la salud mental de los chilenos.  Han logrado fortalecer las áreas de Promoción, Prevención, Tratamiento y Rehabilitación, Organización de Servicios, Colaboración Institucional y Financiación.  En el presupuesto hubo un aumento en los recursos a 2.14% de los cuales el 33% va dirigido a hospitales invirtiendo más en prevención. Además, se ha mejorado la capacitación a los profesionales en los servicios pero aún es insuficiente (WHO, 2006).

En República Dominicana no existe una política nacional explícita de salud mental y la asignación de fondos es de 0.38% del cual el 50% es dirigido al hospital psiquiátrico.  Además, están carentes en la integración de los diferentes establecimientos como hospitales, centros ambulatorios, centros de cuidado diurno, que atienden los pacientes con padecimientos mentales (WHO, 2008).

En Europa se ha reconocido que la salud mental es un área de prioridad en años recientes.  Los desórdenes neuro-psiquiátricos constituyen la segunda causa de discapacidad y se estima que es el 19.5% de las enfermedades.  Ante estas estadísticas en el 2005 se crea la Declaración de Salud Mental para Europa y el Plan de Acción de Salud Mental para Europa buscando alcanzar las siguientes áreas: promover bienestar mental a los ciudadanos; demostrar centralidad de la salud mental; abordar los estigmas y la discriminación; prevenir problemas de salud mental y suicidio; asegurar el acceso al cuidado primario; ofrecer servicios efectivos en la comunidad; establecer alianzas entre sectores; crear profesionales competentes y suficientes; establecer información de salud mental; proveer fondos adecuados y equitativos y evaluar la efectividad y generar nueva evidencia.  Dentro de los logros alcanzados con estas estrategias sobresalta el progreso en política y legislación en la salud mental; implementar servicios de base comunitaria; crecimiento en el cuidado primario; aumento de personal diverso y competente y el establecer programas de inclusión social, entre otras cosas (WHO, 2008).

Por otra parte, la crisis económica tiene una repercusión en la salud mental de las personas. La Unión Europea plasma el impacto de la crisis económica en la salud mental señalando al desempleo, la deprivación, la pobreza y la desigualdad como factores que impactan adversamente la salud social y emocional de la población. Esto aumenta el riesgo de padecimientos mentales como la depresión y el uso de alcohol hasta llegar al suicidio (WHO, 2011).

Para mitigar los problemas de salud mental es necesario combinar estrategias públicas con tratamientos efectivos y programas de prevención que reduzcan el estigma que tienen los desórdenes mentales, aumentar el capital social, ayudar a reducir la pobreza y promover el desarrollo de los países (WHO, 2003).

Metodología

Tipo de diseño: Esta investigación fue una de tipo correlacional descriptiva centrada en el presupuesto del Hospital Psiquiátrico del gobierno de Puerto Rico.

Selección de la información: Para este estudio seleccionamos información presupuestaria del hospital durante los años 2004 al 2012.  Además, se utilizaron datos de cantidad de personas atendidas en el hospital para los años 2000 al 2011, y los recursos humanos con que cuenta el hospital para brindar los servicios.

Análisis de la recolección de datos: Luego de recopilar los datos se procedió a realizar correlaciones de Pearson y gráficas con dicha información. Esto para comprobar si las hipótesis establecidas son nulas o ciertas. En breve presentamos los resultados estadísticos de la investigación y veremos el análisis de estos datos ya procesados para interpretarlos.

Resultados y Conclusiones

El hospital Psiquiátrico es el único suplidor de servicios médicos psiquiátricos para la población médico indigente, hacia el cual las últimas administraciones han demostrado un claro menosprecio por su mantenimiento, cuidado y mejoramiento. La designación de recursos es casi nula y las asignaciones presupuestarias y de recursos humanos, han ido en descenso. La filosofía de la administración presente es cónsona con la falta de asignación de recursos, ya que el pensamiento de corte republicano se fundamenta en la menor designación de recursos a la población médico indigente. De todos es conocido los altos niveles de enfermedades mentales que aquejan nuestra sociedad y los altos costos de la atención médica, específicamente de este tipo de enfermedad. Es por eso que la falta de atención y de recursos repercute directamente en el estado anímico de la sociedad, donde los niveles de violencia se manifiestan directamente en todos los componentes sociales.

Ante esta situación, tenemos dos correlaciones sobre el escenario actual del Hospital Psiquiátrico de Río Piedras. En la primera observamos la comparación entre la variable de Recursos Humanos del Hospital, con la de Personas Atendidas en el mismo. La Tabla 1.1 nos muestra esas distribuciones de frecuencia de las variables mencionadas. La correlación entre ambas variables indica un coeficiente de correlación Pearson de .7823, junto a un nivel de significancia de .0026, lo que denota una correlación positiva, donde mientras aumenta o disminuye el nivel de una de las variables, ocurre lo mismo con la otra. En este caso, mientras bajan los recursos humanos del hospital, también lo hacen las personas atendidas en el mismo.

Tabla 1.1: Recursos Humanos del Hospital y Personas Atendidas (2001-2011)

Recursos Humanos del Hospital y Personas Atendidas (2001-2011)

Recursos Humanos del Hospital y Personas Atendidas (2001-2011)

Oficina de Presupuesto y Gerencia

Oficina de Presupuesto y Gerencia

Oficina de Presupuesto y Gerencia

Por otro lado, está la correlación entre las variables Nóminas y Costos relacionados, con la de Personas Atendidas en el Hospital. Ver Tabla 1.2 donde se presenta los datos

Esta correlación muestra un resultado similar al que nos presentó la correlación anterior. En esta obtuvimos un valor del coeficiente de correlación Pearson de .7332, junto a un nivel de significancia de .0246. Aquí, observamos una correlación fuerte positiva, en la cual mientras el valor de la variable Personas Atendidas (y) disminuye, la otra, la variable de Presupuesto (x) disminuye y vice versa. De esta manera, se presenta una relación estrecha entre ambas, debido a que sus valores van fluctuando junto al cambio del otro.

Tabla 1.2: Nóminas y Costos Relacionados del 2004-2012 y Personas Atendidas

Nóminas y Costos Relacionados del 2004-2012 y Personas Atendidas

Nóminas y Costos Relacionados del 2004-2012 y Personas Atendidas

Ante esto, definitivamente, la falta de atención a la población que se atiende en esta institución, ha convertido en una bomba de tiempo las consecuencias nefastas para toda la sociedad. El descuido, la indiferencia, la falta de estudios y de estadísticas y de recursos, ha dejado a los más necesitados de atención médica en completo abandono.  De acuerdo al estudio “Análisis de la Salud en Puerto Rico, Salud Mental”, cerca de un 60% de la población de salud mental en Puerto Rico, no recibe atención médica. De mantenerse este patrón de falta de atención por las administraciones, es de esperarse que el hospital cierre definitivamente, dejando en peor situación a la población más necesitada de estos servicios, dando espacio a que estos servicios puedan ser suplidos por proveedores privados, liberándose de esta forma el gobierno de esta responsabilidad primaria. Proceso similar a éste, se observó en la venta de los Centros de Diagnósticos y hospitales regionales, que culminó con la privatización y con la pérdida del control por parte del gobierno y yendo estos a manos de las aseguradoras privadas.

Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras

Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras

El estrangulamiento económico del que está siendo objeto el hospital, al no asignarle suficientes recursos económicos y humanos, tendrá como consecuencia convertir esta institución en una en proceso de liquidación o “Phase Out”. Esto, debido al estado en que se encuentra el hospital actualmente, no demuestra una suficiente asignación de fondos que le provean las herramientas necesarias para superar la situación en el que está hoy día, y que lamentablemente ha sido un patrón  que puede desembocar en un cierre definitivo, y eventualmente en una venta a manos privadas. Hay que destacar que las instalaciones del hospital psiquiátrico al que hacemos referencia, se encuentran en una zona altamente anhelada por cualquier inversionista interesado en estos fines.

Es de suma importancia buscar alternativas que subsanen los recortes presupuestarios que han sufrido instituciones como la descrita aquí. Véase, que nuestra sociedad ha tenido un aumento significativo en problemas sociales tales como, el alcoholismo, la drogadicción, así como en los trastornos mentales, llevando a un alza en la incidencia criminal. Esto acarrea una mayor necesidad de atención médico hospitalaria con la especialidad en estos asuntos.

Entendemos, que la administración actual debería replantear su política gubernamental, así como las prioridades que persigue, atendiendo situaciones que inevitablemente afectan nuestra estructura social. Es por ello, que resulta indispensable que se continúen propiciando políticas públicas en esfuerzo de atender las verdaderas necesidades del pueblo, como lo es atender la precaria situación en la cual se encuentra el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras.

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Nota al pie:

Con la participación de los siguientes estudiantes de la Escuela Graduada de Administración Pública: Nashua Romero Cardona, Carmen Ocasio, Yahil Quintero, Jason Vélez, Giovanni Mulinelli, Julitza Cardona, Roselyn Colón, Desiree Ortiz, Dinorah Díaz, Andrea Torres Camacho, Brenda Echevarría Marrero, Humberto Berrios Ortiz, Iván Concepción Méndez, José Antonio García García, Nivia Beatriz Díaz Pacheco y Wilda Hernández Crespo.

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Blanco Peck Richard. (2013, junio 11). Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras, Puerto Rico. Recuperado de https://www.gestiopolis.com/administracion-de-los-presupuestos-de-la-salud-en-el-hospital-psiquiatrico-de-rio-piedras-puerto-rico/
Blanco Peck Richard. "Administración de los presupuestos de la salud en el Hospital Psiquiátrico de Río Piedras, Puerto Rico". gestiopolis. 11 junio 2013. Web. <https://www.gestiopolis.com/administracion-de-los-presupuestos-de-la-salud-en-el-hospital-psiquiatrico-de-rio-piedras-puerto-rico/>.
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