Cooperación internacional para el desarrollo en Majibacoa Cuba

Resumen

El trabajo se realizó con el objetivo de elaborar una estrategia para la cooperación internacional de este municipio de la provincia Las Tunas, Cuba, encaminada a elevar la eficiencia y eficacia de dicha fuente de financiamiento al desarrollo. Se realiza en un municipio con bajo desarrollo industrial y base económica eminentemente agropecuaria, con serios problemas ambientales generados por la acción antrópica y fenómenos climáticos. Se parte de un análisis teórico crítico de las concepciones actuales del desarrollo y su implicación en el desarrollo endógeno local, nacional y regional. El estudio realizado conlleva a la elaboración de un “Procedimiento metodológico para la elaboración de una estrategia de cooperación internacional para el desarrollo a escala municipal”, el que es validado y sirve de base a la elaboración de la estrategia propuesta. Es replicable y no existen antecedentes de un procedimiento similar en Cuba. La estrategia, fruto de un diagnóstico municipal participativo, considera el potencial de desarrollo municipal como base de las políticas de gobierno a nivel local y apunta a la sostenibilidad, la endogeneidad, lo local y humano como elementos imprescindibles para lograr eficiencia y eficacia en la gestión de Cooperación Internacional para el desarrollo territorial. Presupone trabajar por la disminución y/o eliminación de la vulnerabilidad económica y medioambiental. No existen antecedentes de una Estrategia similar en Cuba por lo que se convierte el municipio en el primero en poseerla en el país.

“Felicito a todos los que luchan, a los que no desisten jamás ante las dificultades, a los que creen en las capacidades humanas para crear, sembrar, cultivar valores e ideas, a los que apuestan para la humanidad a todos los que comparten que:

Un mundo mejor es posible.”
Fidel Castro

Introducción

La histórica Declaración del Milenio definió los Objetivos del Milenio y estableció que deberán ser alcanzados mediante una clara adhesión de todos los países a la democracia, los derechos humanos y el buen gobierno, unidos a un proceso de globalización más incluyente, que proporcione a los países en desarrollo el apoyo que necesitan para poder competir en condiciones de igualdad.[i] Los gobiernos locales enfrentan la escasa disponibilidad de recursos destinados al desarrollo unida a falta de voluntad política de los gobiernos de los países industrializados de contribuir al financiamiento al desarrollo de los países del Sur. La Cumbre de Beijing fue otra tribuna de reclamo mundial de más apoyo al desarrollo del Sur.

Existe, aparentemente, consenso internacional sobre la necesidad de incrementar los flujos de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD)[ii].La Cooperación Internacional para el Desarrollo (CID) es de vital importancia en la consecución de estos objetivos. Ésta se desarrolla en un contexto donde la competencia de que son objeto los escasos recursos disponibles exige de una gestión eficiente de las autoridades locales, así como de los diferentes actores y beneficiarios del desarrollo local.[iii]

Los municipios de la provincia de Las Tunas han experimentado un incremento de la CID en los últimos cinco años. Sin embargo, en la práctica enfrenta el problema de que la CID impacta a un número limitado de beneficiarios y su ejecución no es suficientemente eficiente y eficaz, a pesar de las bondades que posee como alternativa para el desarrollo a escala local. Uno de los elementos que pudiera estar incidiendo en esta situación es el conocimiento insuficiente de los actores acerca de las posibilidades y requerimientos que plantea esta forma de financiamiento para el desarrollo en un municipio. De aquí que el problema científico a resolver por la investigación fue ¿cómo contribuir a que los actores sociales tengan una mayor participación en la CID en el desarrollo local?

Fue objetivo general de la investigación elaborar un procedimiento que permita diseñar una estrategia para fomentar la cooperación internacional como factor del desarrollo local del municipio Majibacoa, de la provincia Las Tunas, en el periodo 2006-2008.

Como objetivos específicos se plantearon:

Responde esta encuesta sobre consumo de redes sociales. Nos ayudará a brindarte mejor información.

¿Usas sitios de redes sociales para encontrar información académica o laboral?*

¿Usas sitios de redes sociales para encontrar información académica o laboral?*

¿Qué sitios de redes sociales utilizas para investigación académica o laboral*

¿Qué sitios de redes sociales utilizas para investigación académica o laboral*

Puedes seleccionar las opciones que quieras.

Que tipo de dispositivo usas al utilizar redes sociales*

Que tipo de dispositivo usas al utilizar redes sociales*

¿Cuántas cuentas de redes sociales tienes?*

¿Cuántas cuentas de redes sociales tienes?*

¿Cuántas horas a la semana le dedicas a las redes sociales?*

¿Cuántas horas a la semana le dedicas a las redes sociales?*

1. Caracterización de los procesos del Desarrollo Local del municipio desde el punto de vista económico y social.
2. Estudiar el comportamiento de la CID en el Desarrollo Local del municipio.
3. Estudiar los factores internos y externos en relación con la cooperación internacional dentro del contexto local.
4. Elaborar la Estrategia de la CID en las condiciones actuales del municipio, para el periodo 2006 – 2008.

El procedimiento propuesto parte de la realización de un diagnóstico del papel de la CID en el municipio y los principales problemas que ella enfrenta, atendiendo a las particularidades del desarrollo local, así como la determinación del potencial de desarrollo asociado a esta modalidad de financiamiento y la elaboración de una estrategia para el perfeccionamiento del trabajo en función de hacerla más eficiente[iv], eficaz y efectiva es una novedad ya que no existe un estudio al respecto, ni actual ni precedente. La Estrategia propuesta ubica a Majibacoa como el único municipio cubano con una estrategia de este tipo y su replicabilidad al resto de la provincia ubica a la misma en igual condición.

El aporte práctico que se logra con la investigación es la Estrategia para la CID en el Municipio Majibacoa.

Metodología empleada

En la investigación se utiliza un enfoque dialéctico materialista, apoyándose en técnicas generales como el análisis y la síntesis, el análisis histórico-lógico e histórico concreto, estos análisis se complementan con el enfoque sistémico del análisis con la visión del municipio como un todo integrado que exige de acciones integrales e integradas y no parciales y sectorizadas. Se incluye el uso de técnicas cualitativos como la entrevista a funcionarios y directivos vinculados a la CID a nivel local, a informantes claves y actores-interesados-beneficiarios para complementar las informaciones logradas a través de la observación de la zona objeto de estudio, revisión de diferentes documentos y fuentes bibliográficas sobre el tema. El uso de técnicas cuantitativas permitió trabajar criterios y datos obtenidos de monografías especializadas, anuarios estadísticos locales e internacionales, revistas y bases de datos especializadas en soporte plano o digital, informes, publicaciones periódicas, etc. para corroborar cifras, ideas y planteamientos obtenidos por otros métodos.

Desarrollo

La cooperación internacional para el desarrollo local en los municipios.

La conceptualización del Desarrollo.

El pensamiento sobre el desarrollo ha progresado desde un enfoque economicista, que lo reducía al mero crecimiento económico hasta una concepción que entiende el mismo como un proceso(Munster, 2002)”[v] Esta idea ha llevado a priorizar el término de «riqueza» como factor determinante del bienestar, hiperbolizando el aspecto material del proceso, donde “la economía tiene que ser como un pastel, que si crece se puede repartir más”. Los años de aplicación del neoliberalismo vividos en América Latina demostraron lo contrario.

Hablar de desarrollo a escala global es imposible sin tener en cuenta los territorios.

Marcos Marchioni (1994)[vi] ve el desarrollo como la utilización de recursos por el hombre. Sin embargo, es erróneo verlo al margen del cambio en el propio hombre, que como el mismo plantea, es el encargado de lograr el cambio. Hay que fortalecer el rol activo del individuo como actor-gestor y consumidor del desarrollo, que en el caso de los proyectos financiados por ayuda externa es vital si se quiere tener éxito y lograr su sostenibilidad en el tiempo.

Se debe ver el desarrollo desde su dimensión cultural y de participación comunitaria.. El desarrollo es un proceso integrador e integral, complejo y multiforme que debe basarse, ante todo, en el pleno dominio de las potencialidades propias, sin obviar los aportes externos que puedan producirse para generar el bienestar general de todos y cada uno de los miembros de la comunidad local.

Se puede crecer sin desarrollarse, pues en los países de menor desarrollo donde priman la concentración de la riqueza y la exclusión social, aumentar el producto interno bruto (PIB) es un componente necesario del «desarrollo», pero no suficiente, (Rodríguez, C. R, (1987)[vii] ”(Heckman, 2004) [viii]).La cultura desempeña un papel fundamental Otros como Mc Laughlin (2002)[ix] reducen el desarrollo al crecimiento económico y opacan la diversidad presente en la vida de las sociedades humanas.

El desarrollo es más que una meta en el quehacer humano, “es un medio de elevar el bienestar y facilitar el logro de objetivos del desarrollo personal y social” (González) 2000)[x] y(PNUD, 1990).[xi] El CNUMA, (1992)[xii] añade la dimensión medioambiental del desarrollo como garantía del paradigma de desarrollo sostenible, que unida a la sociocultural hacen más perdurable y seguro el proceso e incorpora la necesidad de la cooperación entre países como apoyo a los objetivos del desarrollo sostenible. Gago (1993)[xiii], plantea que todo sistema de política tendiente a provocar el desarrollo, tiene que tener en cuenta las realidades socio-regionales donde se aplica, ellas condicionan en gran medida las decisiones a tomar, así como la estrategia y la táctica a seguir en cada momento y lugar, si tenemos en cuenta que las regiones, tanto en su aspecto natural como en lo social y económico, son un sistema donde todas y cada una de sus partes son importantes.

El desarrollo local exige que la gestión recaiga sobre el conjunto de la sociedad local vista como sistema y requiere diagnosticar las interacciones que se producen al interior del territorio, los factores claves, para alcanzar soluciones propias y apropiadas a los problemas de la localidad, lo que conduce a una mayor pertinencia y eficacia de las soluciones (van Hemelryck, 2002)[xiv] y Montejo (2005)[xv] y, ”situar al ser humano como el principal objetivo del desarrollo.” (Castro, 2004)[xvi], manifestándose la necesidad cada vez más sentida de conceptualizar el problema del Desarrollo Humano, definir hacia dónde se va y cuáles serán las consecuencias de lo que se hace.

La Comisión Sur (1990)[xvii] considera al desarrollo en su dimensión humana, con justicia social, con fines económicamente alcanzables, con autosuficiencia a partir del uso maximizado de las potencialidades de cada país y/o territorio. La ONU propone como algo nuevo el enfoque unificado del desarrollo. Se considera al desarrollo como proceso de transformación enfocado al ser humano PNUD (1990), apunta: “Su objetivo central debe ser el Ser Humano.”[xviii] Sin embargo, “en la propuesta aún prevalece el enfoque cuantitativo y la identificación del desarrollo con el crecimiento económico (Rojas, 2004)”.[xix]

El PNUD no hace alusión a la calidad de los conocimientos, en especial aquellos que conforman la cultura del ser humano, capaces de crear un sistema integral de valores que lo preparen para una vida más libre y creadora, que hagan al hombre más humano, capaz de enfrentar los retos del desarrollo científico y tecnológico actual. De la misma manera, la condición de “decencia” es una calidad subjetiva cuya interpretación puede variar en diferentes países atendiendo a las costumbres, creencias religiosas, tradiciones y otros factores socioculturales de los pueblos. A ello debe añadirse la necesidad de que el proceso parta del aprovechamiento máximo del potencial de desarrollo existente en cada territorio y de las oportunidades que ofrezca el entorno. (PNUD, 2005). ”[xx]

El desarrollo local – apunta Vázquez Barquero (2000) – puede definirse “un proceso de crecimiento y cambio estructural que se produce como consecuencia de la transferencia de los recursos de las actividades tradicionales a las modernas, de la utilización de economías externas y de la introducción de innovaciones, y que genera el aumento del bienestar de la población de una ciudad, una comarca o una región. Cuando la comunidad local es capaz de utilizar el potencial de desarrollo y de liderar el proceso de cambio estructural, la forma de desarrollo se puede convenir en denominar desarrollo local endógeno o simplemente desarrollo endógeno.”[xxi] En el caso actual se asume como lo local al municipio.

Los años ochenta del pasado siglo revelan un debate mundial sobre el vínculo existente entre el ambiente y el desarrollo, unión conceptual que da origen al término desarrollo sostenible y que reitera la dependencia humana hacia las condiciones medioambientales. (Viñas-Román (1997)[xxii], Moreno (1999) [xxiii] ). La incorporación de consideraciones económicas y ecológicas a la planificación del desarrollo por la Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo (CNUMAD, 1987)[xxiv] requiere toda una revolución en la toma de decisiones económicas y políticas. Es posible lograr la sostenibilidad del desarrollo a escala global, solo si se cambia el patrón actual de distribución de la riqueza, donde grandes mayorías son excluidas de los beneficios del desarrollo; en caso contrario, solo se estaría hablando de algo que puede ser idílico. Sociedades pequeñas, de escaso desarrollo, han mostrado elevados índices de desarrollo y justicia social con la implantación de patrones de distribución más equitativos.

La “sostenibilidad” de las intervenciones de cooperación, o capacidad para que los cambios, infraestructuras y servicios que generan se mantengan en el tiempo es muy habitual en el campo del desarrollo y la cooperación. La sostenibilidad de un proyecto de cooperación para el desarrollo constituye un criterio esencial para evaluar su calidad. Sólo aquellos proyectos que introduzcan cambios equitativos y aborden de forma duradera las causas de la vulnerabilidad estructural contribuirán a generar sistemas sostenibles y un desarrollo humano también sostenible. Se hace necesaria la cooperación de los beneficiarios para lograrla.

Las políticas de desarrollo sustentable a nivel local refuerzan las posibilidades de lograr un aprovechamiento óptimo de los recursos necesarios para el desarrollo endógeno y debe ser contemplada en la priorización que se haga en las acciones de cooperación internacional.

El desarrollo local debe propiciarse sobre la base de sus propios recursos, sin negar la posibilidad de que puedan dirigirse algunos recursos imprescindibles para el desarrollo en determinadas localidades del territorio[xxv]que estén un tanto más deprimidas.

Buarque (1999)[xxvi], sostiene que: “el desarrollo local es un proceso endógeno registrado en pequeñas unidades territoriales y asentamientos humanos, capaz de promover el dinamismo económico y la mejoría en la calidad de vida de la población. A pesar de constituir un movimiento de fuerte contenido interno, el desarrollo local está inserto en una realidad más amplia y compleja, con la cual interactúa y de la cual recibe influencias y presiones positivas y negativas. El desarrollo municipal es, por lo tanto, un caso particular de desarrollo local con una amplitud espacial delimitada por el corte administrativo del municipio”. Garofoli (1995)[xxvii], resalta lo político del desarrollo endógeno al relacionarse con la capacidad local de diseñar y ejecutar políticas de desarrollo y la necesidad la apropiación y reinversión local de parte del excedente a fin de diversificar la economía. Boisier (2005)[xxviii] conduce a una posición concluyente al señalar que “…el enfoque del desarrollo local… comparte elementos de exogeneidad propios del crecimiento local con otros de endogeneidad propios del desarrollo.”

El desarrollo local se nutre de diferentes fuentes, tanto endógenas como exógenas y es afectado por diferentes factores que pueden acelerarlo o entorpecerlo en dependencia del tratamiento que se le de por las actores y los beneficiarios.

El punto de partida del proceso de desarrollo territorial para un espacio dado, lo constituye el conjunto de recursos, naturales, históricos, culturales, humanos, tecnológicos, económicos, institucionales y materiales que forman su potencial de desarrollo (Vázquez – Barquero 1999 y Mattos 1999).[xxix] Este punto de partida, desde el punto de vista conceptual, constituye la capacidad que se tiene de generar una determinada cantidad de riqueza (material, humana, cultural o espiritual), que sea dedicada a garantizar la elevación del bienestar actual y al progreso, que va a dar respuesta futura al crecimiento de la población, de las necesidades y retroalimentar el propio proceso de cambio de una forma continuada y sostenible. Esto complementa lo expuesto acerca de la necesidad de tener en cuenta los factores socioculturales vinculados al territorio, y donde los procesos innovadores juegan un papel fundamental en la concepción de las políticas y modelos de desarrollo.

Otros autores como Coffey y Polèse (1948), Biehl (1986)[xxx], al analizar empíricamente el problema tratan de cuantificar el mencionado potencial de desarrollo regional, como paso previo a la toma de medidas de política regional, en lo que coincidimos en parte, pues en las condiciones de economía planificada esto no siempre es posible, pues en ocasiones prevalecen intereses de desarrollo de nivel meso y macroregionales.

Debe incluirse el papel de factores específicos de cada territorio como son cultura, tradiciones, costumbres, paisajística, calidad de los suelos y aguas, comunicaciones, infraestructura creada, industrias, etc.

La cooperación internacional para el desarrollo constituye una fuente de tipo endógena que si se utiliza correctamente puede lograr lo anteriormente planteado.

Gestión del desarrollo con apoyo de la Cooperación Internacional

Los gobiernos locales enfrentan la escasa disponibilidad de recursos destinados al desarrollo unida a falta de voluntad política de los gobiernos de los países industrializados de contribuir al financiamiento al desarrollo de los países del Sur. La Cumbre de Beijing fue otra tribuna de reclamo mundial de más apoyo al desarrollo del Sur. Existe, aparentemente, consenso internacional sobre la necesidad de incrementar los flujos de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD)[xxxi].La Cooperación Internacional para el Desarrollo (CID) es de vital importancia en la consecución de estos objetivos. Ésta se desarrolla en un contexto donde la competencia de que son objeto los escasos recursos disponibles exige de una gestión eficiente de las autoridades locales, así como de los diferentes actores y beneficiarios del desarrollo local.[xxxii]

La CID persigue el desarrollo local como proceso integrado, multiforme y multidimensional, con una amplia participación social, encaminado al ser humano como principal actor y consumidor de los resultados que se generan. Tal enfoque exige de la amplia participación de los actores-interesados y beneficiarios en el proceso de la planificación del desarrollo territorial bajo estas condiciones de financiamiento.[xxxiii] Lograr tales objetivos se hace difícil cuando es poca la experiencia de las actores-interesados y beneficiarios en el trabajo con la cooperación internacional.

La crisis enfrentada por Cuba durante los años noventa del siglo pasado frenó el proceso de transformaciones económicas y sociales emprendido a partir del triunfo revolucionario de 1959. El derrumbe del bloque socialista de Europa y la Ex URSS dejaron al país sin sus mercados tradicionales y sus fuentes externas de financiamiento tradicional, pues el bloqueo económico a que el país es sometido por Estados Unidos, lo ha privado del acceso a las fuentes y mercados mundialmente conocidos. Ante todo esto los gobiernos locales han sufrido una contracción notable de sus fondos de financiamiento al desarrollo.

La Cooperación Internacional debe ser entendida como aquella modalidad de relaciones entre países que persiguen un beneficio mutuo. Ella “se origina en el manifiesto interés de apoyo mutuo entre las naciones para alcanzar un desarrollo pleno de los pueblos y preservar el orden mundial. (Tobar Manzano, L. 2005).”[xxxiv] La Cooperación al Desarrollo es una parte de la Cooperación Internacional y no debe confundirse con la ayuda humanitaria.

La Cooperación internacional se realiza de dos formas: a través de la Cooperación o Ayuda Internacional para el Desarrollo (CID) y la Ayuda Humanitaria. La forma típica de prestación de la ayuda al desarrollo es el proyecto. El financiamiento de los proyectos puede ejecutarse a través de donaciones. “El mayor beneficio se consigue cuando los donantes ayudan a generar conocimientos… se trata de un bien público mundial, que es precisamente lo que la ayuda [xxxv] trata de financiar. (BM, 2005).[xxxvi]

“La cooperación según su fuente de financiamiento puede ser bilateral oficial, multilateral o no gubernamental. (MINVEC, 2000).[xxxvii]

La trayectoria de los organismos financieros internacionales revela que su actuación ha preservado los intereses de las potencias hegemónicas y que la meta que proclaman de un mundo sin pobreza, con crecimiento y estabilidad, en la realidad no constituye su objetivo fundamental. En la promoción que han hecho de los modelos neoliberales en América Latina han fungido como instrumentos esenciales del gran capital trasnacional y han llevado a un círculo vicioso en las economías nacionales, donde las necesidades de recursos que padecen los países, como consecuencia del subdesarrollo, hacen que éstos pidan préstamos a las instituciones financieras para paliar necesidades corrientes y muy poco a generar capacidades productivas o al perfeccionamiento de las presentes.

Otros problemas actuales de la CID (Taladrad, 2004) [xxxviii] son la disminución de los recursos financieros destinados a la cooperación, los cambios en el destino sectorial de la ayuda al desarrollo, la bilateralización de la cooperación y una disminución de la canalizada a través de Naciones Unidas u otros organismos bilaterales, el incremento de la condicionalidad de la ayuda oficial al desarrollo, de las formas no tradicionales de negociar y el reforzamiento de las tendencias políticas.

La Cooperación Internacional, en su acepción de fuente del desarrollo socioeconómico local en el territorio se presenta como un proceso contradictorio. Por un lado, ella debe lograr la concepción del desarrollo endógeno que presupone la gestión local de recursos para el desarrollo a partir del potencial de desarrollo territorial (PDT), fomentar la autogestión, lleva implícita la descentralización de recursos con decisiones que se toman de abajo hacia arriba y por otro, debe actuar a nivel local con recursos aportados desde afuera por fuentes exógenas tomando decisiones de arriba hacia abajo con concepciones centralizadoras de recursos y decisiones. Esta realidad, vista superficialmente, puede poner en tela de juicio la viabilidad de la cooperación internacional como fuente de desarrollo a nivel local, máxime cuando las carencias de recursos y la coyuntura internacional aconsejan fomentar el desarrollo a partir de los recursos endógenos, en busca de independencia y soberanía en el desarrollo socioeconómico del país.

Sin embargo, es sabido que las políticas de desarrollo no siempre han favorecido la creación de capacidades de reciclaje de recursos al interior del territorio (región, municipio, comunidad), y en muchos casos se han generado verdaderos enclaves que aportan sus ingresos directamente al presupuesto nacional. El municipio se beneficia de ellos solo a través del proceso de redistribución de la renta nacional que realiza el gobierno central. Este es el caso del municipio objeto de estudio.

Los territorios con bajo nivel de desarrollo industrial y donde predomina la agricultura, carecen de los recursos necesarios para realizar grandes inversiones. El desarrollo apoyado en fuentes de la cooperación internacional no puede planificarse de forma arbitraria, sino en estrecha coordinación con los actores-interesados a nivel local, partiendo de un diagnóstico minucioso de las necesidades más perentorias de la población del municipio. Cada proyecto debe responder a necesidades declaradas por los posibles beneficiarios, quienes harán propuestas de soluciones con perspectiva de “traje a la medida” que será conciliado con los intereses macro y meso regionales.

La CID debe enfocarse por el municipio hacia sectores y objetivos priorizados, generadores de sostenibilidad, de manera que una vez retirada la fuente de financiamiento externo, las comunidades hayan logrado una autonomía tal que puedan seguir el/los proyectos por si solas, apoyadas por los gobiernos locales o provinciales solo en los casos que los recursos no puedan ser generados u obtenidos al interior del municipio o comunidad.

La cooperación internacional como fuente de financiamiento al desarrollo tiene un papel importante en los países pobres, a pesar de los inconvenientes que debe sortear en un mundo caracterizado por la creciente politización, la carencia de recursos y la competencia cada vez más aguda por los escasos recursos que aparecen. Ser competitivos y eficientes es una impronta a vencer por los posibles beneficiarios de ella en el nivel territorial.

Estrategia de cooperación internacional

El desarrollo local exige planificar y dirigir de forma consciente el proceso de desarrollo económico local con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de la población que habita el territorio y ello debe quedar plasmado en la política de desarrollo de los gobiernos locales. Dicha política debe basarse en la explotación eficiente de los recursos locales, sin menospreciar las aportaciones que pueden hacer las fuentes exógenas, que bien direccionadas, se incorporan al proceso de desarrollo para fortalecer las capacidades endógenas.

Las políticas de desarrollo local deben ser estratégicas, integrales y de largo plazo en su planificación y ejecución. Su diseño incluye objetivos y medios para lograrlos sobre la base de un diagnóstico claro de sus problemáticas, recursos y necesidades. Debe ser reflejo de la voluntad política de los gobiernos locales de resolver prioridades y repartir los costos y beneficios del proceso de cambio propuesto. En ellas debe estar presente la amplia participación de las comunidades y sus actores, de los diferentes agentes económicos públicos y privados, partiendo de la adaptación a las condiciones propias de cada localidad y a objetivos y aspiraciones de sus habitantes.

Varias son las definiciones de estrategia (Quinn (1980)[xxxix], Thiétart (1990)[xl],Benaissa (2004)[xli]).

En general, las estrategias persiguen la disposición adecuada de los recursos y medios disponibles para conseguir un fin: ganar la lid competitiva. Y con ello asegurar una posición que permita obtener mayores resultados.Toda estrategia comprende la formulación básica de una Misión, una Visión, propósitos y objetivos, las políticas y programas para llevarlas a cabo y de los métodos para asegurarnos de que la implementación cumpla con los fines propuestos.

A nivel local es necesario planificar el uso de los recursos locales partiendo del principio de que no quede recurso de interés económico que no se utilice, que se usen las capacidades y potencialidades locales locales bajo el control y el liderazgo de agentes locales. La Estrategia de Cooperación Internacional debe alcanzar el doble propósito de proximidad y visión integrada sobre desarrollo local. El concepto de proximidad está dado por el grado de participación de los actores y la correspondencia entre la percepción de los actores y los facilitadores. La visión integrada da la posibilidad de hacer uso de las sinergias entre los instrumentos y los modos de financiamiento actualmente presentes en el territorio que permiten alcanzar altas cotas de sostenibilidad productiva, ambiental y humana.

Para la Estrategia de Cooperación Internacional en municipios de bajo desarrollo industrial, como es el caso de Majibacoa, es de gran importancia elevar la productividad mediante mejoras en las prácticas tecnológicas agropecuarias e industriales, tanto en los métodos de cultivo y crianza como en la introducción de nuevas tecnologías, ya que aporta los elementos para la sostenibilidad de la producción y disminuye la presión sobre los recursos del territorio.

De igual manera debe proponerse la creación de una masa crítica de recursos humanos altamente calificados, capaces de sostener el desarrollo en el largo plazo.
La sostenibilidad ambiental es una condición que permite el logro en el tiempo de la sostenibilidad productiva sobre la base de una disminución de la vulnerabilidad del ecosistema.

Las dos condiciones anteriores son la garantía del equilibrio social y el mejoramiento continuo de las condiciones y calidad de vida en un sistema rural.

La Estrategia de CID diseñarse sobre la base de las potencialidades endógenas, combinando la forma centralizada con la forma descentralizada, garantizando la activa participación de sus actores sociales en la determinación de las necesidades de desarrollo, y en la elaboración y ejecución de los proyectos.

2. Procedimiento metodológico para la elaboración de una Estrategia de Cooperación Internacional para el Desarrollo en un municipio.

Se definen tres variables de trabajo que se tratan de forma explícita en el segundo capítulo de la tesis. Son ellas:

Participación en la CID: Caracteriza el nivel en que el municipio y los diferentes actores sociales, locales y externos, participan en acciones de CID, las fuentes de que se nutre el proceso y la forma en que la CID se inserta en la prioridades del desarrollo local. La caracterizan nueve indicadores.

Aportes de la CID: Define la forma concreta en que se materializa la CID en el territorio y la ubicación del municipio en el contexto provincial. Está compuesta por nueve indicadores.

Potencial de Desarrollo de la CID en el Municipio: Es la capacidad existente en el municipio para absorber acciones de CID incluidas en proyectos encaminados al mejoramiento de las condiciones de vida de la población del territorio. Abarca todo el conjunto de factores materiales, humanos, financieros y medioambientales que se dan en un momento y espacio dados, y que pueden ser activados en función del desarrollo local. Está representado por dos indicadores.

3. Estrategia para la Cooperación Internacional del Municipio Majibacoa (EPCI).

Estrategia: Establecer, desde la Estrategia Municipal, vías y mecanismos para elevar la cultura de trabajo con la CID a nivel local. El establecimiento de ella contribuye al perfeccionamiento de la gestión local del gobierno encaminada al desarrollo socioeconómico, político y cultural con el objetivo de satisfacer las necesidades crecientes de la población mediante la participación activa y consciente de las empresas, organismos y comunidades en general.

VISIÓN: La CID: constituye una fuente de financiamiento al desarrollo local presente en todos los Consejos Populares, tiene un rol importante en la solución de los problemas puntuales declarados como necesidades sentidas de la población, apoya el desarrollo endógeno, contribuye a la sostenibilidad económica, ambiental y humana en el territorio y las comunidades participan activamente en el diseño, gestión y administración de la cooperación internacional.

Objetivo estratégico:

Desarrollar una cultura de trabajo con la Cooperación Internacional para el desarrollo del Municipio Majibacoa.

Acciones:

  • Fortalecer la estructura administrativa del muncicpio.
  • Implantación del sistema de trabajo de la CID en el municipio.
  • Evaluación del trabajo de la CID.
  • Capacitación.
  • Elaboración de proyectos y presentación a fuentes de financiamientos para apoyar la implementación de la estrategia de perfeccionamiento de la CID.
  • Recursos financieros y materiales.

Plan de acción para el municipio.

Incluye acciones con sus responsables, participantes, fechas de ejecución y aseguramiento material.

Conclusiones:

  • No existe un sistema de estadísticas basado en series cronológicas de datos, viable a la gestión estratégica del Gobierno local, ni un estudio sistematizado de las potencialidades de desarrollo municipal, lo que se logra con el procedimiento metodológico empleado en la presente investigación, evidenciándose su viabilidad para este tipo de estudio a corto plazo.
  • El municipio Majibacoa es un municipio con un bajo nivel de desarrollo económico y un nivel de desarrollo social medio, limitados por la carencia de infraestructuras básicas y en un área geográfica con un ecosistema frágil y vulnerable.
  • El municipio cuenta con potencialidades endógenas, que se pueden aprovechar para construir un desarrollo local sostenible y competitivo. Dichas potencialidades están definidas en el Estudio de Vulnerabilidad a la Inseguridad Alimentaria realizado por el PMA, en las Líneas Directrices definidas por el PDHL y enriquecidos en el diagnóstico realizado por el autor, contemplándose posibles acciones de carácter social y económico, con las cuales se espera, mejoren sensiblemente la calidad de vida, el sentido de pertinencia de los pobladores hacia sus localidades, se generen nuevos empleos y crezca la economía local de una manera sostenible.
  • El municipio reporta presencia de CID en el periodo analizado, pero su entrada no es el fruto de la gestión municipal de proyectos propios. La utilización de los recursos captados no ha sido eficiente y si poco eficaz, mientras la efectividad no es posible medirla para todos los casos por la naturaleza de los proyectos ejecutados, siendo perceptible mayormente en aquellos encaminados a la gestión del conocimiento como factor de desarrollo local.
  • La Estrategia para el Perfeccionamiento de la Cooperación Internacional para el Desarrollo del Municipio Majibacoa propuesta resulta pertinente hacia los mandatos y estrategias locales y nacionales, a la colaboración de las Agencias de Naciones Unidas radicadas en Cuba, así como también hacia los Objetivos y Metas del Milenio. Ella contempla las particularidades del territorio y es viable en lo económico, lo político, lo social y ambiental.

Bibliografía citada

[i] Ver INIE. (Instituto Nacional de Investigaciones Económicas). 2004. Objetivos de Desarrollo del Milenio. Primer Informe de Cuba. Pág. 40. (El Objetivo 8, establece “Desarrollar alianzas globales para el desarrollo.)
[ii] “Según cálculos realizados por las Naciones Unidas, para alcanzar los Objetivos del Milenio debería duplicarse la asistencia oficial al desarrollo procedente de los 23 miembros del Comité de Asistencia para el Desarrollo (CAD) de la OCDE, que ascendería aproximadamente al 0,4% del ingreso nacional bruto de estos países, todavía por debajo de la referencia del 0,7% que fue el compromiso asumido internacionalmente.
Sin embargo, a pesar de los llamados internacionales, los flujos de AOD apenas alcanzan el 0,25% del PNB de los países donantes. La realidad denota la falta de voluntad de los países desarrollados, que por demás, al no
[iii] La Oficina del Informe sobre Desarrollo Humano del PNUD calcula que, si se mantienen las tendencias actuales, es probable que más de 70 países, en su mayoría de África, no logren alcanzar las metas trazadas hasta el 2015.
[iv] En el presente trabajo se asume como eficiencia la utilización de los recursos mínimos posibles para lograr el mayor impacto posible en cada intervención; la eficacia como la utilización correcta de los recursos en tiempo y lugar; y la efectividad como el impacto que se logra con la utilización de los recursos provenientes de la CID, lo que no niega el hecho sabido de que las estrategias van encaminadas hacia la eficiencia.
[v] Munster, B. 2002. Notas del autor. Conferencia. Pasado, Presente y Futuro en el Desarrollo Humano. Seminario Enfoque Conceptual, Prácticas, Metodología de Trabajo y Mecanismos de Cooperación Internacional. Las Tunas, Cuba. 28 al 30 de octubre del 2002.
[vi] Marchioni, M. 1994. La utopía Posible. Santa Cruz de Tenerife – Las Palmas de Gran Canaria.
[vii] Rodríguez, C. R. 1987. Letra con Filo. Edit. Ciencias Sociales, La Habana.
[viii] Heckman, J. 2004. Globalization and successful labor market. Conferencia Magistral del Premio Novel de Economía en el VI Encuentro Internacional Globalización y Problemas del Desarrollo. La Habana, 9 al 13 de febrero de 2004.
[ix] Mc Laughlin, A. 2002. El fin del desarrollo, Cuba Verde. En busca de un modelo para la sustentabilidad en el siglo XXI. Compilación de trabajos hecha por Carlos J. Delgado Díaz. Editorial Félix Varela. La Habana. Pág. 418.
[x] González, M. I. 2000. Tesis presentada en opción al grado científico de Master en Desarrollo Regional. Universidad Camagüey. Pág.7.
[xi] PNUD. Desarrollo Humano. Informe 1990. Bogotá, Editorial Tercer Mundo, Pág. 13.
[xii] CNUMA. 1992. Preámbulo de la Agenda 21, adoptada por la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Desarrollo en Río de Janeiro, Brasil.
[xiii] Gago, A. 1993. Planificación y Desarrollo Regional; Curso Latinoamericano de Desertificación, Mendoza. Noviembre de 1993.
[xiv] van Hemelryck, L. 2002. El enfoque sistémico del desarrollo económico local. Seminario-Taller El Desarrollo Económico Local. Montevideo, 19-21 de marzo de 2002.
[xv] Montejo, R. 2005. La gestión del desarrollo territorial desde los gobiernos locales. Borrador de Tesis en opción al grado de Doctor en Ciencias. Capítulo I. Las Tunas. Cuba.
[xvi] Castro, F.2004. Intervención especial en la clausura del VI Encuentro Internacional de Economistas sobre Globalización y Problemas del Desarrollo. La Habana. 9 al 13 de febrero del 2004, (notas del autor), en Informe de Relatoría del VI Encuentro Internacional de Economistas sobre Globalización y Problemas del Desarrollo. Pág. 16. (Versión digital). Varios ponentes coinciden con este punto de vista.
[xvii] Citado por el Centro de Investigaciones de la Economía Mundial (CIEM) en: Investigación sobre Desarrollo Humano 1996 de la Investigación sobre Desarrollo de Comisión del Sur. Desafío para el Sur. México. D.F. Fondo de Cultura Económica, 1991, p 20 – 24.
[xviii] PNUD. 1990. Desarrollo Humano Informe 1990. Bogotá, Editorial Tercer Mundo, Pág. 34
[xix] Rojas. 2004. Pasado, presente y futuro en desarrollo humano. Escuela Nacional de Salud. Cuba.
[xx] PNUD.2005.Informe sobre Desarrollo Humano. en www.undp.org/reports/global/2005/espanol/pdf/HDR05/sp_chapter_1.pdf.url
[xxi] Vázquez Barquero, A. 2000. Desarrollo endógeno y globalización, en Revista Eure. Vol. XXVI; No. 79, Santiago de Chile, Pág. 53.
[xxii] Viñas-Román, J. 1997. Las instituciones de Educación Agrícola Superior en el desarrollo sostenible frente a los procesos de Globalización. COMUNICA. San José, Costa Rica. Pág. 36-39.
[xxiii] Moreno, R. 1999. Materiales de Aprendizaje sobre la Investigación Agropecuaria. Curso de Entrenamiento Especializado a Lideres del Desarrollo Tecnológico en América Latina. Colegio de Postgraduados de la Agricultura de México. Puebla México.( en Soporte Digital. ICRA, Holanda).
[xxiv] Tomado de Bayón Martínez, P. 2002. El medio ambiente, el desarrollo sostenible y la educación. Revista Educación. No. 105/enero-abril, 2002/segunda época/ La Habana. Pág. 5.
[xxv] El territorio es un nivel mesoeconómico y en la presente investigación se asume como territorio al municipio.
[xxvi] Citado por Boisier, S. 2005. ¿Hay espacio para el desarrollo local en la globalización? Revista de la CEPAL 86 agosto2005. Pág. 52.
[xxvii] Garofoli, G. (1995). Desarrollo económico, organización de la producción y territorio, en A. Vázquez-Barquero y G. Garofoli (comps.), Desarrollo económico local en Europa, Madrid, Colegio de Economistas de Madrid.
[xxviii] Ob. Cit. Pág. 55.
[xxix] Sobre el concepto de potencial de desarrollo se puede ver trabajos de Vázquez – Barquero y De Mattos, donde ambos coinciden con el criterio de que dicho potencial es el punto de partida para cualquier proceso de Desarrollo.
[xxx] Citados por María Amparo Toral, 2005. Ob. Cit.
[xxxi] “Según cálculos realizados por las Naciones Unidas, para alcanzar los Objetivos del Milenio debería duplicarse la asistencia oficial al desarrollo procedente de los 23 miembros del Comité de Asistencia para el Desarrollo (CAD) de la OCDE, que ascendería aproximadamente al 0,4% del ingreso nacional bruto de estos países, todavía por debajo de la referencia del 0,7% que fue el compromiso asumido internacionalmente.
Sin embargo, a pesar de los llamados internacionales, los flujos de AOD apenas alcanzan el 0,25% del PNB de los países donantes. La realidad denota la falta de voluntad de los países desarrollados, que por demás, al no
[xxxii] La Oficina del Informe sobre Desarrollo Humano del PNUD calcula que, si se mantienen las tendencias actuales, es probable que más de 70 países, en su mayoría de África, no logren alcanzar las metas trazadas hasta el 2015.
[xxxiii] Según el BID (2003), la participación no es simplemente una idea sino una nueva forma de cooperación para el desarrollo, que plantea a los gobiernos y a las instituciones una renovación en las prácticas tradicionales y el desarrollo de una nueva actitud de cambio e innovación. Sus principios fundamentales son claros y sencillos, y sus raíces provienen de los grupos de base y de las iniciativas de desarrollo. Como proceso, considera que los individuos y las comunidades deben estar involucrados en las decisiones y programas que afectan sus vidas. Como resultado, consiste en lograr individuos y comunidades capacitadas para desenvolverse con mayor
[xxxiv] Tobar Manzano, L. (2005). Manual Metodológico para la Presentación de Proyectos de Cooperación Nacional e Internacional Enfocados a Medio Ambiente. Popayán, Colombia. En www.gestiopolis.com
[xxxv] Se refiere a la ayuda al desarrollo.
[xxxvi] B.M. Ob. Cit.
[xxxvii] MINVEC. 2000. Primer Seminario a Representantes de la ESCO. La Habana, 24 y 25 de mayo del 2000.
[xxxviii] Taladrid, R.2004. Intervención en el Balance Anual del Ministerio de la Inversión Extranjera y la Colaboración Económica. Año 2004. La Habana. Pág. 2.
[xxxix] Citado por Pérez, J. 2004. Notas del autor. Conferencia en el Curso de Superación de Cuadros. Las Tunas.
[xl] Idem.
[xli] Idem.

Cita esta página

Ricardo Botello Juan Idalberto. (2007, marzo 20). Cooperación internacional para el desarrollo en Majibacoa Cuba. Recuperado de https://www.gestiopolis.com/cooperacion-internacional-para-el-desarrollo-en-majibacoa-cuba/
Ricardo Botello Juan Idalberto. "Cooperación internacional para el desarrollo en Majibacoa Cuba". gestiopolis. 20 marzo 2007. Web. <https://www.gestiopolis.com/cooperacion-internacional-para-el-desarrollo-en-majibacoa-cuba/>.
Ricardo Botello Juan Idalberto. "Cooperación internacional para el desarrollo en Majibacoa Cuba". gestiopolis. marzo 20, 2007. Consultado el . https://www.gestiopolis.com/cooperacion-internacional-para-el-desarrollo-en-majibacoa-cuba/.
Ricardo Botello Juan Idalberto. Cooperación internacional para el desarrollo en Majibacoa Cuba [en línea]. <https://www.gestiopolis.com/cooperacion-internacional-para-el-desarrollo-en-majibacoa-cuba/> [Citado el ].
Copiar

Escrito por:

Imagen del encabezado cortesía de trotoar en Flickr